Soledad Bajo Tierra

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Y el gran día a llegado, hoy es el baile de las máscaras, hoy iremos Erik y yo al teatro a entregarle la obra al director.

"Entraremos por la puerta principal y no por pasadizos" fueron las palabras que le dije a Erik antes de que se fuera esta mañana, él respondió con un simple movimiento de cabeza espetando que debía irse rápido y lo hablaríamos mejor cuando llegara.

Sinceramente, ahora, estoy completamente aburrida ya que llevo varias horas acostada en el sofá esperando a que Erik llegue, el baile comienza en dos horas y aún no e comenzado a arreglarme, bueno, ya me bañe solo me falta el traje y, puede, el maquillaje.

Me levanté del sofá y caminé lentamente hasta la estantería de libros, últimamente e estado leyendo libros de los que Erik tiene y, hasta ahora, mis favoritos son los de Sir Arthur Conan Doyle.

Antes Erik me decía cosas sobre Sherlock y ahora veo porque le gusta tanto.

Tomé uno de los libros y cuando iba a sentarme en el sofá la puerta se abrió de golpe haciéndome girar hacia ella.

Erik acababa de entrar con dos bolsas y dos grandes cajas en sus manos, me pregunto que traerá en ellas.

- Perdón por tardarme tanto -Dijo Erik mientras cerraba la puerta con su pierna- Abigail puedes ayudarme con estás bolsas

- Claro -Dije mientras dejaba el libro en el sillón y corría hacia donde estaba Erik.

Como pude saqué las bolsas de los brazos de Erik sin que este tirara las cajas, sonreí cuando lo había hecho.

Erik comenzó a caminar hacia su cuarto mientras yo lo seguía de cerca.

Cuando entramos Erik dejo las cajas en la cama y yo lo imite dejando las bolsas en la cama.

- ¿Qué hay ahí? -Pregunté mientras tocaba las cajas.

- Un regalo -Dijo Erik mientras de giraba hacia mi.

- ¿Puedo abrirlo?

- Claro

Agarré la caja que Erik me dijo que era la mía, la hize a un lado y lentamente fui quitando la tapa para dejar ver el contenido.

- Oh por dios -Dije en voz baja.

En la caja se encontraba un hermoso vestido color rosa con azul, que parecía morado, que saqué lentamente y admiré en mis manos.

- ¿Te gusta? -Preguntó Erik y yo solo asentí por lo impresionada que estaba- Me alegra que te guste porque ese vestido será el que llevarás hoy al baile de máscaras

- ¿En serio? -Dije con asombro.

- Si, de hecho en las bolsas vienen los zapatos que deberás usar con el

Erik agarró una bolsa y sacó dos cajas, una más grande que la otra, y abrió la caja más grande dejando ver unas lindas botas blancas de tacón.

- ¿Qué hay en la otra caja? -Pregunté dejando el vestido cuidadosamente en la cama.

- Esto -Dijo mientras la habría.

Dentro de la caja había una linda tiara decorada con una luna en el centro y varias estrellas a sus lados.

- Todo esto es muy hermoso -Dije emocionada- Gracias

Literalmente me aventé a los brazos de Erik tomándolo por sorpresa pero sin evitar que lo abrazara fervientemente.

- ¿Qué usarás tú? -Le pregunté mientras dejaba de abrazarlo.

- Ya lo verás -Dijo mostrando una sonrisa malisiosa de lado

Sonreí, todo esta muy bien pero veo un pequeño y casi insignificante detalle que falta.

- ¿Y la máscara? -Pregunté.

- Eso es -Dijo Erik haciendo una pausa- Sorpresa... también -Ok, son dos sorpresas para mi- Ahora vete a cambiar que se nos está haciendo tarde

- Esta bien, me iré a cambiar

Agarré el vestido, los zapatos y la tiara, después salí del cuarto de Erik para ir a la que, por estos días, había sido mi habitación.

Me dejé caer en la cama, por alguna extraña razón estaba muy feliz, tanta que quería gritar por ello.

Después de unos minutos me controlé, seguía contenta pero ya no tenia tantas ganas de gritar.

Rápidamente me cambie de ropa hacia el vestido que Erik me había comprado, cuando ya lo traía puesto me puse los zapatos y me miré en un espejo que estaba en la habitación.

Parecía otra persona, alguien más alegre, creo que los colores y lo esponjoso de la falda era lo que hacia que me viera más alegre.

Llegué al tocador y comencé a peinarme, después me maquille un poco y coloqué la tiara en mi cabello, con el conjunto completo me volví a mirar en el espejo y seguía sintiéndome diferente.

Respiré profundo antes de salir del cuarto y caminar hasta el piano para esperar a Erik y así poder irnos al teatro por la calle Scribe.

Me moría de ganas por ver como estaría Erik vestido y como sería mi máscara.

Después de unos minutos de esperar decidí sentarme en el banquillo del piano, en eso la puerta de la casa se abrió y lentamente fue apareciendo ante mis ojos un ser vestido completamente de rojo, con un sombrero de plumas y una máscara en forma de calavera, el traje tenia decorados en color dorado y era llamativo pero lo suficientemente adecuado.

- ¿Te gusta? -Preguntó Erik mientras se acercaba a mi a lo que yo asentí, estaba muy sorprendida como para esbozar una palabra- Me encanta que te guste, soy la muerte roja y esta noche tu serás mi acompañante reina de la noche

Después de decir eso Erik tendió sus manos enfrente de mi dejando ver una hermosa máscara plateada que hacia juego con mi tiara, la agarré admirando su belleza.

- Yo la hice, al igual que mi máscara -Dijo Erik haciendo que volteará a verlo.

- ¿Cuándo?

- Mientras dormías, no quería que vieras como iba a hacer quería ver tu cara de sorpresa como ahora mismo

Sentí como mis mejillas comenzaban a arder, había estado trabajando toda la noche solo por ver mi reacción cuando la viera y descubriera eso.

Como no amar a este hombre.

Eh... ¿Qué dije?

Parpadee varias veces para alejar ese pensamiento de mi mente, no debía pensar en eso en este momento.

- ¿Vamos? -Preguntó Erik después de agarrar su carpeta y estirar su brazo hacia mi.

- Vamos