Vendida

Capítulo 1

(Casandra)

Llegue a casa después de haber estado en el parque tomando fotos, mi hobby es la fotografía. Había fotografiado, a viejos enamorados, a niños jugando. Me tuve que ir cuando vi algunas miradas que me miraban sospechosa. Ni que fuera una pervertida... admito que puede ser que lo parezca ¡pero no lo soy!

Abrí la puerta con cansancio después de la pateada desde el parque a casa.

-Papi, ¿Qué es esto? –pregunto viendo dos maletas en la puerta.

-Son maletas, me voy dos días fuera ¿Vale? –podía notar sus nervios desde lejos.

-¿Estas bien? –pregunte preocupada.

-Sí, mi niña. Te estaba esperando, para despedirme. Un beso, cuídate –me dio un beso en la mejilla y salió por la puerta.

-Adiós papi, que te vaya bien, si tranquilo, no montare ninguna fiesta, ni tampoco traeré a mi novio aquí. Comeré bien y mantendré la casa limpia –dije con ironía, mirando la puerta cerrada.

Ya estoy tan acostumbrada a sus escapadas instantáneas que ya ni me sorprendo. Yo pienso que es porque tiene una novia y va a pasar algunos días de vez en cuando con ella.

Yo aprovecho para hacer lo que me da la real gana, bueno como cualquier chica de mi edad sola en casa.

Corrí a mi cuarto, encendí el portátil para empezar a descargar las fotos, que había hecho hoy, de la cámara.

Mientras esperaba a que acabara llame a mi pizzería favorita para pedir la cena. A esto lo llamo yo cuidarse.

Guarde la cámara es su sitio y cogí el portátil. A ver que podía hacer hoy, me puse a ver una web de fotografía a la que estoy subscrita. Mi foto, de un paisaje mojado, es la que más puntos tiene, lástima que no se gane nada con esto... sino me forraría, estoy segura.

Luego me metí en el servidor del instituto, hackeando el servidor, que tiene una seguridad pésima, y buscar las preguntas de mis próximos exámenes, y ya que estaba, entre en los correos de mis profesores, para ver que hacían con su vida.

Sonó el timbre, ¡la pizza ya está aquí! Me fui a abrir la puerta y efectivamente era el repartidor, le pague cogí la caja y cerré.

Mientras comía la pizza, veía un documental de como unos presos lograron escapar de una cárcel, ahora todo el que entre en esa cárcel sabrá cómo salir pensé.

En cuanto volví al ordenador, aproveche que mi padre no estaba para buscar información sobre mi madre.

Esta clase de información la buscaba cuando mi padre no estaba porque se ponía paranoico cuando hablaba de eso.

Según mi padre, mi madre murió en el parto, que no llegue a conocer a mi madre. Pero... un día probando mis habilidades de informática, logre entrar en la nube de mi padre y vi una foto de cuando yo era bebe junto con mi padre y una mujer... yo tengo la corazonada de que es mi madre. Pero mi padre no lo quiere admitir.

En ese momento me llego una notificación, de que alguien quería abrir chat conmigo. Acepte.

Halcón rojo: Hola, ¿Qué tal?

BAM-Cass: Bien, al final logre arreglar mis defensas.

BAM-Cass es mi nombre en clave, BAM de Buscando A Mama, si... muy original yo, o muchos dibujos animados, y Cass de Casandra.

Halcón rojo: Guay, yo también estuve haciendo algunos arreglos.

BAM-Cass: ¿Tienes tiempo?

Halcón rojo: Si, ¿quieres que intentemos hoy volver a intentar entrar en la BDG?

La BDG es abreviatura de Base de Datos del Gobierno.

BAM-Cass: Si.

Halcón rojo: Cuando digas, yo ya estoy preparado.

BAM-Cass: Vamos manos a la obra.

Puse el chat a un lado de la pantalla y en el otro me puse a hacer mi magia. Estaba totalmente concentrada. Quería saber la verdad, y me daba igual si me tenía que sobre esforzar.

Como no era la primera vez que lo intentábamos, sabemos como preceder los primeros pasos, pero luego nos teníamos que mover con mucho cuidado.

Llego un punto en el cual me quedaba una barrera y conseguiría entrar a los datos. Pero me sonó el chat y desvié la mirada un segundo.

Halcón rojo: Retirada, han vuelto a activar el sistema de seguridad.

Mierda, estaba a un pelo de lograr llegar a ver algo más. Retrocedí mis pasos, cerré todo menos el chat y conteste.

BAM-Cass: Ok.

Halcón rojo: Casi nos pillan...

BAM-Cass: Gracias por la ayuda.

Es la única persona que conocí en el ¿chat de aficionados a la informática...? ¿Chad de Hackers...? No sé cómo se llama pero Halcón rojo me ha ayudado a averiguar varias cosas, abriendo cortafuegos y tal, aunque nunca le he contado que es lo que busco.

He llegado a encontrar, que cuando yo tenía dos años aproximadamente, mi madre alquilo una habitación en un hotel. Así que no murió en el parto, como dice mi padre.

Halcón rojo: ¿Te puedo hacer una pregunta?

BAM-Cass: Claro.

Halcón rojo: ¿Qué es lo que buscas en la BDG?

BAM-Cass: Información.

Suelo contentar de forma escueta, porque bueno no le conozco en persona y además tampoco es de su incumbencia.

Halcón rojo: Eso ya me lo imagino... ¿Qué clase de información?

BAM-Cass: Asuntos privados, sorry...

Halcón rojo: Okey. Mejorare mis refuerzos y lo volveremos a intentar ¿sí?

BAM-Cass: De acuerdo, hasta otra.

Cerré el chat y me recosté en el asiento. Estaba frustrada. Parecía que cada vez me costaba más encontrar información y cada vez más mi paciencia se iba agotando. Ya no sabía por dónde tirar. Pase mis manos por la cara.

Al final decidí que ya me estaba suficiente frustrada por hoy. Apague el ordenador y me fui a mi habitación.

Ordene las cosas para que mañana por la mañana no tuviera que pensar en nada que no fuera que ropa ponerme para ir al instituto.

Luego me tumbe, aun vestida con la ropa, boca arriba, mirando el techo hasta que me quede dormida.

No quería ir al instituto... me aburro mucho allí. Soy malísima en todas las materias, menos informática, claro está, y la de matemáticas, que siempre le he visto una unión a esas dos materias.