18.-Palabras Exactas

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La ciudad de Japón estaba cubierta por un manto de terciopelo negro, ni una sola estrella adornaba el cielo solo la luna llena que brillaba en gran manera, reflejando su luz sobre el también oscuro mar.

-Ese chiquillo se me escapó (la voz de un hombre sonó) en verdad le hace honor a su apellido (dijo tras soltar el humo del cigarrillo)

-¿Lo está elogiando? (Fue cuestionado)

-Claro que no (entrecerró los ojos) sólo reconozco lo que es (miro a sus hombres)

-¿Que es lo que sigue jefe? (Una voz se hizo sonar)

-Buena pregunta (sonrió con malicia mientras tomaba un objeto de punta afilada)

-¿Jefe? ¿Que es lo que hace? (Hablo con miedo el joven castaño)

-No te muevas (dijo tras soltar su cigarrillo)

Un par de hombres tomaron al joven castaño para que no pudiera uir, aquel hombre con una cicatriz en su rostro camino hacia el, levantando el objeto para que lo mirara de cerca, sin inmutarse más un grito fue escuchado sólo para los que estaban cerca, ya que la soledad y lejanía de la playa lo ensordecieron.

-¡Auch! (Se quejó con ligereza una voz femenina) no tan fuerte

-Te quejaste tan solo con una flexión (la miro un hombre de cabellera negra) tienes una leve fisura

-¿Es algo grave? (Le cuestiono un azabache que estaba parado)

-No del todo, necesitara que le coloque una muñequera (hablo el doctor tras colocar un gel en la muñeca de la joven)

-¿Por cuanto tiempo tendré que usarla? (Sus orbes azules se posaron en aquel doctor)

-Alrededor de una semana además de no hacer esfuerzos, si quieres sanar por completo (la miro) ¿como te haz hecho este golpe? (Cuestiono)

-Bueno (ella miro a Itachi que negó con la cabeza) me he caído y metí mi mano para no lastimarme tanto (mintió encogiendo los hombros)

-Ya veo (sonrió el doctor) es la manera más común de lastimarse (se sentó en su escritorio)

Mientras el doctor escribía la receta médica, Itachi le ofreció su mano a Adela para que bajara de aquella camilla, ella la tomo sin reproche bajando con cautela, aquel doctor término de escribir se levanto.

-Te he recetado gel antiinflamatorio (señalo la receta) es probable que mañana el cuerpo te duela un poco más (la miro) para eso los analgésicos (subrayo el nombre de las medicinas)

-Muchas gracias Doctor (sonrió Itachi tomando la receta) me asegurare de que tome todo

La joven de ojos azules sonrió ante la acción de Itachi, era muy serio pero en el emanaba un instinto bastante protector que resultaba tan natural, si de esa manera era con ella no se imaginaba como sería si se tratara de Sasuke o alguien más cercano al azabache. El moreno se encargó de pagar la cuenta y también los medicamentos de la joven, sin dejarla si quiera quejarse, todo siguió en silencio hasta que entraron en el auto.

-Adela (el la llamo mirando al frente) no quiero que pienses que estoy de acuerdo con mentir pero (sujetó el volante)

-Yo se que en este tipo de situaciones es necesario (su mirada azul se fijó en el) no puede ser conveniente para nadie que se ventilen los asuntos policíacos (sonrio)

-Gracias (hablo el moreno nuevamente) ahora si me haces el favor de indicarme el camino a tu casa (la miro, haciendo que ella asintiera)

I don't need a gangster •Uchiha Obito•Where stories live. Discover now