Capítulo 23

159 13 1
                                    

Primer amor


Si antes de darle la sentencia a los presos sentía bastante nervios, ahora lo siento mucho más, todos los que estábamos en el cuarto fuimos en el hospital, y sí, bueno casi todos estamos en el hospital — menos el juez que tenía otros pendientes —, el comisario y yo tuvimos que venir por si se escapaban ambos presos, pero eso lo dudo mucho, ya que por lo que pude ver tenían una que otra herida profunda, a menos de que tengan una fuerza sobrenatural para poder levantarse lo creo, los familiares pues tuvieron que venir para saber como estarían. Ya llevábamos como hora y media y para llegar tuvimos muchos contratiempos así dando más emoción al asunto: no llegaba la ambulancia, había uno que otro semáforo que estaba en rojo, un familiar se desmayo al verlos... En fin, un montón de cosas pasaron antes de llegar aquí.

Lo más probable es que, el comisario y yo, cuando regresamos a la comisaría lo primero que haremos sería ver si hay alguna pista o algo que nos pueda ayudar para saber qué fue lo que paso exactamente hace unos momentos en la comisaria, porque lógicamente por lo menos una persona fue la que ocasionó esto, sea bueno o malo tendremos que investigar en el cuarto para tener más detalles o por lo menos detener a la persona causante de que estemos en el hospital. Me alejo de esos pensamientos y miro como esta sufriendo la familia de los presos, cada uno preocupado por su familiar, a su manera, notandose la diferencia de una a otra: la otra está toda desconsolada, parece que nada los podrá consolar más que saber que está bien su pariente y que está fuera de peligro, en cambio, la otra familia está más seria como si no le afectará en lo absoluto la situación en la que están pasando, sin inmutarse de que estamos en una situación en cierto modo de riesgo, pero si tuviera que descifrar cual familia es de los dos, la sería sería de Bill, y la desconsolada de Megan, al menos eso sigue mi corazonada.

Pasan y pasan los minutos y ninguna noticia de ambos. Los dos tenían una que otra cortada, tenían heridas profundas que no se trataron rápido por los contratiempos que tuvimos. Deduzco que no sólo fue una persona, sino dos, por lógica una atacó a uno, ya que una persona no podría hacer esos cortes rápido, con el tiempo que estaba a oscuras el cuarto sería un poder sobrehumanos hacer eso, otra cosa que apoya mi teoría pero no estoy segura, es que si fuera una persona quien eso se escucharía un grito y después otro no al mismo tiempo como sucedió, pero lo que no apoya tanto mi pequeña teoría es que también podría haber atacado al mismo tiempo con dos armas blanca y luego atacar a uno y después a otro, muy rápido.

En estos momentos me da ganas de fumar un cigarro, aunque ya llevo bastante años que no he fumado, me da ganar de sentir otra vez el sabor de la nicotina en mi boca, probarlo otra vez, mi ansiedad me ataca otra vez y no creo poder aguantarlo más, esto es cansado, todo es cansancio. Admito que soy una persona demasiado terca y este es mi precio por ser una persona muy terca: Tener un caso que lo único que me ha traído a mi vida son problemas. Me dan ganas de retirarme del casó, pero no, no me considero una persona que se rinde fácil, lucha y lucha por lo que quiere, lo que me gusta es que si termino el caso pasarian dos cosas, una es que fui la una detective que pudo dar con la identidad del asesino de cold street, y la otra es que podré disfrutar el día que termine al fin el caso, no estaría mal que aparecía en el periódico de Overlond como “Lisa Thompson, la detective que pudo atrapar al asesino de cold street ” de tan sólo pensar en ese futuro algo lejano, se forma una pequeña sonrisa en mí, creo que debería de pensar en que pose usar para salir en el periódico de la ciudad bien.

La puerta de una habitación se abre y de ella sale un doctor y rápido la familia desconsolada rodea al doctor, me sorprende el grado de angustia que tiene esa familia.

— ¿Esta bien mi hija? Doctor —suplicaba saber la mujer. Mientras que la familia sería sólo observaba al doctor desde donde estaban sentados.

El asesino de cold street Donde viven las historias. Descúbrelo ahora