Entre Dioses, Demonios Y Hombres (Atem y tu) (Completa)

Capítulo 20

Narra Zaid

Al fin Atem a despertado, se ve tan feliz y bn descansado, nos alegra mucho verlo así, siempre ha sido una persona q esta de buen humor, sin embargo hoy lo está más que de costumbre, a ido a visitar a la gente del pueblo, ___ y yo lo acompañamos, empezó a jugar con los niños que salían de sus casas para ver al Faraón, como siempre, se porto muy amable con la gente que se acercaba, realmente sonreímos mucho con él esta mañana y más en un momento cuando una niña se acercó a Atem

- ¿majestad esa señorita que viene con usted, es su novia? -

Atem la miro y ella a él, ambos se sonrojaron tanto que no pude evitar soltar una carcajada

- su nombre es ___ y vive conmigo en el palacio, es una persona a quien quiero mucho y que realmente no se que sería de mi sin ella - dice Atem a la pequeña quien lo mira con toda su atención.

Ambos sonrien y continúan jugando, al volver al palacio, se deja ver como cae el atardecer, los tres nos sentamos en la gran escalinata que está a la entrada del palacio.

- mañana es mi cumpleaños y seria el de mi padre tmbn si estuviera con nosotros, pero apesar de su ausencia estoy muy contento de que ustedes dos estén conmigo, acompañandome, significa mucho para mi que ustedes estén presentes -

- No te dejaríamos en un día tan importante - dice ___

- Por mi parte, no tengo a donde más ir, así q no me queda otro lugar q estar con ustedes dos - digo en broma y reímos los tres

De pronto un silencio agradable nos cubre junto con el aire tibio del atardecer, las primeras estrellas comienzan a iluminar el cielo. Se siente tanta calma y tanta paz estar aquí y ahora, ojalá los días q nos queden fueran igual a este momento, aunq todos sabemos que será imposible.

De pronto ___ se pone de pie en un salto y comienza a bajar las escaleras

- ¿a donde vas ahora? - pregunta Atem sin moverse de su lugar

- no tardo volveré enseguida, lo prometo - responde ella mientras nos mira

- ¿quieres que vayamos contigo? - pregunto ahora

- No!, estaré bn, no tardaré - responde mientras continúa bajando los escalones

- Bn, no tardes estaré aquí esperando a q vuelvas - responde Atem

- tambn lo haré yo - añado

___ ya no responde ni mira atrás, solo levanta una mano en señal de que nos ha escuchado, poco a poco comienza a alejarse hasta perderla de vista

- ¿a donde habrá ido? - pregunto a Atem

- no lo sé, pero quiero pedirte un favor ahora q no está - responde él

- ¿de que se trata? -

- mañana, después de la llegada de los invitados al palacio, la celebración y entre la fiesta, quiero pedirte que lleves a ___ al balcón que esta con vista al jardín, yo te diré en q momento lo harás -

- ¿puedo preguntar el motivo, Atem? -

- tengo una sorpresa para ___ - me sonríe mientras lo dice

- ¿q clase de sorpresa eh? - preguntó con tono y mirada pícara

Atem sonríe y se sonroja tmbn, sin embargo continúa

- es algo especial, algo muy importante que mi corazón pide que lo haga, ya lo sabrás mañana -

- esta bn, entonces la llevare al balcón en cuanto tu me lo pidas -

Me dirije una sonrisa cálida y vuelve la vista al cielo

Después de un largo rato sentados, ___ vuelve con nosotros

- tardaste un poco - dice Atem entre bostezos

- lo sé y lo siento, no creí que tardaría tanto -

- vamos adentro ya hay q ir a descansar, mañana será un día muy largo y especial para todos - digo mientras me levanto y los miro

Los tres entramos al palacio y acompañamos a ___ a su habitación, se despide de nosotros y cierra la puerta, acompaño a Atem a la suya y me dice en voz baja

- asegúrate de que mañana ___ este ocupada, necesito aun hacer algunas cosas antes de verla -

Asiento con la cabeza y nos despedimos para q cada uno descanse.

Vuelvo a mi habitación y me siento a la orilla de mi cama me tumbo sobre ella y miro el techo, comienzo a recordar el día en el q llegué aquí, el momento en el que Atem y yo nos hicimos amigos, jamás le he dado un regalo a Atem por su cumpleaños, nunca me ha dado tiempo a buscar uno indicado para él, siempre estoy tan ocupado, tantos años estando juntos y me es complicado hacerle un buen obsequio, pero esta vez es diferente, pedí que me fabricaran una manzana de oro, quizá no sea mucho pero recordando aquel momento en el q él me dio una para q fuéramos amigos, quiero que la mía sea un símbolo de q siempre estaré a su lado apesar de todo.
Cierro los ojos y comienzo a adormecer, me levanto y me quito los brazaletes de mis manos, cambio mi ropa y vuelvo a mi cama para descansar.

...

Empiezo a escuchar a las primeras aves cantar en el alfeizar de mi ventana, me levanto y siento que ha amanecido muy pronto, me preparo y salgo de mi habitación, no sin antes, arreglo un poco la caja de madera que he hecho yo mismo para el regalo de Atem, ato la pequeña caja con un lazo azul y la llevo conmigo, miro que no haya nadie aun que haya despertado a mi amigo y pido a los guardias que me dejen pasar, ambos se hacen a un lado y abro la puerta, esta aún completamente dormido, pongo la caja en la pequeña mesa que hay a su lado, me siento en la orilla, pongo una de mis manos sobre su hombro y le llamó en voz baja.

- Atem, buenos días -

Se mueve un poco, lanza un bostezo y abre los ojos con hastío.

- Buenos días Zaid, ¿que haces aquí tan temprano? -

- Estaré ocupado preparando lo que falta para esta tarde, por lo tanto, decidí traerte esto antes de que incluso pudiera olvidarlo o fuera muy tarde - mientras hablo vuelvo a sostener la caja y se la entrego

Atem me mira, se incorpora sobre su cama, talla sus ojos y acepta la caja:

- hace tantos años que no me hacías un ragalo, nunca lo he reprochado, el tenerte a mi lado es el mejor regalo que he tenido para toda mi vida, supongo que lo que sucedió en días atrás te dio la oportunidad de hacerlo, ¿verdad? -

- Sí, así es - respondo mientras sonrió

Desata con cuidado el lazo y abre la caja, sus ojos se abren más al ver lo que hay dentro, la toma entre sus manos y continúa:

- significa mucho para mi este obsequio Zaid, en verdad no puedo explicarlo muy bn ahora pero... me has dejado sin palabras Zaid, gracias por este gran regalo -

Le doy un abrazo con fuerza y con todo el cariño que siento desde el momento en el q nos hicimos amigos, el uno al otro ya es lo único que nos queda, hasta q uno de los dos tenga que partir.