P R Ó L O G O

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Anne

Tomé mi mochila y la puse en el hombro derecho, tomé las llaves de la casa y bajé las escaleras.

-Ya me voy papá.

-Bien...-dijo viendo la taza de mamá entre sus manos

-Papá... ¿No quieres que me quede?

Desde que mamá murió él sólo pensaba en ella. Murió cuando yo tenía 5 años y no la recuerdo exactamente. Papá sólo dijo que murió por un accidente en Michigan y no dice más desde entonces. Era algo extraño pero lo dejaba pasar. Éramos una familia bastante solitaria pero nos agradaba.

Ahora soy una chica de 18 años y estoy en último semestre de preparatoria. Tengo las mejores calificaciones, pero la mayoría de las personas no me toman como una nerd, ya que siempre visto de colores oscuros y por supuesto que me maquillo. Pero eso no es lo único, si no que mi carácter es algo fuerte y no me dejo engañar por nadie. Puedo llegar a ser insufrible con las personas o simplemente me dan igual.

-Bien, Adiós- dije saliendo por la puerta

-Te cuidas, hija mía.

Agarré la bicicleta y comencé mi recorrido hacía la escuela. Amaba estar en bicicleta, sentía el poco aire fresco que quedaba del ecosistema.

Matt

Estaba algo nervioso, era mi primer día en una nueva escuela pero no lo demostraría. Mi papá había ascendido de puesto. Yo vivía en Michigan pero el ascenso de mi papá era en otra ciudad, en San Francisco.

Tengo 19 años, perdí un año de estudio en la preparatoria por bajas calificaciones en años pasados. Tenía bastantes problemas, no me gusta que me digan que hacer y por esa razón me exasperaban los maestros. Ahora ya casi lo controlo. Siempre había sido seguro de mí mismo, pero estar en otra ciudad no me agradaba.

-Ya me voy- dije agarrando las llaves del automóvil

-Que te vaya bien hijo- dijeron al unísono mis papás.

Caminé hacia el auto y abrí la puerta para adentrarme. Encendí el motor y subí la música a todo volumen al ritmo del rock.

Anne

Estaba escuchando música clásica en mi móvil con los auriculares conectados, me ponía feliz escuchar ese tipo de música. Pero la felicidad se fue cuando escuché "música" en un automóvil a todo volumen. Era algo como Rock.

Vi al conductor de aquel auto, era un chico de 18 o 19 años. Lo miré unos instantes y sus ojos se toparon con los míos. Él sonrió de lado y yo rodé los ojos y seguí pedaleando hasta perderme de su vista.

-Estúpido-dije susurrando

Así es como la vida de dos chicos inocentes cruzan sus caminos. Sin saber el uno del otro, sin saber su carácter, sus problemas, pero lo más importante... Sus padres.

Venganza Mutua Where stories live. Discover now