The One I Can't Love [TaeDo]

3

"Debes hacer que te tome DongYoung." Susurró su madre del otro lado de la línea.

Hace minutos había llegado su padre a casa y ella había huido a la habitación de baño. Hasta el momento parecía que se había dormido.

"Mamá, no puedo." Dijo avergonzado mientras se acomodaba nuevamente en la cama y acariciaba a Bobby.

"Dodo, no quiero que vuelvas a sufrir."

"Pero cuando RenJun vuelva..." Mordió su lengua mientras prestaba más atención a sus palabras.

"DongYoung... Hoy llamaron de la estación de policía." Dijo de repente. "Dicen que aún hay posibilidad."

DongYoung no pudo evitar sonreír un poco mientras el peso en su alma se aliviaba. "Entonces aún hay posibilidades."

"Nada es seguro... Pero si vuelve, si lo encuentran... Me iré a algún apartamento lejos de aquí DongYoung. Así que quiero que intentes que funcione allá."

"Yo quiero ir con ustedes."

"Hablaremos de eso después." Susurró justo cuando la voz de su padre se escucho fuera, gritando. "Debo colgar ahora."

"Mam-" golpes en la puerta lo hicieron callarse.

La llamada se colgó, dejando a DongYoung preocupado.

"También te he extrañado." Dijo mientras tomaba una carpeta con información clasificada.

"No sé si creerte, has estado tan ocupado para siquiera llamarme." Dijo el hombre al otro lado de la línea.

"Ten, bebé... Sabes que está investigación es demasiado importante y..."

"El trabajo es primero... Lo sé." La voz de Ten sonó desanimada esta vez.

"¿Cómo te va en la compañía?" Preguntó sabiendo que el estado de humor del bailarín mejoraría.

"Tengo un protagónico." Le respondió con calma, pero sabía que por dentro, el beta estaba saltando de la emoción.

"Sabía que lo conseguirías.' Lo felicitó, sonriendo de alivio.

Ten había trabajado demasiado para poder llegar a tener un protagónico. Se lo merecía.

"Quiero mi premio Tae." Susurró logrando que TaeYong se estremeciera. "Quiero ir a esa ciudad y meterme en tu cama durante todo un mes."

TaeYong rió ante lo que parecía una clara invitación a su propia cama. Y diablos que Chittaphon sabía cómo moverse para hacerlo volver loco.

Sin embargo... Había estado acompañado desde hace una semana y más. DongYoung estaba ahí y si Chittaphon lo veía seguro malinterpretaría toda la situación. Lo más probable es que le terminara ahí mismo.

"¿No tienes prácticas?" Preguntó intentado disuadirlo de manera indirecta.

"Tienes razón... Debo practicar para el recital." Afirmó, suspirando después. "Vendrás ¿Verdad?"

"Haré lo posible." Prometió TaeYong, el chasquido de una lengua le hizo notar la inconformidad por la respuesta. "Más de lo posible. ¿Mejor?"

"Mucho mejor." Respondió Ten mientras su voz se aterciopelaba. "En serio extraño que me hagas el amor."

"Yo también extraño eso." Su voz se volvía ligeramente ronca, el momento lo tomó desprevenido. "Estoy en la oficina, no haga que me emocione."

La pequeña risita de Ten le hizo entender que ese era el plan.