5

2.3K 373 103
                                    

"Estás desconcentrado." Escuchó que le dijeron, pero se rehusaba a mirarlo. No iba a caer ante provocaciones.

"Déjame en paz." Pidió mientras tomaba su botella con agua y la destapaba.

Si, había tenido muchas cosas en mente los últimos días. Eran demasiadas para ser exactos. Pero nada lo preocupaba tanto como la ausencia de TaeYong.

Había pasado de llamarlo todos los días a una vez cada que se acordaba. Y tenía sospechas, pero no quería pensar que estuviese con alguien más.

"Ten, lo que sea que esté pasando, déjalo de lado, mezclar tus problemas con las prácticas hará que te quiten el protagónico."

"¿Te estás preocupando por mi?" Preguntó con tono burlón, intentando dicimular su malestar.

"Siempre me he preocupado por ti." La frase parecía ser dicha con una intensión más profunda.

"Ya basta JaeHyun." Lo paró, totalmente irritado por alguna extraña razón. "No necesito que te preocupes por mí, ni que hagas de psicólogo intentando que te cuente algo que no quiero. Vete."

El tailandés explotó, mirando directamente a su compañero de elenco, intentando taladrarlo con los ojos. Mandarlo a volar sonaba muy bien.

"Nosotros éramos amigos Chittaphon."

"Pero ya no lo somos, ni eso ni nada." Las orejas del tailandés se tiñeron de rojo de la rabia, era más bajo que Jaehyun pero definitivamente su orgullo era grande.

Las mejillas de JaeHyun se pusieron rojas mientras sus ojos se cristalizaban. Los golpes más duros siempre los había recibido de Ten, siempre supo como hacerlo pedazos.

"Vale." Susurró mientras era observado por el iracundo tailandés. Dio un paso atrás y se dirigió hacia los baños.

Ten siempre supo que JaeHyun estaba enamorado de él, siempre supo que el menor era sensible. Fácil de romper.

Por eso, sabía como alejarlo.

Seguramente iría a llorar, seguramente le dolieron sus palabras, seguramente lo llegue a odiar.

Pero ya no importaba, no cuando Ten sentía que poco a poco estaba perdiendo a su gran amor. A TaeYong.

Porque su amor siempre fue una ráfaga de viento huracanado.

Sonrió mientras Yuta le extendía una pequeña caja de chocolates. Había estado bastante tiempo sin verse con el beta, pero finalmente había vuelto por su tarea.

"Vamos a pasear a Bobby juntos." Pidió el japonés mientras DongYoung comía un bombón.

Sus miradas se encontraron y DongYoung abultó sus mejillas ligeramente mientras sentía el dulce desacerse en su boca.

Lo pensó durante unos segundos, mientras Yuta lo miraba expectante por una respuesta - afirmativa - que no demoró mucho en llegar.

"¿Estaría bien salir sin decirle a TaeYong?" Preguntó al otro y este simplemente se encogió de hombros.

"Somos amigos, y estoy seguro que no has salido de aquí desde que llegaste."

DongYoung sonrió y asintió, claramente no había salido, porque principalmente TaeYong jamás pasaba en casa, y segundo porque hasta ahora, apenas y conocía a alguien que le hiciera ofrecimientos como aquellos.

Ciertamente Taeil dijo que vendría para la merienda, alegando que se aburría demasiado en casa sin Johnny, y que deseaba hacerle compañía. Pero era medio día, y seguramente el Omega estaría llegando a eso de las siete.

The One I Can't Love [TaeDo]Where stories live. Discover now