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Los días habían sido difíciles, mucho.

Pero JaeMin no se quejaba, y RenJun menos.

Se habían alejado bastante de la zona donde los habían tenido secuestrados. Habían corrido desde aquella noche hasta el día siguiente, cuando el lugar comenzó a verse distinto.

"Hyung, deberíamos ir a la policía." Dijo RenJun a JaeMin, que negó enérgicamente.

"No."

RenJun lo quedó mirando totalmente sorprendido. Habían caminando hasta ese parque y habían buscado una banca alejada del resto.

"¿Por qué hyung? ¿No quieres volver a casa?" Preguntó el niño preocupado, y el otro lo miró con dolor y tristeza. JaeMin dejo de verse fuerte y valiente por segundos. Y RenJun sintió que un nudo en su estómago se apretaba lentamente.

"A mi nadie me espera en casa, RenJunie." Las palabras salieron en un susurro de sus labios, mientras miraba sus zapatos viejos y polvorientos. "Soy huérfano."

"JaeMinie, yo..."

RenJun apretó a JaeMin contra si en un abrazo, acariciando despacio la espalda del mayor mientras lo sentía estremecerse. Estaba llorando.

"No quiero volver al orfanato, RenJun. No quiero. No quiero."

"Necesito encontrar a mamá, tal vez ella junto a mi hermano puedan tenerte en casa, adoptarte." Las esperanzas de RenJun estaban puestas en ese plan improvisado.

JaeMin solo lo miro antes de darle un corto beso en la frente, como lo haría un hermano mayor.

"RenJunie, no nos separemos nunca, por favor."

El menor asintió regalándole una cálida sonrisa.

Había llegado antes de las ocho y apenas entró vio a DongYoung aparecer por el pasillo con una sonrisa en los labios.

"Oh, llegaste... Estoy terminando de cocinar la cena." Dijo para volver a esconderse en la cocina.

Había tomado mucha determinación y unas cuantas palabras con su equipo para que trabajaran sin el, el que pudiera tomarse el día siguiente libre. Estaba casi seguro que apenas comenzaran con los operativos y aprendieran uno por uno a los causantes de todo ese caos, su tiempo junto al Omega y las salidas que le prometió se convertirían en nada.

"Iré a cambiarme." Dijo, mientras Bobby llegaba a darle la bienvenida con lametones amorosos y una cola bailarina.

"Vale." Respondió DongYoung.

Paso por la cocina deteniéndose un rato para mirar al muchacho que le daba la espalda, parecía que estaba moviendo algo en una olla y el olor era definitivamente muy bueno. Con un suspiro siguió su camino por el pasillo hacia su habitación.

Entro en la misma y se dirigió hacia los cajones, buscando ropa cómoda y tomando un baño que no demoró más de diez minutos. Termino de arreglarse, tomando su billetera y el móvil. Dirigiéndose a la cocina como renovado.

DongYoung bajaba unas cuantas vajillas para servir la cena, poniéndose de puntillas y luego colocándolas con cuidado en el mesón de mármol.

Entro y pasando una mano delicadamente por la cintura del Omega, se colocó a un lado para guardar las vajillas nuevamente.

"¿No quieres cenar?" Lo miró confundido, haciendo que TaeYong sonriera suavemente.

"Vamos a ponerlo en contenedores."

The One I Can't Love [TaeDo]Where stories live. Discover now