마흔아홉 💜

2K 175 10
                                    

Haneul

Desde que llegamos a casa Tae a estado extraño, cuando su celular suena se aleja de mi y cuando le pregunto quien es solo me dice que es del trabajo.

Trato de entenderlo porque se que debe estar muy ocupado pero no me gusta que me mienta y si algo se trae lo descubriré

La tarde la habíamos pasado viendo una película, pero a cada momento eramos interrumpidos por el molesto sonido de su teléfono

—¿Puedes apagar eso por favor? — pregunté ya algo enojada.

—Lo siento, tengo que atender— se fue al jardín para contestar.

Después de unos segundos salió, tomó su saco y se despidió de mi para irse dizque a la empresa. A mi no me daba nada de confianza esas llamadas a cada rato y de repente se va

Decidí seguirlo, sé que esta mal pero la curiosidad y los celos pueden mas que yo misma. Tomé mi bolso y cuando el salió en su auto corrí a tomar un taxi para que lo siguiera

Tae manejó varios minutos hasta que tomó una calle que jamás había visto y que menos llevaban a la empresa, mi enojo empezaba a elevarse

¿A donde iba? ¿Y con quien? ¿Que tramaba? Mas le vale que no sea lo que estoy pensando porque esta vez si me voy lejos de él y nunca me vuelve a ver

Pasaron como 20 minutos de camino y Tae se detuvo frente a una casa enorme.

Él estaciono el auto a un lado y bajó con unas bolsas en mano, le pagué al señor taxista y fui hasta donde había entrado Tae

La puerta no estaba cerrada así que entre silenciosamente para que no escuchara, cuando crucé la puerta sentí unas manos cubrir mis ojos, con mis manos toqué el cuerpo que estaba detrás de mi y era obvio que se trataba de Tae, pero ¿que esta haciendo?

—Tae ¿que haces aquí?— pregunté tratando de sonar seria.

—Silencio— susurró en mi oído haciendo que mi piel se erizara por el sonido de su voz.

—¿A donde me llevas? — pregunté caminando en la dirección a donde él me llevaba ya que yo no podía ver nada.

—Te llevaré a ver las estrellas— susurro causando muchas sensaciones en mi.

—Contigo voy al fin del mundo si es necesario

—Listo— habló deteniendo mi paso, fue quitando sus manos lentamente hasta que ya nada me impedía ver.

Fui abriendo mis ojos, encontrandome en un balcón con una hermosa vista, se podía apreciar la playa, el cielo y las estrellas al mismo tiempo todo era perfecto incluso el chico a mi espalda

Me giré para quedar frente a él y unir nuestros labios en un lento pero apasionado beso. Él abrió paso en mi boca para introducir su lengua.

Sus besos me volvían loca, sus labios era lo mas exquisito que podía probar y ni hablar de sus escurridizas manos que  hacían pequeñas caricias por mi espalda

—Tengo que mostrarte algo— dijo separándose de mi dejándome con las ganas de seguir devorando sus ricos labios.

—¿Que? — pregunté sonriendo, casi no estaba poniendo atención a lo que me decía ya que me encontraba perdida en su hermosa sonrisa y sus ojos penetrantes.

—Mira allá— me giró para que viera hacia al mar, él se encontraba a mi espalda abrazándome por la cintura — Ves esa estrella que ilumina todo el cielo, que a pesar de que hay muchas mas ella sigue brillando haciendo que las demás sean poco visibles

—Si, ya veo pero que tiene que ver eso— reí bajo.

—Esa estrella tiene un nombre pero como para mi es muy difícil de decirlo le puse como nombre " Haneul" — sonrió poniendo en mis manos un papel que efectivamente decía que esa estrella tenía mi nombre, estaba completamente en shock no podía creerlo, jamás me habían dado un regalo tan hermoso como este.

—¡Oh! Tae, yo-yo no se que decir — dije nerviosa tratando de controlarme.

—¿Sabes por que le puse tu nombre? Porque tú eres como esa estrella, puede que haya muchas otras mujeres en mi vida pero la única que logra iluminar mi vida eres tú, eres la única capaz de hacer que mi corazón brinque de alegría cada vez que te veo, eres la única capaz de cambiarme y la única que siempre estuvo conmigo a pesar de los malos momentos, eres la única mujer a la que amo y amaré siempre y aunque decidas iluminar algún otro cielo igual seguiré amándote y viéndote brillar desde donde este

—Jamás iluminaria otro cielo que no fuera el tuyo— lo abracé — Te amé desde el primer momento en que te vi y eso jamás cambió, te metiste en mi corazón y de ahí jamás saliste. Por eso te amo con mi vida

—Yo te amo mucho mas— me besó.

Estaba demasiado feliz en estos momentos, sentía que tanto amor no me cabía en el pecho, hoy después de tanto tiempo y malos momentos al fin estoy junto al pequeño Taetae, ese chico con el que siempre soñé en estar casada

Siempre lo añoré y cuando la vida lo volvió a poner en mi camino, me quiso dar una lección de vida. Me enseñó que si amas a alguien debes de entender que no todos somos perfectos y que comete errores como todos los seres humanos pero que con el amor y el apoyo esa persona puede cambiar y convertirse en lo que siempre fue

Conocí a Tae cuando éramos unos niños y a esa edad todos pensamos que la vida es color de rosa. Yo quería casarme con Tae pero cuando crecí me di cuenta que a veces la vida tiene planeada otras cosas para ti, si, me case con él pero no todo fue bello como lo imagine, pasamos por muchos problemas pero pudimos afrontarlos y dejar que aun lado el odio y la venganza para enfocarnos en lo que realmente nos hace felices. Nos dimos cuenta que lo que realmente no hace felices no es el dinero, ni los lujos ni nada de eso, nos dimos cuenta que solo necesitamos estar juntos para poder ser felices porque nos amamos y con eso nos basta


𝙀𝙡 𝙥𝙧𝙚𝙘𝙞𝙤 𝙙𝙚𝙡 𝙖𝙢𝙤𝙧Where stories live. Discover now