ROWYAN | Temporada 2

Capítulo 14: ¡Todos con Arnold! 🙋‍♂️🙋‍♀️

Rowan aún no podía soportar ver en sus pensamientos a Adalia abrazada con Ryan. Parecía extraño pero, al principio, pudo haberle tenido un mínimo de cariño, para que después se desvaneciera.

El día transcurrió bastante rápido; a pesar de que Ryan y los demás hayan pasado parte del día en el restaurante. La noche se hizo presente en las hermosas cales de Nueva Jersey, y los chicos permanecían en el hotel donde se hospedaban los tres chicos. Rowan y Sofía dormirán con Bella en una misma habitación. Mientras que los otros dos seguirán descansando en sus cuartos correspondientes.

     — ¿Notaste cómo Rowan miraba a Adalia? —preguntó Henry, estaban ambos en la sala de estar, mientras que las chicas estaban en la habitación de Bella—. Parecía muy enojada porque ella te abrazó, así todo romanticón.

     —La verdad no lo noté —respondió Ryan, algo pensativo—. Pero puedo admitir que el abrazo sí fue bastante comprometedor. Parecía el típico abrazo después de casarse.

     —Créeme que Rowan estaba ardiendo de celos. Si quieres se lo pregunto.

     —Estaría interesante oírlo, pero no. Preferiría sólo pensarlo, aunque sé que sí sintió celos.

     Henry le preguntó si sintió algún tipo de celos cuando Travis besó el cachete de la chica rubia.

     —Para nada. Travis es un gran amigo de la infancia, no creo que tenga esas intenciones con Rowan —contestó, y su celular comenzó a vibrar. Era Arnold.

Ryan dudó en si responder ahora mismo, porque en cualquier momento podían entrar Bella o las demás. Pensó, y le mostró el celular a Henry. Éste le dijo: ¡Contéstale! Ryan accedió.

     — ¿Sí, Arnold? —comunicó éste.

     —Vi que Rowan y Sofía llegaron esta mañana. ¿Qué posibilidad hay de que vaya mañana temprano?

     —Puedes venir, creo que saldrán al centro comercial. Es más, nosotros te ayudaremos a hacerle una mini-sorpresa a Bella.

     —Gracias por confiar en mí, hermano —dijo Arnold, con un tono entre triste y alegre.

     El chico colgó y Ryan continuó en lo suyo.

Rowan's POV.

Era increíble cómo Bella y Sofía se habían dado cuenta de la reacción de Rowan. Siempre se lo hacían saber.

     —Tu cara fue magnífica —decía Bella, seguido de soltar una carcajada—. ¡Te parecías a Maléfica!

     Rowan también reía, un poco disimulado, pero lo hacía.

     — ¿Sentiste cuando te tomé del brazo? —preguntó Sofía, también terminando de reir.

     — ¿Que tú qué?

     Sofía explicó que la tomó del brazo porque Rowan tenía la intención de lanzarse encima de Adalia. Aunque esto obviamente era broma, en ningún momento Sofía la tomó del brazo. Continuaron hablando del tema 'sus chicos', y Rowan le preguntó a Bella por Arnold.

     —Estudiando en Chile, supongo —contestó sin darle mucha importancia—. Estoy saliendo con un chico llamado Frank.

     Rowan ya sabía lo que había pasado con Bella y Arnold. Todo se lo informó Ryan mediante llamada telefónica.

     —Henry cada vez es más atento conmigo —comentaba Sofía—. Me encanta cada día más.

     Las dos chicas le preguntaron a Rowan qué está esperando para formalizarse con Ryan.

     —Estamos esperando el momento adecuado, ya saben —dijo Rowan, con un poco de timidez—. Él es muy perfeccionista en esa parte, y no quiere adentrarse tan precipitadamente.

Las chicas entendieron la razón, y sólo continuaron hablando de otros temas femeninos, hasta que lograron dormirse.

Ryan's POV.

El sol mañanero salió, y Ryan logró despertarse más temprano de lo normal. Observó a su derecha y estaba su portátil y un libro. Los guardó en sus sitios correspondientes. Prosiguió a abrir el ventanal y dejar entrar la iluminación natural.

Se asomó silenciosamente hacia la sala de estar, y en ésta no había absolutamente nadie. Pasó a la cocina, y tomó una taza de café. Posó su oreja en la puerta de la habitación de Henry, y de fondo se oía una música relajante. Esto quería decir que Henry aún dormía.

Ryan decidió esperar el llamado de Arnold, dijo que llamaría en la mañana. Así que pasó media hora sentado revisando su celular, hasta que por fin vibró.

     — ¿Dónde estás? —preguntó Ryan, observando las calles a través de la ventana.

     —Estoy en el súper de enfrente, ¿me ves? —respondió Arnold.

     Ryan, mediante la ventana, veía a un chico agitando su mano de un lado a otro. Éste se acercó corriendo, pasó la calle y se aproximó a la puerta. Ryan lo perdió de vista.

     —Es la número 8 —informa Ryan.

     —Lo sé, ya he estado ahí anteriormente —dice éste con un tono divertido.

     Entró al hotel, y se metió rápidamente en la habitación de Ryan. Henry, que previo a todo esto estaba durmiendo, pasó al baño.

     — ¿Qué ocurre? —pregunta Henry, quien tenía cara de muerto.

     Ryan le hizo señas, como indicándole que fuera al cuarto. Éste las captó, e hizo un gesto de 'espera'; se metió al baño, y después salió corriendo al cuarto, junto con Ryan.

     — ¿Qué ocurre? —vuelve a preguntar Henry—. ¡Ay, por mi señor Thanos! —reacciona cuando ve a Arnold sentado en una silla.

     Ryan le explica que él llegó cuando todos estaban durmiendo. Y que lo planeado fue que llegara después que las chicas salieran al centro comercial.

     —Vine ahora mismo porque no aguantaba —dijo.

El sonido de la puerta de al lado se oyó; Ryan, Henry y Arnold se alarmaron. Se escuchaban las voces femeninas por toda la sala de estar. ¿Entrarán?

     — ¿Estará despierto Ryan? —preguntó Bella, y sus pasos se oyeron más cerca de la puerta.

     —No lo molestes —interrumpió Rowan—. Déjalo que duerma un poco más, debe estar agotado.

     — ¡Sí, sí! —susurraba Henry—. ¡Hazle caso a Rowan, Bella!

     — ¿Oíste eso? —preguntó Bella.

Ryan le hizo una seña a Arnold con la mano para que se escondiera debajo de la cama por segunda vez en este año. Fue como "¡OCÚLTATE!"

La puerta de la habitación fue abierta por Bella, junto con Rowan. Sólo vieron a los dos chicos sentados en la cama, en sus respectivos smartphones.

     —Chicos, iremos al centro comercial —les dijo Rowan—. ¿Quieren venir?

     —No, gracias —respondió Ryan—. Debemos hacer unas cosas de suma importancia.

      — ¿Algo así como comer y ver películas toda la tarde? —preguntó Bella, con un tono escéptico.

Ambos asintieron fingidamente, y éstas volvieron a cerrar la puerta. Al cabo de unos diez minutos, se oyó la puerta cerrar; posteriormente, el sonido de un coche en marcha. Se habían ido.