Después de 3000 años.

III

Gravity Falls, Oregón, Jueves 23 de Junio del 2017.

Era otra mañana normal en el pueblo de Gravity Falls, un pueblo ubicado en Oregón California, había pasado exactamente un año desde que los gemelos Pines habían llegado para quedarse con su tío abuelo tras la muerte de sus padres en aquel accidente de tráfico y no es que los chicos necesitaran quedarse ahí, es solo que su tío abuelo Stan deseaba tenerlos cerca después de tal pérdida.

—¿Estás hablando en serio Dipper?

—claro que si Mabel, estoy hablando completamente en serio hermana. —sonriendo orgulloso.

—¡Oh por dios! ¡Tío Stan! ¿Escuchaste eso?

El viejo volteo a ver a la chica que no dejaba de brincar en ese lugar, el anciano sonrió al ver que ambos gemelos estaban emocionados y era normal, Dipper había conseguido su sueño.

—claro que lo escuché calabacita, muchacho estoy orgulloso de ti.

—esto merece un abrazo familiar.

Los tres se unieron en un cálido abrazo, a veces la familia podía ser lo mejor que uno puede tener y para Dipper así era, sus padres los habían dejado es cierto pero ellos tenían a sus tíos que aunque uno estuviera lejos al final de cuentas igual se preocupaba por ellos, para Dipper Mabel, Stan y Roderick. —quien era su sobrino. — eran un rayo de esperanza en su vida pues sin ellos se sentiría vacío. El abrazo de dió por terminado tras el pequeño llanto de Roderick que pronto cumpliría su primer año.

—será mejor vaya a checarlo.

—anda Mabel, el pequeño te necesita.

La chica estaba subiendo las escaleras cuando se detuvo y miró a donde su hermano.

—Dipper, en verdad estoy feliz y aunque te vayas quiero decirte que no importa que tan lejos estemos siempre serás mi hermano y aquí nos tendrás para lo que necesites.

—gracias hermana, eres lo mejor que puede existir en este mundo.

La sonrisa de Dipper era sincera, amaba a su hermana quién le brindaba lo mejor y más lindo en su día a día junto a su sobrino, ellos eran realmente su familia pero pronto tendría que dejarlos para ir a cumplir su sueño.

—¿Y cuando te quieren ahí?

—para inicios del siguiente año así que debería irme una semana antes de diciembre. —llevando su mirada a su tío Stan.

—al menos estarás aquí para el 24 eso es algo bueno, aparte de que podremos celebrarles sus cumpleaños juntos y que estés para el de Roderick.

—lo sé, ¿El tío Ford vendrá este año?

—me dijo hace una semana que sí por lo tanto estará en diciembre aunque sea.

—entonces me iré con él.

[.....]

Dipper había salido pegar unos volantes para darle promoción a la Mystery Shack cosa que después de pegarlos decidió adentrarse al bosque a ver algún gnomo que en su infancia era muy común que lanzará alguno para divertirse.
El chico llegó a una parte del bosque que el conocía bien y sonrió al sentir el viento mover su cabello ligeramente.

—bien creo que mejor descansaré, ya otro día jugaré a lanzar a los gnomos.

Dipper iba a sentarse cuando un humo misterioso invadió el lugar, una sonrisa en el aire se hizo presente mientras observaba como de nuevo el humo se dispersaba y con ello dejaba ver a tres chicos vestidos con Hanbok.
Los chicos abrieron los ojos encontrándose en un sitio diferente al que estaban hace unos minutos, el rubio se paró de golpe y observo a su alrededor pero se sorprendió y al ver a Dipper justo enfrente de él.

—¡Mason! —parándose del pasto al ir donde el chico. —¡Pensé que no te volvería a ver! ¿Qué haces? Espera ¿Porque estás vestido así?

El chico castaño no entendía nada pero sentía un pequeño miedo pues un extraño se le acercaba y decía su nombre tan natural, Dipper golpeó en la cara al chico y lo empujó, Robbie y Gideon reaccionaron y fueron a ellos, Gideon ayudaba a pararse a Bill y Robbie sacaba la espada, ahora Dipper estaba asustado, se había encontrado a unos locos y uno de ellos iba a asesinarlo.

—¡Alto Robbie! No lastimes a Mason. —observando que Dipper cerrará los ojos y sus labios se tornaran pálidos.

—¡Pero su alteza! Él se atrevió a golpearlo.

—esta en todo su derecho si tenía miedo. —mirando al chico para acercarse. —esta asustado, puedo verlo en su cara, lo conozco demasiado bien.

—¿Quienes son?

Te lo dije pequeño príncipe, tendrás que adaptarte y este es el tiempo donde podrás resolver las cosas.

—Ellos son Robbie Valentino y Gideon Gleeful. —presentándolos como es debido. —pero ¿Qué haces vestido así Mason?

—para comenzar esta es mi ropa normal, la pregunta real es ¿Porque ustedes visten raro?

Los tres chicos se miraron entre sí y luego miraron la ropa que cada uno llevaba para tratar de entender lo que el castaño decía pero para ellos sus ropas eran de lo más normal, no como la de Dipper, ese chico sí que estaba vestido como un loco. La mirada de Gideon se desvió a su alrededor percaptandose de que ya no estaban en el cuarto del príncipe sino en el bosque.

—su alteza no estamos en su alcoba... Me temo que el demonio nos engaño.

—¿Demonio? ¿Necesitan ayuda? Digo están diciendo disparates.

—¿Cómo puedes hablarle así a tú príncipe? Arrodíllate y pide perdón.

El castaño comenzó a reír, le parecía divertido la forma en la que ellos hablaban y actuaban, tal vez no estaban locos y solo era unos comediantes, el chico se calmó y decidió solo sentarse en el tronco que había a su lado.

—no creo que Cass nos haya mentido Gideon.

—pero su alteza, ¿Porque nos enviaría aquí?

—recuerda las últimas palabras que dijo antes de que despertemos aquí.

—"la verdad no la encontrarás aquí, tendrás que ir a un futuro donde se repite el ciclo; si logras salvar lo que en verdad amas en aquel sitio, entonces y solo entonces aquí podrás saber la verdad." O algo así fue lo que dijo el principito. —sonriendo al aparecer detrás de Dipper justamente abrazándolo.

—¿Eh? ¡Ahhh! —sintiendo eso al empujarla para alejarse.

—jajaja que divertida reacción del pino~

—¿Cass? —mirando a la chica.

—casi emperador.

La sonrisa en sus labios estaba bien formada, la chica vestía de negro al igual que su hermano, solo que ella no traía un Hanbok sino que vestía algo de la época de Dipper.