Capitulo 18

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Narra Atem

- "la decisión que he tomado..., espero que sea la correcta" -

Pienso mientras voy de vuelta en mi caballo al templo de Anubis, al salir del la gran biblioteca el lado prohibido colapsó, espero no equivocarme y no estar poniendo en peligro a todos.

Me queda media hora de viaje pero no puedo desistir, se me acaba el tiempo ¡necesito llegar ya!

Por fin veo entre las dunas el templo de Anubis que se encuentra a punto de derrumbarse, bajo de mi caballo y corro a la entrada, que esta en muy mal estado, tropiezo y al levantarme se derrumba una de sus paredes

- ¡Anubis, he vuelto ¿donde estas?! -

No responde, me pongo de pie y me apresuro a encontrar la entrada a su habitación, llego a ella con dificultad y llamo de nuevo

- ¡Anubis, he vuelto! -

El lugar en el q debería estar su habitación, es el mismo al que me llevó, estoy sobre el mismo peñasco, oigo más voces, más gritos, incluso siento el mismo dolor q sufre el templo

- ¡Anubis, ¿donde estas?! -

Algo de un gran tamaño se acerca a mi, es él y responde:

- lleva el libro a su lugar, hazlo rápido -

- donde está su lugar? - pregunto mientras lo miro casi a punto de rendirse

- Detrás de ti hay una montaña, en la cima está el pedestal donde debe descansar, llévalo lo más pronto posible y mi fuerza será restaurada -

Hago caso de inmediato y veo una gran nube negra acercarse a nosotros, son las almas destructivas q están atacando a Anubis y seguramente tambn vendrán por mi.

- hazlo pronto, yo me encargaré de ellos todo lo q pueda -

Corro lo más que me permiten mis piernas y comienzo a escalar por la gran montaña, miro atras y veo a Anubis pelear contra las almas, subo más deprisa para no perder el tiempo, sin embargo tambn me alcanzan y me sostienen con fuerza de las piernas y un brazo, empiezo a perder el equilibrio pero Anubis me ayuda, continuo escalando hasta llegar a un descanso, miro de nuevo y Anubis se ve cada vez más cansado, continuo subiendo hasta llegar al pedestal donde hay más almas destructivas, pareciera q estuvieran esperándome, guardo el libro entre mi ropa, me acerco esquivando una a una, doy un salto para alcanzar el pedestal pero una logra sujetarme de los brazos haciendo q suelte el libro y este caiga sobre el suelo, dos almas más se acercan a mi para alimentarse de mi energía pero una luz radiante me protege y lucha contra ellas.

Caígo al suelo y solo lo miro

- ¡no te detengas Atem, ponlo en su lugar ahora! - dice mi padre mientras veo como su luz comienza a opacarse

- "cada vez q intenten atacarte su amor se contaminara, se convertirá en una energía destructiva y se destruirá, su alma no encontrará jamás el descanso" -

Las palabras de Anubis resuenan en mi cabeza, debo tomar enserio su advertencia. Me pongo de pie y recojo el libro, me acerco al pedestal y un alma destructiva q sale de pronto me golpea con fuerza, unas gotas de sangre nublan mi vista, me ha golpeado la cabeza con fuerza, busco el libro pero me siento aturdido, vuelvo a ver la luz de mi padre que se oscurece aun más y a Anubis luchar con las pocas fuerza q le quedan, encuentro por fin lo q busco y lo pongo en su lugar, un gran destello de luz blanca sale de él, todo el lugar tiembla y Anubis se pone de pie frente al pedestal, toca el libro y a su derecha aparece una balanza, frente a él, la tinta y la pluma con la q escribe los nombres de los muertos, los registra rápidamente, pesa en la balanza sus memorias y su corazones, todo comienza a pasar tan rápido q las almas destructivas son devueltas a lo que eran, esta parte, este trabajo que hacía Anubis no lo recordaba, me quedo arrodillado recuperando el aliento y observo lo q sucede, como el orden comienza.

Entre Dioses, Demonios Y Hombres (Atem y tu) (Completa) Where stories live. Discover now