Capítulo 8

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Estaba arruinando todo como ninguna, Ana se ponía incómoda con mis comentarios pero es que me salían solos, no sentía celos, de verdad, nada más era como el sentido de pertenencia, que era aún peor. Veía como si Ana no estuviera solo conmigo, como si ella también habría hecho lo mismo de la cama con Jadel tres mil veces más, quería ser yo la única con la que se levantara por las mañanas. No quería compartirla con nadie, y uff, de nuevo usando esos términos como si Ana fuera un objeto, que no lo es, pero en el sentido de que la quería a ella junto a mí y no alguien más.

-Sé que no eres mia Ana, no eres de Jadel tampoco, solo tuya. Pero me gustaría que compartieras lo tuyo y entonces juntarlo con lo mio.- No me dedicaba a la poesía pero después de esa frase... Era como las típicas de Facebook de "Me encanta tu belleza exterior e interior" Que idiota.

Ella se quedó quieta, mirando al suelo como si la respuesta estuviera ahí, sin duda se creía que me le había declarado.

-No ahora... Si quieres puede ser nunca también.- Traté de explicarle que no me importaba si me rechazaba.- Aunque seguiremos siendo amigas siempre.- Rematé para ver como los ojos de Ana buscaban los mios.

-No sé, Mimi. ¿Cómo voy a engañar a Jadel todo el tiempo? Solo me separé de él dos semanas...- La excusa se notaba a kilómetros y yo pensaba que como no me había parado ayer era símbolo de que por alguna extraña razón Jadel no la trataba como ella decía o su amor estaba desgastado.

-¿Y te parece normal que te pasen cosas conmigo después de conocernos máximo tres semanas?- Parecía como si la estuviera atacando pero necesitaba respuestas, Ana no hablaba claro sin presión de por medio, más cuando se trataban de sus sentimientos. Después de nuestra presentación había llorado por días y con un poco de táctica no duró mucho antes de contarme lo que a nadie le quería decir aunque fuera evidente.

-No... Igual a veces los impulsos no se pueden controlar.- No podía creer lo que estaba diciendo, ¿En serio, Ana Guerra? ¿Un impulso?

-Seguro, ¿Que el otro día te sentaras sobre mí cuando estaba apoyada en la mesa fue un impulso también? ...- Cuando ella no contestó nada me reí porque me parecía divertido como se pensaba que podía salirse con la suya sin que me diera cuenta.- Te vi analizarlo un rato antes y obviamente querías que te abrace.- Le sonreí acercándome, no me enfadaba con muchas personas y con Ana era casi imposible. Su cara me dio a entender que yo tenía razón, había bajado un poco la mirada, sus pies dieron unos pasos hacia atrás y no levantaba la cabeza.- Ay, ven aquí preciosa.- Dije abrazándola por el cuello y ella se prendió a mi cintura.

-Lo siento, Mimi.- Habló metida en mi pecho.

-Vamos, lo siento yo por largarte esos comentarios. A partir de ahora me voy a tomar el tema tranquilamente.- Ana levantó su cara para mirarme no creyéndose lo que decía.

-¿Entonces no te importa que siga con Jadel?- Suspiré pesadamente.

-Sí me importa pero eso no va a detenerme, aunque en realidad sí... Prefiero no besarte ni hacer nada.- Tenía que darle su espacio y eso, ¿No? Ella se rió y luego cuando se dio cuenta de que no era una broma me miró seriamente.

-¿Qué? Pero...- El sonido de la música era más fuerte que el de la voz de Ana así que nos alejamos un poco entre las dos y cada una salió a tomar sus cosas para irse a duchar antes de que los demás se despertaran.

COMPLICADO [WARMI]Where stories live. Discover now