6. Globogate

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VI. 25 de febrero de 2019. 17.12 pm. Piso de Mikel. Madrid.

Otro día triste para el fandom. Solo porque la voz de Natalia sale en una instastory de Mikel. Él le regaló a Nat un globo en forma de corazón inflado de neón y ella lo dejó escapar. Ascendió por el patio interior. Se fue. Lo siguieron con la vista hasta que quedó reducido a un puntito rojo contra el cuadrado de cielo azul. Vale. Globogate. Natalia está con Mikel. El barco se ha convertido en submarino. Se hundió, se hundió. O eso piensan ellas: Celia, Pili, Mayte, o sea: las patrullistas, las logopedas, las eilainers. Incluso las Martikonas. Todas.

- Tía, si no querías el globo haberlo dicho. Lo has soltado adrede -le dice Mikel notablemente irritado-.

-Venga, tronko, déjame.

Mikel tiene una clase de lenguaje audiovisual y sale del piso dando un portazo. Natalia coge la guitarra y sigue componiendo una canción que tiene a medias. Sabe muy bien que esa situación no puede durar. No está cómoda. No se siente libre. Quiere a Mikel, sí. Pero quiere a mucha gente más. Y para qué negarlo: quiere follar con mucha gente más.

Sí bemol.

Hace unos días ella le habló del poliamor. Sacó el tema como quien no quiere la cosa. Pero él no estaba muy receptivo. La escuchaba mientras hojeaba un libro sobre planos-secuencia. Natalia fue entonces al grano.

- Oye, si yo follara con otra gente, ¿a ti te importaría?

Es muy fácil decir que no, hacerse el despreocupado. Y él tuvo la tentación de adoptar esa actitud de "claro, la libertad es importante...". Pero lo que dijo fue:

- Pues me lo tendría que pensar. Mi problema es que yo no quiero follar con nadie más. No ahora.

Entonces Natalia cambió rápidamente de tema.

Do sostenido.

¿Qué hubiera pasado si le hubiera contado que ella sí había follado con otras personas? Bueno, con una persona. Con Alba Reche en persona para ser más exactos. Tres veces. Tres polvazos cósmicos. Nunca diría que el sexo con Mikel era malo. Pero con Alba es otro nivel -pensó Natalia mientras apuntaba en su cuaderno un acorde nuevo para See you babe, su nueva canción-.

Entonces Natalia coge el móvil y llama a Alba.

- Nada, estaba aburrida aquí. Quería salir a dar una vuelta.

- Nat, cariño, estoy en casa de las Javas. Están también Brays y Anna, Anna Castillo. ¿Te vienes?

- Sep. Cojo un Cabi y voy pallá.

Albalia y la máquina del tiempoWhere stories live. Discover now