𝙀𝙡 𝙥𝙧𝙚𝙘𝙞𝙤 𝙙𝙚𝙡 𝙖𝙢𝙤𝙧

쉰 💜

Haneul

Después de el increíble regalo que me acababa de dar Tae, ambos nos quedamos en el balcón viendo las estrellas, aun me costaba creer que él le puso mi nombre a una estrella, ahora siempre que vea el cielo por las noches me acordaré de él

—Tae—llamé poniendo mis manos sobre las suyas que se encontraban en mi vientre puesto que me tenía abrazada por la espalda.

—¿Que pasa mi amor?—preguntó dando un pequeño beso en mi cuello.

—Cuando Namjoon quería tu dinero y tú se lo ibas a dar, me sentí muy mal

—¿Por que? —habló girandome para quedar frente a frente.

—Porque no me gustaba la idea de que perdíeras todo lo que tanto te costó conseguir estos años—bajé mi mirada.

—¿Sabes? La razón por la que trabajé todos estos años era para poder regresar y ser alguien digno de ti—habló tomando mi barbilla con sus suaves manos —Y si Namjoon lo quería a cambio de ti lo hubiera dado sin pensarlo, hubiera dado mi vida por ti si es necesario

—A mi no me hubiera importado estar contigo aunque no tuvieras dinero, yo me enamoré de ti por tu humildad y tu alegría, para mi el dinero era lo de menos, solo quería estar con el pequeño Tae que se robó mi corazón—lo abracé poniendo mi cara en su pecho.

—Gracias a ti me di cuenta que el pequeño Tae siempre estuvo presente y aquí estará siempre — dio un beso en mi cabeza mientras me abrazaba con fuerza.

—Te amo—susurré con mi cara aun en su pecho.

—Yo te amo mucho mas— dijo tomando mi barbilla para poder unir nuestros labios en un lento pero apasionado beso como solo él sabia hacerlo.

El beso empezó a intensificarse y las manos de Tae viajaban por debajo de mi blusa, y las mías jugaban con su cabello mientras seguíamos besándonos como si fuera la última vez

Se separó de mis labios y me vio detenidamente y yo hice lo mismo, ambos nos comíamos con la mirada

Tae sonrió levemente y tomo mi cabello haciéndolo a un lado para tomar posesión de mi cuello, donde empezó a dejar cortos besos.

Con sus manos recorrió mi brazo desde abajo hasta arriba encontrándose con el tirante de mi blusa, tomó el tirante y lo deslizo lentamente para luego besar mi hombro descubierto

No podía evitar dar leves gemidos que hacían prender mas el ambiente. Tae bajó por completo ambos tirantes de mi blusa y la quito de un solo lanzándola al piso, dejó mis pechos solo cubiertos por mi sosten de color rosa.

Él me vio pervertidamente y acercó lentamente hasta mis pechos, donde empezó a besarlo y succionarlos. Yo solo podía lanzar mi cabeza había atrás disfrutando del placer que Tae me estaba provocando

Bajó sus besos hasta que se encontró con el cierre de mi short el cual fue desprendido de inmediato. Tae volvió su vista a mi y unió nuestros labios en un desesperado beso, me fue guiando hasta la cama donde me acostó con cuidado

Se alejó de mi y empezó a quitar su ropa, primero su camiseta dejando ver su abdomen bien marcado. Verlo así me provocaba desearlo más. Luego prosiguió con su pantalón dejando a la vista su miembro que ya se marcaba bastante sobre su bóxer

Se acercó lentamente a mi, mirándome perverso. Beso toda mis piernas hasta encontrarse con mi braga, paso su mano en mi intimidad haciendo que mi espalda se encorvara producto del éxtasis que sentía

Tomó mi braga y la retiró suavemente hasta deshacerse de ella, luego tomó mis piernas abriéndolas de un solo, se posiciono entre medio de estas y empezó a introducir su lengua lentamente, luego empezó a mover su lengua dentro de mi haciéndome jadear. Su lengua estaba apuntó de hacerme llegar al clímax, Tae me estaba volviendo loca con solo su lengua

—Tae—gemi sujetándolo del cabello.

Él siguió con lo que estaba haciendo, y ahora en vez de su lengua sentí dos dedos dentro de mi, eso hizo que soltara gemidos aún mas fuertes

Sus dedos se movían dentro de mi causandome placer y mas placer, sentía que me volvería loca de tanto éxtasis

Tae saco sus dedos y empezó a besarme, mientras sentía su miembro rosar con mi intimidad provocandome gemidos que fueron ahogados con los besos de Tae

Ya estaba mas que excita, moría por sentir a Tae dentro de mi y él no tardo mucho en hacerlo ya que empezó a quitar su bóxer dejando a mi vista su gran erección

Relami mis labios y lo atraje hacia mi para empezar a besarlo, mientras el introducía su miembro dentro de mi.

Tae dejo de besarme para dedicarse a dejar pequeñas marcas en mi cuello mientras me embestía

Mis gemidos eran incontrolables y a él eso parecía gustarle, ya que no podía ocultar su enorme sonrisa

Después de unos segundos Tae dejo de embestirme tratando de recuperar el aliento pero en ese momento con las pocas fuerzas que me quedaban ya que yo también estaba agotada hice un movimiento haciendo que Tae quedara sentado sobre la cama, apoyó sus manos detrás de su espalda y yo quede sobre su regazo

Empecé a moverme sobre el miembro de Tae de un lado a otro, este lanzaba su cabeza hacia atrás mientras ambos gemiamos sin control

Las embestidas aumentaron y ahora Tae me sujetaba de la cintura para intensificar mas el acto.

Podía ver en los ojos de Tae el completo placer que sentía y su sonrisa malvada que ponía al gemir me volvían loca.

Los gemidos que soltaba con su voz extremadamente ronca hacían que me excitara mas, él quitó sus manos de mi cintura y las llevó a mi pecho donde empezó a jugar con ellos mientras yo me movía sobre su miembro

Después de varios minutos ambos llegamos al orgasmos juntos. Estábamos exhausto viendo hacia el techo, mientras nuestros pechos subían y bajaban a gran velocidad

Me encantaba estar con Tae, él sabia como volverme loca con tan solo un movimiento, él era el mejor en esto

—Te amo—dijo entre cortado con su respiración agitada y su voz altamente sexy.

—Te amo mas mi Taetae—susurré girandome para quedar frente a él.

—Haneul— llamó viéndome tiernamente.

—¿Que pasa?—pregunté viéndolo atentamente.

—Gracias a ti descubrí que el amor no tiene precio— sonrió mostrando su hermosa sonrisa cuadrada — Que pueda ser que tenga todo el dinero del mundo pero te necesito a ti para que mi felicidad pueda estar completa—besó mi frente— Siempre soñé con estar así contigo sin ningún impedimento y ahora al fin lo logramos

—Siempre supe que algún día íbamos estar juntos y lo logramos a pesar de todos los problemas—sonreí abrazándolo.

—Logré cumplir mi promesa de que cuando fueras una modelo exitosa me casaría contigo — río abrazandome con fuerza.

—Y yo cumplí mi promesa de casarme con el pequeño niño que quería ser un orgullo para sus abuelos

—Mi modelo insolente—río tiernamente.

—Mi pequeño Taetae—respondí con una gran sonrisa.

Ahora si llegó el fin 💔
Quiero agradecerle a las personas que le dieron mucho amor a esta historia y que siempre estuvieron esperando que actualizará, muchas gracias espero y sigan leyendo las demás historias
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