Entre Dioses, Demonios Y Hombres (Atem y tu) (Completa)

Capítulo 27

Narra Zaid

Al fin hemos tenido un día para poder descansar de Denna, ha decidido viajar repentinamente a Roma, ha dicho que irá a darles la noticia a sus padres acerca de la boda, por lo que he aprovechado para acercarme a Atem nuevamente

- De nuevo estamos solos - digo mientras lo observo trabajar

- Si, así es - responde sin mirarme

- ¿No cres que sea buena idea, aprovechar el tiempo y buscar a ___ para arreglar algunas cosas? -

- No, las cosas están bien así -

Sus respuestas son tan secas y frías, no pareciera ser el Atem que conozco

- Supongo que tendrás una buena idea para salir de esto, ¿verdad? -

- No, mis decisiones son claras aunque a nadie le parezca ni las entienda -

- Atem, estamos hablando de ___, ¿tienes idea de como se siente? -

- No y no creo que debamos seguir con este tema, hay muchas otras cosas más importantes que hacer -

- ¡Atem escúchame! - No puedo evitar alterarme y subir el tono de mi voz

Al notarlo Atem me mira, se endereza en su silla y se cruza de brazos

- Bien Zaid, ¿que es lo que se supone que quieres que haga? -

- Que vayas ahora a aclarar todo esto con ___, tu le prometiste algo completamente distinto a lo que estás haciendo -

- Dijiste que no contaría contigo por lo que decidí, aun sin saber tampoco como me siento por dentro -

- Pues al menos creo que no pareces muy afectado Atem -

- ¡¿Que es lo que tú y ___ esperan que haga?!, soy el Faraón y debo actuar como tal, no puedo ir por ahí lamentándome por todo, ¿acaso sabes el dolor que siento por haberla perdido? y peor aún, por hacerla a un lado con la persona que menos soporto en mi vida, ¿que esperabas que hiciera?, deseo tanto como ella que sea libre -

- Pudiste esperar Atem, pudiste actuar diferente, pudiste haber visitado cada templo de Egipto, de Roma, de todo el mundo buscando lo que necesitamos, pero fue más sencillo hacerle daño -

- Ustedes no van a entenderlo -

- ¿Entender que?, entonces explícanos de otra manera, yo no hubiera hecho esta estupidez, ¡hubiera actuado diferente desde el mismo instante en el que me enamoré de ella, la hubiera protegido sin abandonarla como tú lo haces todo el tiempo! -

Un gran silencio incómodo aparece, Atem abre sus ojos como un par de platos, esta tan sorprendido como yo por lo que he dicho.

- ¿Que fue lo que dijiste? - pregunta mientras se levanta de su silla bruscamente.

Suspiro y lo miro enfrentando sin miedo lo que he dicho:

- Al igual que tú Atem, lo prometí, prometí no hacerlo y mucho menos decirle a alguno de los dos, ésta promesa fue conmigo mismo, sobretodo porque sabía que ambos se correspondían, lo sabía porque ambos me confesaron lo que sentía uno por el otro el mismo día, decidí hacerme a un lado entonces y dí por hecho que estaría mejor a tu lado, el tiempo que te conozco, la amistad que hay entre ambos, no podría soportar perder a mi mejor amigo por enamorarme de la misma chica, eres aun más importante para mi, eres lo único que me queda en todo el mundo, preferí alejarme para verte feliz... pero haz cometido muchos errores Atem... ella realmente es única, no por ser una diosa conviviendo con nosotros, tan humanos y mortales llenos de errores... ella es única como una persona común, lo se porque pasé tiempo con ella a diferencia de ti, pero todo ese tiempo lo aproveché para hablarle siempre bien de ti... -