In the rain. (Vkook/Taekook)

Capítulo 41- Regreso al trabajo.

JungKook esperaba con nerviosismo el autobús junto a su novio mientras se mordía el interior de la mejilla, tratando que el dolor lo distrajera.
TaeHyung, sentado a su lado, no podía evitar verlo con preocupación. Kook estaba a punto de regresar al lugar donde lo habían secuestrado, ¿El menor estaría bien? ¿Qué efectos tendría en él?
Kim odiaba ver el miedo reflejado en los ojos de su niño, sentía tanta impotencia, porque no podía protegerlo de sus pesadillas, no podía hacer más que abrazarlo para darle tranquilidad, y él quería hacer tanto...
Quería hacer que Jeon olvidase sus traumas, quería hacer desaparecer las cicatrices de la blanquecina piel del menor, quería alejarlo del dolor que sentía.
Al día siguiente Kookie tenía otra visita al abogado, por lo que tendrían la tarde ocupada, así que Kim aprovecharía para preparar un regalo para el menor. La próxima semana cumplían dos meses de noviazgo, y a pesar de que no era mucho tiempo, habían sido los mejores meses de la vida del castaño, y quería agradecérselo a Jeon, aunque fuese sólo con una canción o una cena.
Tae sentía mucho cariño por el pequeño, podía decir con seguridad que lo amaba con todas sus fuerzas.
JungKook había sido el primer chico que Kim había amado de esa manera, era un amor totalmente diferente, los labios del menor eran suaves, pero se sentían diferentes a los de una chica, su cintura era pequeña, pero no era lo mismo que la de una mujer. Jeon tenía muchas cosas que TaeHyung amaba, y lograba hacerlas aún más hermosas y especiales. Jeon JungKook era más de lo que TaeHyung jamás había soñado.

--Vamos, Kook. -- dijo Kim tomando la mano del pelinegro para subir al autobús.

El menor se mordió el labio antes de ponerse de pie y seguir a su novio.
Se sentaron en los asientos de atrás mientras Kookie reía a causa de su novio que casi tropezaba.

--Eres un descuidado. -- dijo entre risas el de cabello negro.

--Callate, pude haber muerto. -- dramatizó TaeHyung haciendo poses raras, sacándole más risas al menor.

--Claro, tu vida estuvo en peligro. -- respondió burlándose mientras se limpiaba las lágrimas que salieron debido a las risas.

--Te hubieras quedado sin novio niño, agradece que sobreviví. -- dijo con una sonrisa el castaño.

--Lo agradezco Tae. -- ambos sonrieron.

Pasaron el resto del camino riendo y bromeando, logrando calmar un poco la ansiedad que Jeon sentía por regresar a su trabajo.
Los moretones que tenía no le gustaban para nada, y sabía que serían bastante visibles debido a cómo estaba diseñada la camiseta de su trabajo, no quería que la gente se le quedara viendo con lástima. No quería más miradas de compasión, ya no quería ser una víctima más.
Cuando llegó su parada, ambos bajaron del autobús dando las gracias y con las manos entrelazadas a pesar de las miradas que algunas personas les lanzaban.
TaeHyung llevó a Jeon hasta la puerta de su trabajo, siempre sosteniendo su mano para demostrarle que estaba allí para él.

--Sabes que podemos regresar si quieres, ¿Verdad? No tienes porqué volver hoy si no te sientes preparado, además, no creo que tu jefe se moleste galletita. -- dijo Tae cuando estaban a poca distancia de la cafetería.

--Quiero volver hoy... Quiero volver a la normalidad lo antes posible...

--No deberías presionarte o aptesurarte, si no estás listo aún, no hay problema.

--Estoy listo TaeHyung, ten un poco de fe en mí. -- el mayor suspiró pesadamente mientras contemplaba aquella sonrisa cansada que el menor le estaba dedicando.

--¿Puedo confiar en que me dices la verdad? -- susurró Kim juntando su frente con la del de cabello negro.

--No lo sé... Pero puedes confiar en que te diré si después de éste día quiero tomarme más tiempo. -- murmuró como respuesta el menor cerrando los ojos.