La Fuerza Del Amor

40. Una Noche Contigo

40

Una Noche Contigo

Chris

Conducía por las calles de la ciudad en busca de alguna tienda abierta para comprar un paquete de cervezas, tenía planeado en pasar una noche con Piers nada fuera de lo común ya que solamente sería noche de tragos, aunque siempre terminan siendo un desastre o terminaban haciendo cosas indebidas, bueno técnicamente no porque se encontraban saliendo desde hace bastante tiempo. Se detuvo enfrente de una tienda, bajo del coche y entro a dicho lugar de una manera rápida se dirigió hace el refrigerador donde estaban las cervezas. Por un momento se detuvo al escuchar unas voces familiares, se escondió el pasillo de latería y pudo a escuchar a Piers hablando con una mujer.

—Te había extrañado, hermano. — dijo la mujer.

—Paige, tu sabes que siempre estoy ocupado con el trabajo. — explico Piers. — Es complicado ser teniente porque Chris depende de mí ayuda cuando vamos de misión.

¿Paige? ¿Acaso Piers tenía una hermana? Nunca se lo había mencionado, pero se sentía un poco alagado porque lo haya mencionado en su conversación, si Piers supiera que espiaba su conversación posiblemente se enfadaría con él, es decir todos lo conocían como un hombre sobreprotector con sus seres queridos y Piers no era la excepción. En fin, Chris dejo de darle importancia y fue una vez más a escoger las cervezas comenzaba a arrepentirse por darle la noche a Claire y León en su apartamento sabía que su hermana necesitaba de tener una vida y era el momento para apoyarla. Aún continuaba escuchando la conversación de su novio con Paige, era un poco incómodo puesto que sabía de la plática y era sobre las relaciones sentimentales de Piers Nivans.

— ¿Quieres que te presente a mi amiga? — le pregunto Paige a Piers.

—No. — respondió Piers con brusquedad. — Tengo a alguien en mi corazón y es muy importante para mí, no pienso cambiarlo por nada del mundo. Me ha hecho bastante feliz como para abandonarlo de esa manera, lo amo demasiado y ha hecho cambios en mi vida.

Paige se paró en seco al escuchar que su hermano estaba hablando con palabras masculinas «Oh Piers metiste la pata», pensó Chris. Se volvió a esconder lejos de ellos para no ser vistos, pero su intento fue inútil.

— ¡Capitán! ... Digo ¡Chris! — exclamo Piers de felicidad la verlo. — ¿Qué hace por aquí? Pensé que nos íbamos a ver en el mismo de lugar de siempre.

Paige miró a verlo a los ojos fijamente. Por otro lado, Chris no sabía que responder estaba seguro de una cosa Piers deseaba ser salvado por él para evitar una cita con alguna amiga loca de su hermana, Chris una vez paso eso con Claire cuando tuvo que salir con una chica llamada Cecilia, quien resultó ser un dolor agudo de cabeza.

—Solo vine a comprar unas cervezas. — respondió Chris mientras enseñaba el paquete. — Ya sabes cómo es Fred, sino hay cervezas no quiere jugar pocket.

Piers hizo una ligera sonrisa al verlo.

—Vale, Chris. — dijo Piers. — Nos vemos en mi apartamento para la noche de pocket.

—Oye, pensé que iba a quedarme contigo. — chillo Paige.

—No, mamá dijo que ibas a regresar a casa. — comentó Piers. — Es inseguro para ti.

Paige comenzó a quejarse como una niña pequeña a quien no le quería comprar un dulce, Chris se despidió de Piers para pagar las cervezas y hacer un poco de tiempo para que se fuera Paige, le pareció curioso el parecido de ambos hermanos tenían ciertas características físicas comunes, lo más curioso sería saber las mentiras dichas a la joven porque era difícil explicar la relación que ambos tenían, solo esperaba que su felicidad durara por un tiempo largo.