Capítulo 4

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¡Hola, hola! Estoy escribiendo ahora muy seguido porque me gustaría que le pillaran el hilo a la historia, y que así puedan opinar libremente.

Este es un libro que me hace mucha ilusión compartir con ustedes, así que aunque obviamente motiva tener comentarios y votos, me conformo con que lo lean y les guste. 

Díganme, ¿qué es lo que creéis que hizo la familia Jauregui para que Camila les odie tanto?

Kisses, y a disfrutar!!!

Narrador omnisciente durante toda la historia

Detuvo el motor de su coche y comenzó a recoger sus cosas. Cogió aire y observó el enorme edifico frente a ella. Sin lugar a duda Jr's Trendings contaba con una infraestructura fuera de órbita. La fachada estaba diseñada por enormes cristaleras de color azul oscuro tintado, acompañadas de azulejos de acero listos para un tiroteo. Disponía de veintiséis pisos cada cual más ostentoso. Cada uno de ellos se encargaba de una pieza clave en el negocio: fotografía, diseño, marketing, bufete de abogados, informática, ventas, modelaje... y Camila ni siquiera alcanzaba a recordar si tuvo oportunidad de verlos todos con sus propios ojos, más bien se enteraba por los cotilleos en el ascensor.

Decidió por fin armarse de valor y caminar hacia la entrada principal. Los inmensos jardines contaban con fuentes de agua decorando los alrededores, por un momento, si tus pensamientos caían inmersos en el paisaje, incluso te cuestionabas continuar permaneciendo en el centro de la ciudad neoyorkina. Era increíblemente hermoso.

Continuó dando pasos hacia las escaleras, cuando se percató de algo extraño a su derecha. "No puede ser" pensó. Lauren permanecía apoyada en el capó de un Porsche 918 azul apagado a juego con su vestimenta. Se encontraba más casual de lo normal, con vaqueros altos ajustados, blusa de botones casi del color del coche y una chaqueta de cuero que Camila calculó que podría valer más que todo su apartamento. Su cabello oscuro al aire, y unas gafas de sol Ray-Ban cubriendo sus pupilas. Menos mal... porque si la miraba en ese momento, seguramente le daría un ataque. Las cosas como son, era jodidamente atractiva.

Camila apresuró el paso al acercarse a su lado, evitando lo que se temía: su jefa deslizó los cristales tintados hasta colocarlos sobre su cabello, liberando sus pupilas hipnotizantes y haciendo un gesto con la mano:

- Buenos días Camila – dijo con su habitual tono serio.

- Buenos días señorita Jauregui – carraspeó mirando alrededor - ¿necesita algo antes de que me incorpore a mi puesto?

Lauren aprovechó el intento profesional de su secretaria por aparentar, para soltar una sonrisa remolona. Por fin levantó medio cuerpo del vehículo y caminó hacia ella deslizando sus curvas como si le hubiesen enseñado a hacerlo.

- No sabría si vendrías – escupió.

- Soy una profesional, no iba a desaparecer sin más.

- ¿Significa eso que vienes a entregarme tu carta de dimisión?

- No – aseguró, intentando mantenerse firme – ni siquiera sé de qué me habla.

Se desafiaban con la mirada. De alguna manera u otra, la directora de la compañía conseguía leer la verdadera personalidad de Camila. No era tan santa como aparentaba, y por eso llamó tanto su atención como para realizarle tal ofrecimiento.

- Lo cierto es que sí que necesito algo – dijo por fin.

- ¿Transporte para ir a algún sitio? – y lo dijo haciéndole un escáner visual.

- Puedo conducir por mí misma, ¿sabías?

Camila tragó saliva. A lo mejor se estaba pasando de la raya... no debía olvidar que era su jefa, y que además, si conseguía su odio no sería nada bueno para llevar a cabo su plan. Pero es que era la primera vez que veía a Lauren con intenciones de atravesar la ciudad en coche propio. Normalmente lo hacía con chófer, como lo asquerosamente rica que era.

Sweet Hell I [Camren] [Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora