Veinte💫

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-Sí, mamá.

-Es que está haciendo mucho frío. ¿Y si mejor se quedan a ver televisión o algo?

-¡Mamá!

-Bien, bien. Pero vuelvan pronto.- pidió cerrando la puerta.

Taehyung tomó su mano y la metió dentro de su abrigo, entrelazando los dedos dentro del bolsillo.

-¿Qué haces?

-Tu mamá te llenó de abrigos pero dejó tus manos descubiertas.- el pelirrojo se encogió de hombros con una sonrisa.

-Oh, claro.- el omega se sonrojó y miró hacia otro lado intentando distraerse.

-Hay un lugar al que me gustaba ir de niño y no está muy lejos de aquí, ¿quieres ir?

-Vale.

Ambos caminaron hablando de trivialidades por unas cuantas cuadras hasta llegar a una casa sombría.

-Eh...- miró a su alrededor notando que no había muchas personas transitando por esa zona.- ¿se supone que debamos meternos a esta casa embrujada?

Taehyung rió negando con la cabeza.

-No, Kookie. Nuestro objetivo no es la casa, sino lo que hay detrás. Vamos.- tiró de su mano, notando algo de resistencia en el menor.- prometo que no hay ningún fantasma que te haga daño aquí. Es sólo el aspecto de la casa. Lo que hay detrás es hermoso.

Jungkook asintió y se dejó llevar. Bueno... tardarían semanas en encontrar su cuerpo si era matado y mutilado allí. Pero confiaba en el mayor, su vida estaba en sus manos.

Ambos caminaron pasando la casa. Jungkook intentó mirar por la ventana pero ésta estaba demasiado sucia como para poder mirar algo, aunque sí se notaba que estaba vacía, no había sonidos ni movimientos provenientes del interior y la central de luz estaba totalmente destruida y llena de moho.

-Cuidado con el suelo. Está algo húmedo por la lluvia de anoche y te podrías resbalar.- el alfa advirtió señalando un charco de barro que el castaño estaba por pisar.

¿Había llovido anoche? No lo recordaba.

Comenzaron a subir una pequeña colina verdosa. Habían lindas flores esparcidas por todos lados y Jungkook tuvo cuidado de no pisar ninguna. La hierba les llegaba hasta debajo de las rodillas pero no tenían miedo. Según Taehyung, allí no habían serpientes ni otro tipo de seres venenosos.

Al llegar a la cima, Jungkook miró con asombro la ciudad de Seoul. El cielo se estaba oscureciendo y la ciudad se estaba prendiendo. Podía ver vida en todos lados.

-Es hermoso.- murmuró. Volteó a ver al mayor con una gran sonrisa.

-Lo sé. Pero esto no es precisamente lo que quería mostrarte. Bueno, en parte sí, pero hay otro sitio. Ven.- le extendió su mano y lo ayudó a bajar la roca grande en la que el castaño había subido para tener una vista mejor.- sólo un poco más.

-¿Más?

Taehyung sonrió sin contestar. Los dos continuaron caminando, Jungkook siguiendo al alfa porque no veía muy bien sin sus lentes sumando al hecho de que ya casi se ocultaba el sol y los arboles les daba oscuridad.

Estrellita, ¿Dónde Estás? [Taekook/Omegaverse] (PAUSADA)Onde histórias criam vida. Descubra agora