Los sentimientos son una bomba muy peligrosa... Y más cuando amas tanto a un ser querido, que harías cualquier cosa por ella.
Anne Evans planea una venganza en contra de quién asesino a su madre, pero no cuenta con que él tiene un as bajo la manga...
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Entre a casa, mi padre estaba viendo algunas fotos de mamá con una sonrisa nostálgica. Me miró y trato de esconderla.
-Hola, hija ¿cómo estás?- se acercó a mí - ¿tienes hambre?-
-Señor Evans, no tienes porque ocultarme nada- tomé sus manos- se que mirabas las fotos de mi madre- dije sonriendo levemente
-No quiero que tú también estés peor, no quiero que esto sea tan duro para los dos- dijo acariciando mi mejilla
-Quiero ver las fotos- lo miré fijamente a los ojos y me encaminé a la caja de fotos
Me senté en la mesa y fui sacando una por una. Mi padre se sentó al lado de mí, contando cada historia de las fotografías. Había risas, nostalgia y lágrimas.
-Mi madre si que era hermosa, salí a ella- dije riendo
-Ella te cuidaba mucho, siempre estaba al pendiente de lo que te pasaba. Disfrutaba cada momento contigo. Cuando te daba hipo ella abría mucho los ojos y tú te asustaban y se quitaba- dijo también riendo
Lo miré fijamente. Abrí la boca para decir algo pero no tenía la capacidad. Pasaban las horas y nosotros seguíamos viendo las fotografías.
-Papá... Tengo que comentarte sobre Matt Thompson- dije tomando su brazo
Se aclaró la garganta.
-¿Qué pasa?- tomó una libreta y un bolígrafo
-Él va en la escuela dónde voy, comparto clase con él en aritmética. Ya había hablado con él, hizo añicos mi bicicleta y le exigí dinero. Así que no hay problema con la comunicación, podría volverle a hablar para sacarle información- dije lentamente
-No lo puedo creer, él está tan cerca de nosotros- dijo negando con la cabeza
-Pienso que... No estaría mal sacarle información de donde vive de una forma estratégica-
-Esta bien, sólo ten cuidado-
Respiré profundo y asentí con la cabeza.
-Iré a mi habitación- dije levantándome de la silla
Cerré la puerta de mi habitación, busqué mi móvil y busqué nuevamente su perfil en Facebook. Sus fotografías con la familia eran tan alegres, tan perfectos que daba asco.
-Destruiré a tu familia, empezando por ti. De alguna manera les daré donde más les duele- dije tocando con mi dedo la pantalla
Me fuí a dormir después de hacer mi rutina nocturna.
-Hija... Hija...- sentía su presencia por el aroma a flores frescas
-Mamá, ven conmigo- me levantaba rápido de la cama y caminaba hacía ella
Tomaba mi mano y me sonreía con tanta dulzura.
-No fue justo, pero tendrás que tomar el tiempo adecuado para hacer tú venganza aunque no este de acuerdo- decía riendo
