Epílogo

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Han pasado tres largos años desde ese fatídico día. Tiempo más que suficiente para que ocurriera las cosas más inimaginables posibles, al menos para Kikis. Después de que su pálido y débil cuerpo cerrara los ojos, hicimos todo lo posible para que no nos abandonara. La ambulancia hizo un trabajo excepcional, y con ayuda de los agentes policiales, sacaron el cuerpo de Kikis para trasladarlo a emergencias.

Pero era demasiado tarde, su corazón había dejado de latir...

Los escombros encima de él le habían causado varias heridas, pero ninguna de gravedad. Su corazón realmente falló por la enfermedad que padecía, pero eso a nadie le importaba, todos tacharon a Claus como el peor villano de la historia.

Era una verdadera suerte que Kikis haya sido el único desafortunado. Después de levantar todos los escombros del lugar y de contabilizar a las personas dentro, pudimos darnos cuenta que nadie más había corrido suficiente peligro como él.

Nuestra revuelta no solo se había convertido en noticia nacional, si no que todos los medios de comunicación hablaban de la desgracia de Kikis alrededor del mundo. Personas de todos lados pedían la condena máxima para Claus, que no tuvo más opción que desistir a la idea de montar su imperio y devolver a Kiami para apaciguar opiniones públicas. Aun así, debía cumplir años y años de cárcel por múltiples infracciones cometidas, pero claro, el cochino dinero todopoderoso lo mantiene libre hasta el momento...

"La gran historia de Kikis" como muchos conocían los hechos, había sido el tema de varias semanas posteriores, captando el interés de poderosos financieros que querían colaborar con el objetivo de Kiami. Los inversionistas estaban interesados por el gran potencial investigativo que posee la universidad, rodeada por la selva viva, donde en la mayoría de los casos científicos, era donde se encontraban los mejores hallazgos de la historia.

Kiami fue remodelada por completo, desbaratando las zonas afectadas y construyendo nuevos edificios. La vieja universidad donde estudiábamos lucía totalmente diferente, incluso el nombre fue cambiado por decisión unánime. Y con unánime, me refiero a la del mundo entero...

Universidad Amazónica Kikis

Después de que el funeral terminara y al haber leído toda su triste historia, sabía muy bien lo que debía hacer. Imprimí una copia para todos los que tenían que saberlo. Me encargué de entregárselo personalmente a cada uno de ellos, tocando a la puerta de los apartamentos sin importar que lloviera o relampaguee.

Uno para Fiorelha, otro para El Lojano, Oz, Sr. Liar... Para todos. Una copia de las escrituras de Kikis con sus respectivas cartas.

Pasaron tres meses para que la Universidad volviera a abrir sus puertas, con una apariencia alucinante y una atmosfera acogedora. Las letras "Kikis" podían apreciarse en la entrada, de gran tamaño y llena de colores. En el primer día clases y para sorpresa mía, todos nos volvimos a reencontrar.

Fiorelha había decidido volver, y aunque se había retirado el semestre anterior, todos fuimos aprobados por nuestra gran hazaña, así que volvíamos a estar en el mismo nivel. La historia de Kikis era el significado que ella buscaba. La había transformado por completo. Lucía más radiante que nunca y tan llena de vida. Con el paso del tiempo, tomó la presidencia del consejo estudiantil, asegurándose que nadie tuviera que cargar con sus problemas solos. Ella en definitiva se había convertido en los mismísimos colores que los estudiantes necesitaban...

Damisela sigue siendo la misma extrovertida de siempre y creo que nunca cambiará. Sin embargo, en el funeral, contradictoriamente a lo que dijo Kikis, fue la que más lloró por él. Ese par se querían de una manera extraña, como cuando unos hermanos terminaban de pelear y a la media hora se abrazaban con el mayor cariño del mundo. Ella quebró en llanto durante toda la ceremonia, despidiéndose para siempre de su amistad más valiosa. En los años posteriores, no dejaba de mencionar que debía seguir los pasos de Kikis e iluminar el mundo como mejor pudiera. Al parecer, había conseguido a una gran discípula, aunque algo escandalosa, sin duda era la mejor de todas...

Without ColorsWhere stories live. Discover now