•°Inazuma Eleven°•[Paolo Bianchi/Fidio Aldena x Oc]

CAPÍTULO 5:ORFEO EN PROBLEMAS

Pov Anissa

Jadee agotada, apoyándome en mis rodillas del cansancio que llevaba encima.

Alcé la vista, viendo la pelota de fútbol flotar enfrente de mi. Burlándose en mi cara. Volví a arremeter contra ella, sin embargo al momento de patearla no le atiné, causando que terminase cayendo de culo en el agua.

Me encontraba en la playa entrenando.
Después del día libre, habíamos vuelto a los entrenamientos para ser capaces de enfrentarnos a nuestro próximo rival: Argentina. Sin embargo yo me encontraba entrenando una super técnica por mi propia cuenta.

Tachimukai me había inspirado a evolucionar, y había tenido inspiraciones en aquel baile flamenco que vi en el área de España. Pero para mi entrenamiento necesitaba un cambio de escenario, no podía entrenar en el campo de fútbol de tierra que poseíamos, necesitaba hacerlo en el mar.

—Necesito descansar un poco... —reconocí, ya que llevaba aproximadamente desde las nueve de la mañana allí entrenando.

Salí del agua tomando la pelota, y me dirigí al albergue.
Allí los chicos seguían entrenando como habitualmente lo hacían. Por una parte estaban Tsunami, Kabeyama, Kurimatsu y Kogure, ayudando a Tachimukai a realizar su nueva super técnica, teniendo a una Haruna chillona apoyándoles. Por otra parte, el resto del equipo.

—¿Ya has terminado de entrenar? —me preguntó Aki cuando me vio llegar al banquillo.

—Necesitaba un descanso. —respondí tomando mi botella de agua y bebiendo. —¿Qué tal van?

—Pues...

—¡Menudo paquete! /¡Portero de pacotilla!/ Besugo...

Al parecer a Tachimukai le faltaba sacar toda su fuerza y energía para terminar su super técnica, y para que lo sacase, a Kogure se le había ocurrido la "brillante" idea de insultar a nuestro portero suplente.
A consecuencia de esto, Tachimukai terminó hecho ovillo en el suelo, completamente desanimado.

Miré la otra parte del entrenamiento, viendo a Kidou jugar de manera tan acalorada y furiosa.
Kidou se centraba en tener un juego calculador y analizado, no dejaba ver sus emociones reflejadas en su modo de jugar. O al menos no unos sentimientos tan negativos. Lo peor es que Fudou estaba casi igual, y Sakuma no parecía mucho mejor. Estaban completamente descentrados.

—Que extraño...—murmuré, contrariada llevando mi botella de nuevo a mis labios para seguir bebiendo pero ya no tenía agua. —Voy a rellenar la botella. —avisé, saliendo del campo de entrenamiento.

Fui a rellenar la botella de agua a una piqueta que se encontraba cerca del albergue. Cuando terminé y quise volver al campo, vi a mi hermano pasar corriendo enfrente de mi. No lo dudé ni dos segundos, eché a correr detrás de él.

—Mamoru, ¿qué ocurre? —pregunté cuando llegué a su lado.

—Kidou me tiene preocupado. —me respondió. —El entrenador Kudou los ha sacado del entrenamiento. Eh visto que venía aquí con Sakuma, así que quiero saber que ocurre.

Asentí con la cabeza, corriendo más rápido aún.
Salimos del albergue y nos internamos en nuestra área. Finalmente, tras bastante correr, vimos a nuestros dos compañeros del Inazuma Japón subirse a un autobús. Las puertas iban a cerrarse, así que Mamoru y yo nos apuramos, subiéndonos en el bus a último segundo antes de que las puertas se cerrasen y el vehículo arrancase.

Desde el interior, Sakuma y Kidou nos miraron sorprendidos por nuestra intrusión. No solamente ellos, al parecer Fudou ya estaba antes en el bus, así que los cinco nos topamos en el lugar.

—Endou...Anissa...

—Chicos, —llamó mi hermano mientras yo tomaba asiento para poder recuperar mejor el aliento. —¿qué está pasando?