I don't need a gangster •Uchiha Obito•

26.-Paciencia

Los rayos que salían del sol en el atardecer estaban brillando con gran manera dando su magnífico esplendor, descansando sobre una terraza donde se encontraba un azabache con pálida tez caminando sobre sus alrededores. Mientras tanto en un lugar prestigioso entre las empresas cafetaleras decorando su infraestructura con mesas y sillas de material rústico, sillones con distintas tonalidades, en la barra donde realizaban los pedidos directamente se encontraban un par de jóvenes esperando lo ordenado.

-Un expreso late con muffin de moras -Anuncio una joven con corta cabellera rubia- para Itachi -Sonrió.

-Es para mi -El azabache sonrió levemente tomando su pedido.

-Debo imaginar que frapuccino napolitano mediano con pastel red velvet -Levanto sus cejas sonriendo nuevamente con carisma- es para Adela -Anuncio tranquila leyendo un nombre escrito en el vaso transparente.

-Muchas gracias -La ojiazul sonrió tomando su postre.

-Gracias a ustedes por preferirnos -Dio una última sonrisa aquella joven con ojos avellana para seguir desempeñando su trabajo.

Ambos se acercaron a un par de sillones individuales acolchonados acompañados con algunos cojines pequeños tonalidad chocolate, en medio estaba situada una pequeña mesa redonda donde decidieron tomaron lugar reanudando su conversación.

-Entonces -Suspiro el moreno- ¿No tienes idea de porque Sasuke reacción así? -Enfoco sus orbes negras en su compañera.

-No -Levanto el brazo izquierdo- yo solo hablé con Sakura sobre su cumpleaños pero nada relacionado con el -Dejo caer su mano en la rodilla.

-Ya veo -Movió la cabeza Itachi- quizá el mal interpreto las cosas -Frunció su ceño- no podremos saber hasta que las cosas se tranquilicen -Bebió un poco de café- por ahora está un poco dolido -Levanto una ceja.

-Lo entiendo -Dio una media sonrisa con notorio desanimo- pero mi intención nunca fue lastimarlo ni mucho menos traicionar la confianza que me a brindado -Sus ojos azules lo miraron con sinceridad.

-Tranquila -Hablo Itachi- te quiere es una cosa de la que estoy totalmente seguro -Su tono sonó dulce- es algo testarudo solo deja que sus pensamientos enfríen cuando este listo el se acercara -Le dijo tras morder su postre con moras .

-Supongo que razón -Suspiro levantando la mirada azul- tendré que ser paciente -Corto su pastelillo con el tenedor para llevárselo a la boca.

-La paciencia es una virtud -Aquel azabache trato de animarla levantando las cejas- por cierto -Hizo una pausa mientras sus ojos negros se encontraban con los azules- Obito está de regreso en Japón -Soltó sin rodeos.

-¿En serio? -Las orbes de Adela lo miraron con gran emoción mientras tenían un brillo particular- me alegra tanto -Sonrió con todos sus dientes.

-Quien lo hubiera dicho -Una pequeña risa salió de el- solo basto mencionar su nombre para que sonrieras lo hubiera hecho hace mucho -Itachi levanto las cejas mientras seguía sonriendo.

La joven ojiazul escondió el carmesí que estaban tomando sus mejillas con la cascada gris que era su cabello, había reaccionado con tal emoción por escuchar esa noticia, escondida por sus largos mechones volvió a sonreír levemente al no poder contenerse pero aún así se sentía intimidada por la oscura mirada de aquel Uchiha. El tiempo comenzó a pasar era hora de que Itachi volviera a la oficina dejándola en su casa donde entro con bastante tranquilidad sin encontrarse con nadie, subió las escaleras caminando por el extenso pasillo se topó con la puerta que daba al cuarto de Sasuke, se quedo observando por unos segundos aquella manija dorada pero recordó las palabras de Itachi dejo escapar desviando su mirada de nuevo al frente hasta que llego a la habitación donde se quedaba.