Catorce💫

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-¿Así que, pasaron todo el fin de semana juntos?.- Jimin levantó una ceja.

-Sí, aunque siendo sinceros el domingo no cuenta porque pasó más tiempo con mi computadora que conmigo.- murmuró Jungkook caminando hacia la cafetería junto a su mejor amigo.

-¿Sabe manejar una computadora?

-Uh, más o menos. Él dijo que ha utilizado las computadoras que hay en la biblioteca del colegio pero...

-Pero esas computadoras son más viejas que mi bisabuela Gertrudis.

-¿Tienes una bisabuela llamada Gertrudis y no sabía?.- Jungkook abrió la boca y los ojos en demasía, mirándolo dramáticamente.- pensé que conocía a toda tu familia.

Jimin rió y golpeó su brazo juguetonamente.

-Sabes que es sólo un dicho.

-Un dicho que sólo he escuchado de ti... recién.- Jungkook hizo un puchero sobando exageradamente su brazo golpeado, en realidad no le había dolido. Jimin rodó los ojos al verlo.- pero, volviendo al tema de Taehyung, él no tardó mucho en comprender cómo funcionaba y comenzó a curiosear en todas mis carpetas.

Jimin lo miró horrorizado.

-¡Oh, no! ¡El porno!

Algunos en la fila de la comida voltearon a verlos con expresiones divertidas y Jungkook quiso que la tierra lo tragara y lo escupiera en Marte. Jimin rió burlándose de la timidez de su amigo.

-No seas tonto. Yo no tengo esas cosas.- murmuró con sus mejillas ardiendo.

-Ajá, y yo no me robo la ropa interior de Yoongi.

Jungkook le lanzó una mirada de soslayo.

-¿Qué? ¿Para qué haces eso?

-No te diré, pero puedes imaginartelo.- Jimin alzó las cejas sugestivamente para luego reír.

-Me preocupas, amigo.- murmuró Jungkook ocultando su sonrisa. Su amigo estaba loco.- Dios, no nos podemos mantener en un tema. Volviendo al tema de Taehyung, él encontró mi carpeta de juegos y le enseñé a jugar la mayoría. Al principio jugamos juntos pero luego me aburrí y quise salir de la casa y hacer algo más divertido pero él no cedió y terminamos todo el día encerrados en su habitación.

-Eso... eso en realidad no suena mal.- Jimin se encogió de hombros.- ya quisiera yo pasar todo el día en la habitación de Yoongi. Es una lastima que siempre haya alguien más en su casa, sus padres o su hermano. Es frustrante.

Jungkook sonrió y picó la mejilla de su amigo cuando infló las mejillas infantilmente.

-Si Taehyung fuera mi alfa si sonaría bien. Pero fue aburrido, sólo podía verlo jugar... y burlarme cuando jugaba mal. ¡Bien, en realidad sí fue algo divertido! Pero me hubiera gustado salir a jugar o algo.

-¿Jugar? ¿Es que tienes seis años, Kookie?.- Jimin preguntó tomando algunos dulces de la sección de postres.- oh, mira, te los compraré para ti y te los daré si te terminas los vegetales.

Jungkook levantó una ceja y le pagó la comida a la cocinera.

-En realidad, tu idea suena bien.- Rodó los ojos sonriendo.

Jimin sonrió grande pagando su comida y los dulces de su amigo.

Los dos chicos caminaron hacia su mesa de siempre encontrándose con la agradable imagen de Taehyung explicándole algo efusivamente a Yoongi y este escuchándolo realmente interesado.

-Hola de nuevo, Yoonie.- Jimin se sentó a un lado de su novio haciendo que el peliverde dejara de mirar al pelirrojo y observara a su pareja. Yoongi lo atrajo de la cintura y lo besó.

-Uh, hola hyung.- murmuró Jungkook volteando la mirada de la pareja besuqueandose para ver a Taehyung con una sonrisa débil.

-Hola, Jeon Jungkook.- sonrió cuadrado contagiando su enorme sonrisa al menor. Taehyung alzó la mano y acarició la mejilla del menor.- me gusta como te quedan los anteojos, Kookie.

-¿En serio?.- Jungkook se acomodó los anteojos por acto reflejo y lo miró tímido, comenzando a jugar con la pulsera roja que tenía en la muñeca derecha. Ese día a la mañana había intentado ponerse los lentes de contacto pero sólo había terminado llorando y con los ojos rojos porque de verdad le dolían.- porque estuve toda la mañana sintiéndome inseguro sobre mi físico.- confesó mordiendo su labio inferior.

-¿Por qué deberías dudar de tu físico, Kookie? Eres lindo, de hecho los anteojos te dan un toque intelectual.

-¿En serio? ¿Sientes que deberías robarme el almuerzo y el dinero?

Taehyung rió a carcajadas contagiando al castaño, obviamente lo había dicho en son de broma.

-Claro que no. Otra vez estás comiendo carne, no te robaría eso.- contestó arrugando la nariz mientras miraba el pedazo de bife de la bandeja del menor.

Jungkook volvió a reír y Taehyung sonrió admirando sus expresiones faciales al estar feliz.

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Estrellita, ¿Dónde Estás? [Taekook/Omegaverse] (PAUSADA)जहाँ कहानियाँ रहती हैं। अभी खोजें