Especial 2.

407 51 12
                                    

—¿Cómo es posible que aún no le hayas pedido que sea tu novio?—un indignado Hyungwon estaba parado frente a él, mientras esperaba pacientemente a recibir un golpe en su cabeza por estúpido.

Muy bien sabe que no es su culpa. Minhyuk podrá ser idiota e indeciso a veces, por eso Kihyun se enojó con él esta mañana. Lee había parado el beso únicamente para decirle que iban demasiado rápido. Necesitaban más tiempo. Lógicamente, eso hizo que el más bajo se enfadara. ¿Qué tan lento quería ir? Se conocen de toda la vida, por suerte y no son siameses, ya bastante tiempo tuvieron. Pero no fue más que una mal interpretación de Kihyun que Minhyuk no fue capaz de explicar porque el más bajo se fue luego de decirle que es un idiota. No se debía a ellos, más bien a Jooheon. Y eso lo confundía mucho al peliceleste, quería pero a la vez no. Se sentía culpable de algún modo, como si el hecho de inciar una relación con el chico que tanto anheló en un pasado fuera pecado o como si llegara a afectar en la vida del ex de Kihyun.

—Es que hace poco Jooheon y él terminaron, pienso que es muy pronto todavía.—el mayor responde pacífico.

—Hijo mío, Jooheon por poco y no le pide matrimonio a Changkyun.—espetó Hyungwon llevando una de sus manos a su cintura y con la otra señala detrás de Minhyuk.—Ahora irás y le pedirás a Kihyun que sea tu novio. Mucho tiempo esperaste para esto, por un momento creí que ibas a morir virgen.

—Si eso llegaba a pasar, tú te ibas a ofrecer en mi último respiro para que te la meta, ¿no es cierto?

Chae ríe sonoramente con una notable ironía.

—Sí, claro. Como si no me gustara la vagina. Vamos.

Lo tomó del brazo, arrastrándolo con fuerza para obligarlo a ir hacia su departamento, donde seguramente Kihyun siga allí sintiéndose algo ofendido porque su mejor amigo lo había detenido de un beso, sin saber que tenía pensado preguntarle si al fin quería ser su novio. Kihyun lo ansiaba, lo necesitaba y estaba dispuesto a dar ese paso. Pero el estúpido de Minhyuk lo había echado todo a perder.

El pelinegro se cruzó de brazos sobre el sofá atrayendo sus rodillas hacia su pecho, sintiéndose un poco mal porque quizás exageró bastante con su reacción. Y claro que lo había hecho, estuvo a nada de golpearlo simplemente porque Lee aún quería esperar un tiempo más. Bien lo podrían haber hablado antes.

—Creo que debería disculparme.—susurró para sí mismo.

La puerta de su casa que compartía con Minhyuk fue abierta y el peliceleste no tardó en ser empujado dentro antes de que vuelva a ser cerrada por alguien, por Hyungwon. Ambos chicos se miraban, uno desde el sillón y el otro desde la entrada, tenso pese a que no tenía ningún motivo para estarlo. Permanecieron observándose por unos segundos fijamente, donde Minhyuk intentaba aguantar la respiración como si fuera un niño. Hasta que finalmente soltó:

—¿Quieres... helado?

Y se odió a sí mismo porque a pesar que sabía que iba a aceptar ser su pareja, estaba totalmente apenado. Sentía sus mejillas arder, que estaban a punto de explotar. Quería escapar de allí dejando un papelito con la pregunta y volver cuando le llegue la respuesta.

El menor de los dos río ante eso y se puso de pie para dar unos pasos hacia su mejor amigo cruzándose de brazos.

—Se supone que yo debo ofrecerte eso.—dijo Kihyun.—Lo siento... por haber sido tan exagerado.

—¡Minhyuk deja de ser tan idiota y dilo de una puta vez!—el grito de Hyungwon desde el otro lado se hizo presente, lo que provocó que los dos chicos dentro del departamento rieran ante eso. Obviamente, con el anteriormente nombrado muriéndose aún más de vergüenza que antes.

Kihyun era de todo menos tonto, supo enseguida lo que tenía que decirle su mejor amigo. Y no era precisamente una disculpa -que debía admitir que no la merecía, más bien él debía disculparse y ya lo hizo-, sino más bien una pregunta. De tan sólo pensar en ello, se emocionó aún más sonriendo como un estúpido al no aguantar ver la cara de Minhyuk cuando lo haga.

—¡¿Debo esperar a que me lo diga o responder directamente?!—exclamó Yoo hacia Hyungwon por más que los separaba una pared, que no era más que obvio el hecho de que seguramente está detrás de la puerta con el oído pegado a ella oyendo absolutamente todo. Y podía asegurar que en cuanto todo termine, él entraría victorioso y con alguna bebida en mano para celebrar.

—Nah, espera a que te lo diga así el hijo de puta sufre un poco.—respondió Chae.

—¡Vete a la mierda tú y todos tus parientes, Hyungwon!—gritó Minhyuk y luego se oyó una risa en respuesta a eso.

Kihyun estaba descostillándose de la risa. Ya sea por los nervios o porque realmente la situación que se había montado era demasiado graciosa. Sumando eso y lo idiotizado que se encontraba, hacía que riera por todo y por nada. Finalmente, el mayor aclaró su garganta para romper la poca distancia que había entre los dos tomando desprevenido al pelinegro. Y toda esa gracia y esas risas que tenía, fueron reemplazadas por una expresión confundida y cierto pánico al ver la suave y oscura mirada de Minhyuk. Yoo dio un paso hacia atrás por instinto, caminando en reversa hasta que cayó de culo en el sofá con su mejor amigo que lo acorraló en tan sólo un parpadeó.

No entendía el por qué se sentía cobarde, pero así se encontraba en estos momentos. Se sentía como un hámster a punto de sufrir un infarto siendo acorralado por un perro hambriento. Su corazón se aceleró en cuanto Minhyuk acercó su rostro al contrario, con sus mejillas ruborizadas, sus ojos desbordando amor y sus labios que rogaban ser besados.

Kihyun era un tomate. No sabía hacia dónde podía mirar.

—Kihyunnie, te amo. —susurró Minhyuk acercándose más y sus labios rozaron. Podían sentir la agitada respiración del otro chocar contra su piel. Eso hacía que quisieran perder el control, fundirse juntos.—¿Quieres...?

No fue capaz de acabar. El menor acabó por romper la poca distancia que había entre ellos para besar al peliceleste como respuesta, no era necesario que siguiera hablando. Las cosas estaban más que claras y las palabras no hacían más que sobrar. Sólo se necesitaban acciones, nada más.

Kihyun colgado del cuello del mayor que poco a poco se fue dejando caer sobre el sofá hasta que ambos quedaron acostados, con el más bajo quedando arriba de Minhyuk, compartiendo saliva, disfrutando de los labios del otro que se movían con cariño en un dulce compás. No habían segundas intenciones, el calor y el deseo en ningún momento aumentó.

—Claro que quiero, estúpido.—sonrió Kihyun separándose, mirando con ternura a quien ahora, oficialmente y después de tanto tiempo, por fin es su novio.

Siento que quedó un poco mierda, pero bueno. También quedó corto, lo siento por eso ahre.

Me di cuenta de que literalmente estoy re inactiva en Wattpad, no sé qué onda, pero bue.

El último especial va a contener lemon 7w7

Shine Forever [Kimin-Kihyuk] [Monsta X]Where stories live. Discover now