Entre Dioses, Demonios Y Hombres (Atem y tu) (Completa)

Capítulo 36

Narra Anubis

Apenas he podido llegar a tiempo a aquel lugar, la guerra apenas había comenzado, creí que Atem podría controlar la situación, sin embargo ignoraba que él y Zaid por mucho que su energía esté altamente elevada como la nuestra, siguen siendo tan humanos como cualquiera de los hombres habitantes de este mundo, tal vez si hubiéramos podido recordar quiénes éramos, si hubiéramos tenido la oportunidad de evitar que la batalla entre dioses, demonios y hombres se desatará de esta manera, habríamos conseguido la paz más pronto de lo que esto ya ha durado, nuestra ausencia en lo que algún día llamamos hogar, a creado más que simples conflictos, ahora también a nosotros nos toca intervenir para que esto no termine aún peor.

Thoth se ha sumado a dicha guerra y hemos decidido luchar del lado del joven Faraón y de nuestro más grande sacerdote.
Durante el tiempo en el que Zaid se encontraba en la Duat buscando a ___, viajé a los templos de los demás dioses sin embargo no me había dado cuenta que ninguno respondía ni tan siquiera los rezos y súplicas de los humanos, se encontraban en una especie de sueño, este extraño letargo los había mantenido incapaces de hacer algo tal vez e incluso hasta para ayudar al joven Faraón en su búsqueda por liberar a ___, pero aun esto no explicaba porqué Thoth, Nephthis o yo éramos de los pocos en estar aún "despiertos" por decirlo de algún modo, quizá se debía por ser cercanos a ella de alguna manera, ese lazo o esa unión era imposible de romper.

Narra Atem

Sobre el cielo, se ha extendido una inmensa nube oscura que va más allá de lo que nuestros ojos nos permiten ver, junto a ella, una poderosa energía maligna puede sentirse por todas partes, envenenando y matando lentamente a los animales y la poca vegetación que crece en los alrededores.
No puedo evitar sentir algo de miedo por enfrentarnos a Apofis y seguramente a ella, no sé aún a qué se refería Nephthis al decir que yo era el único que podía hacer algo para liberarla, pero por lo que ya ví el brazalete esta roto, ella ya es libre, ¿Cierto?, a menos que aún haya algo que nos una.

- ¡La carta blanca! - exclamó de pronto y mientras siento mi corazón acelerarse.

- ¿Que? - pregunta Zaid y se acerca junto con Thoth y Anubis

- Si ___ es libre se supone que entonces la carta blanca ya no debería existir o en todo caso... - Zaid me interrumpe y termina mi oración

- El brazalete que los une - mientras lo dice me invita a revisar ambas cosas

Busco entre mi ropa y aún encuentro la carta con una inscripción diferente y noto enseguida que Zaid, una vez más, no puede ver, recojo las mangas de lo que llevo puesto para cubrirme del inmenso calor y ahí está el brazalete también, aunque aún parece estar frágil y a punto de romperse quizá resista un poco más, quizá esto sea una oportunidad para ayudarla, quizá esto aún sea una prueba de que en alguna parte de su mente o su corazón aún es consiente de lo que sucede y esté luchando con ella misma.

Todos me miran esperando que tome una decisión.

- Es evidente que hay que ir por ella, pero tendremos que pelear antes de recuperarla, no será sencillo porque tal vez la fuerza de Apofis nos supere, pero somos 4 y no vamos a detenernos y sé que cuento con ustedes para salvarla, salvar nuestro mundo -

Las miradas de todos cambian a una más segura y desafiante.

Comenzamos esta lucha y puede que se vaya mi vida en ello pero antes voy a liberarte ___.

Narra Thoth

Nos dirigimos al lugar en el que se han acentado nuestros enemigos, jamás había visto al joven Faraón tan seguro de sí mismo eliminando por completo todos y cada uno de sus miedos, sé en que terminará todo esto y mi único objetivo aquí es hacer que todo eso pase, guiar al Faraón para que cada paso que dé se acerque al destino que le corresponde.
Lo siento tanto Zaid.

Narra Zaid

Al llegar al lugar donde la guerra comienza la voz de un hombre nos invita a pasar a lo que parece ser una cueva en medio del desierto

- Hay que estar atentos a todo y tener cuidado - dice Atem

Entramos después de Atem y tras pasar por un largo pasillo frio y sombrío, nos recibe Apofis en un trono hecho de huesos, junto a él se encuentra ___, la mantiene encadenada, su mirada luce tan apagada y perdida, sólo nos observa sin ninguna expresión.

- ¡Apofis hemos venido por ___, liberala! - Exclama Atem

- Sean bienvenidos al centro y comienzo de mi poderoso imperio - responde Apofis mientras se levanta de su trono y baja por una escalinata acercándose a nosotros, dejando un metro y medio aproximadamente de espacio entre él y nosotros

- Joven Faraón Atem, sacerdote Zaid, Anubis y Thoth - se inclina para hacer una reverencia pero su tono es sarcástico y de burla

- ¡He dicho que la dejes libre, devuélveme a ___! - continúa Atem

- Mi querido Faraón, hablas de ella como si fuera un objeto y al menos para mi no lo es, además mi señor, ella no esta aquí en contra de su voluntad ¿verdad Sejmet? - mientras pronuncia las últimas palabras chasquea los dedos y las cadenas desaparecen, Apofis le hace una invitación para estar a su lado, ella acepta inmediatamente y se acerca a él.
Anubis acaricia sus mejillas, mientras ella sólo se limita a observarlo, la abraza y levanta su barbilla, la mira tan de cerca.

- Mi hermosa Sejmet, diosa de la guerra, dile al joven Faraón que lugar tienes aquí -

- Atem, soy tan libre aquí como quiero, puedo usar todo mi poder si así lo deseo, no estoy en contra de mi voluntad si así lo crees, vine aquí para liberar a Apofis por mi cuenta, pero antes de ello destruí a quienes me esclavizaron Nephthis y tu tío ya no existen, sus almas han sido deboradas por Apofis y no me detendré para terminar de eliminar a aquellos que me utilizaron y tu joven Faraón serás el siguiente, Atem deseo tu vida para entregársela a Apofis, él será más fuerte y eliminará a Ra y a toda la humanidad, eliminaremos todo aquello que desde un principio no tuvo una razón para existir, ayudaré a Apofis a obtener todo lo que él desee, porque mi corazón ahora también le pertenece -

Al escuchar esto Atem se lanza sobre Apofis, pero ___ lo defiende creando un escudo de energía cristalino, al hacerlo mi amigo es expulsado con gran fuerza contra uno de los muros del lugar, nos acercamos rápidamente para ayudarlo sin embargo se levanta antes de que lleguemos a él.

- ¡Apofis, voy a destruirte y haré que ___ vuelva a ser quien era! -

- Vamos entonces, quiero ver como es que lo intentas -

Atem invoca un espíritu muy antiguo llamado "mago oscuro"

Apofis sonríe entonces, mientras continúa:

- Bien Faraón, entonces que así sea esto, quería evitar una pelea contigo ya que no te considero digno para una batalla, pero si tienes tanta prisa por morir aquí y ahora entonces que la batalla entre dioses demonios y hombres comience -