XIII

356 60 10
                                    

Todo había regresado a la normalidad después de haber hecho los tratos con aquellas chicas, Dipper estaba mirando al lago mientras Bill estaba observándolo desde atrás, el rubio contemplaba la figura del castaño que para ser sinceros no parecía del todo de un hombre pues aunque lucía algo varonil era más delicada que el de algunos tipos que él conocía.

—¿Porque lo hiciste?

—tenía que ayudarte, Bill no era justo lo que esa chica quería hacer.

—pero sus recuerdos...

—no importa, porque al final Key dijo algo que no puedo negar y me consuela. —sintiendo que el rubio se sentará a su lado. —ella dijo que las memorias del corazón no se olvidan.

—memorias del corazón...

La voz de Bill era como un suave susurro que hacía que el corazón de Dipper latiera de una manera muy diferente a como él estaba acostumbrado.

—incluso aunque nuestras memorias sean borradas lo que nos enseñaste, los momentos que pasamos juntos se quedarán grabadas en el corazón, aquí nadie puede borrarlas o modificarlas.

—es cierto. —sonriendo algo sonrojado, pues para él que Dipper dijera eso era como una pequeña confesión aunque sabía que no podía pedir mucho. «no desearé más de lo que pueda tener, ni tan cerca ni tan lejos, me mantendré a una distancia adecuada, una distancia donde ni yo pueda lastimarlo ni él pueda lastimarme.» pensó mientras admiraba aquella persona a su lado, el castaño estaba mirando con una sonrisa sincera al lago, las luciérnagas pasaban cerca de ellos y hacia de aquella escena algo mágico. Entonces ahí es cuando Bill se dió cuenta de una cosa: se había enamorado de un chico y no uno cualquiera, se enamoró de alguien quién conocía mejor que nadie, alguien con el que si lo analizaba bien, tanto en el pasado como en este futuro pasaba más tiempo a su lado que con su misma esposa.

—hace frío, Bill es momento de regresar a la cabaña.

—¿Tan rápido? ¿No podemos quedarnos aquí un rato más?

—podemos regresar otro día, anda vamos.

El rubio hizo un puchero y obedeció para ambos pararse del pasto y avanzar de regreso a la cabaña, el camino fui silencioso pero no uno incómodo, ese silencio era extrañamente cálido para ambos, al llegar a la cabaña, antes de entrar Bill sostuvo a Dipper del brazo ocasionando que este volteara a verlo.

—olvide decirlo pero feliz cumpleaños Pinetree.

Antes de que Dipper pudiera decir algo, por inercia Bill lo atrajo más hacia él para plantarle un beso, un beso que jamás esperaba Dipper pero que al sentir el contacto de sus labios con el ajeno, al sentir esa dulce respiración mezclarse con la suya hizo que en su interior algo más creciera, que la llama que era antes pequeña se incrementará. Suavemente el beso que era tierno fue siendo correspondido por el castaño quien llevó sus manos alrededor del cuello del rubio quién como si su cuerpo estuviera acostumbrado al ajeno llevó sus manos a la cintura de este para atraerlo hasta más no poder contra su cuerpo, sintiendo el calor que emanaba del castaño; lamentablemente tuvieron que terminar separándose por la falta de aire. Ninguno podía mirarse, ambos estaban felices pero demasiado avergonzados por dejarse llevar, ahora no podían ocultarlo, ahora no podían negarlo más, ambos se habían enamorado.

—c-creo que es mejor entrar.

—s-si...

—....Bill...

No hubo más que silencio, Dipper entendía que Bill quería seguir escuchando lo que diría, entonces tomo aire —más bien el valor para lo que diría. — y prosiguió.

me gustas pero no creo... Que deberíamos hacer esto... Tú veniste por Mabel así que no cambies los sentimientos que tienes de ella por mi.

—¿Qué dices?

—es solo que, ella es mi hermana y en el pasado es tu esposa, no puedo estar haciéndole esto.

—Pinetree...

—además cuando todo esto acabe ¿Qué pasará con nosotros?

Como si el cielo se cayera, entendió lo que Dipper decía, no es que el castaño se arrepintiera de aquel beso o de sus sentimientos, es solo que el de ojos chocolates tenía miedo, tenía miedo a que todo acabará, a que todo terminará entre ellos y jamás pueda recuperar aquello que el otro le hizo sentir.

[......]

Había pasado unas horas desde aquel beso, Dipper estaba acostado en su cama intentando dormir pero no podía, su corazón no dejaba de latir con fuerza, la verdad el dormir no era para nada una opción pues su mente no dejaba de lado ese momento.

—vamos Dipper, no puedes estar hablando en serio.

—entonces ¿Estás nervioso de que eso sea amor?

—¿Key?

—¡Oh! No, para nada, mi hermana está con Dori.

—¿Dori?

La mirada de Dipper comenzo a danzar en la oscuridad de su cuarto, pero no había nada, no se encontraba nadie con él en aquel cuarto. Una risa elegante y en cierta parte aterradora —solo para Dipper pues en medio de la noche cuando todos duermen, que alguien te visite y no sepas ni dónde esta, eso ya suena bastante escalofriante ¿No creen? —

—es nuestra hermana menor, puedes ver en el espejo aquí estoy.

Suavemente se paró de su cama y jalo la sábana para cubrirse encima, tenía algo de miedo es cierto pero Gravity Falls era algo frío en las noches así que más que miedo tenía frío, con precaución camino hasta el espejo y frente a él se encontraba un chico de cabello castaño tirando a rojizo, de ojos azul eléctricos y Hanbok como vestimenta.

—¿Quién eres?

Bill me había preguntado cuando lo conocí "¿Qué eres?" Y cuándo te conozco, tú me preguntas "quién soy".

—bueno, ya conocí a tu gemela y a la otra chica así que es normal que no tenga tanta duda de que eres.

me llamo Cass y la otra chica es Dori aunque Key le dice D-Fly~, ambos tenemos nuestra manera de mostrarle afectó a nuestra hermanita pero eso no importa, escuché qué el amor está en el aire.

eres un ser bastante chismoso ¿No crees?—alzando una ceja al ver al chico sonreír.

—es para no aburrirme, lo entenderías mejor si vivieras eternamente vigilando a cada humano.

—no creo entender aunque eso llegará a suceder, cosa que realmente no creo posible.

aún así, Bill te mueve el tapete ¿No?

Las mejillas de Dipper ardieron ante aquello, Cass sonrío tan ampliamente como podía.

no tienes porque negarlo Dipper, en total se ve que le gustas igual.

—pero él dijo que vino para salvar a Mabel además...

—¿Y que tiene eso? Los sentimientos de los humanos suelen cambiar siempre.

—...eso lo sé y es por eso que no quiero que esto vaya a más entre nosotros, somos amigos y Bill lo sabe. —bajando la mirada al sentarse en el piso frente aquel espejo.

muchas veces la amistad comienza un verdadero amor.

—es esposo de mi hermana.

en la actualidad es esposa de Gideon y ambos tienen un hijo.

—Pero en el pasado no es así. —mirando de nuevo al espejo.

y estás en el presente ¿No? Entonces ¿Qué caso tiene hablar del pasado?

Después de 3000 años.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora