Capitulo 32

4.9K 639 186
                                    

POV Gabriel.

Las pequeñas luces naranjas le daban al Café un ambiente más hogareño. La música proveniente del otro lado del lugar aumentaba esa sensación.

Vi la hora en mi reloj: 1:37.

Era bastante tarde. Seguramente Papillon estaba terminando el patrullaje.
Fue muy amable conmigo cuando le pedí si podía patrullar sola hoy, ya que yo tenía un compromiso. Me dijo que no me preocupara, que ella se ocupaba.

Era bastante tarde, pero la música continuaba y yo debía esperar hasta que el show terminara.

Suspiré cansado y descansé mis brazos en la mesa.

Una mano se apoyó en mi hombro con dulzura y la otra puso una taza de café al frente mío.

–Ten.

Levanté la vista y le sonreí.

–Gracias, Lottie.

Charlotte se sentó en la silla continua.

–Gracias a ti por venir.–puso un mechón rubio detrás de su oreja.– Lo aprecio mucho.

–Sabes que no tienes que agradecer, eres mi amiga y es mi obligación venir.–respondí sonriente.

Entonces sin poder evitarlo bostecé.

–Cada día te veo aún más agotado–dijo Charlotte–¿Todo bien?

Tomé la taza y empecé a darle pequeños sorbos.

–Más o menos.–admití pensando en Marinette y todas las noches en las que fui a su ventana.

–Sabes que puedes confiar en mí.

Miré sus grandes ojos verdes.

–Lo sé, Lottie, lo sé.–bajé la mirada a mi taza de nuevo– Son problemas sin importancia.–mentí.–No te preocupes.

–¿Sigues decaído por dejar que André use tu imagen para promocionar su hotel?

Dudé un segundo.

–Si.–volví a mentir.–No me agrada que todo el mundo vea mi rostro en una gran pancarta. Yo no quiero ser modelo, quiero ser diseñador.

Charlotte hizo una mueca.

–Sigo sin comprender porqué odias tanto las fotos.– fruncí el ceño.– Eres un chico muy atractivo.–continuó y cómo si recien hubiera realizado lo que dijo, un leve sonrojo se instaló en sus mejillas.–N-no quiero decir eso.–tartamudeó– N-no digo que seas feo. Pe-pero lo digo so-solo como amiga...

Levanté una mano para que parara.

–Lo sé, tranquila.–le dije pasivo.– Sólo quiero que me reconozcan por mi trabajo y no por mi imagen.

–¿Porqué no te gusta tu imagen?

«Porque me parezco a él» pensé.
A pesar de haberle perdonado aún no podía olvidar todo lo que nos hizo pasar a mi madre y a mí.

Me encogí de hombros sin responder.

Charlotte puso su mano sobre la mía y masajeó el dorso con su pulgar.

Eterno [MLB] // Gabrinette.Where stories live. Discover now