•°Inazuma Eleven°•[Paolo Bianchi/Fidio Aldena x Oc]

CAPÍTULO 27:THE LITTLE GIGANTS

Pov Anissa

Nos tocaba a nosotros sacar con un pase corto de centro entre Someoka y Gouenji. Cuando volvió a sonar el pitido, ambos salieron disparados hacia el campo rival. De inmediato el delantero que había marcado gol, aquel chico que se parecía mucho a Someoka de hecho, se posicionó a su lado en un intento de robarle el esférico.

Viendo como peligraba, Someoka se distanció un poco y dio un pase.
—¡Hiroto tuya!

El pelirrojo lo recibió sin ningún problema y empezó a subir. Luego le pasó el balón a Kazemaru y este siguió con la carrera. Y, al final, el balón volvió a Someoka.

Se encontraba en la línea de tiro, así que al estar frente allí realizó su súper técnica.
—¡Ruge con fuerza: mega dragón!—exclamó chutando a portería.

—¡God Hand X!

Rococo manifestó su mano y paró el tiro, sonriendo orgulloso.
Cuando chutó la pelota para reanudar el partido, Kazemaru se interpuso entre el pase y robó el esférico. Un jugador africano corrió hacia él, pero logró desmarcarse con su Danza del Dios del Viento

—¡Hiroto!

El pelirrojo logró recibir el pase de manera perfecta, y se encaminó a la línea de tiro.
—¡Ryuusei blade!—exclamó chutando

—¡God Hand X!

Sin embargo fue el mismo resultado, Rococo logró parar el tiro.

—¿Qué acaso no se cansa o qué?—murmuré frunciendo el ceño viendo como se lo pasaba a uno de sus compañeros.

Rococo había conseguido parar todos nuestros intentos de marcar gol como si nada.
Empecé a inquietarme.

Cuando The Little Gigants empezó a avanzar hacia nuestro campo, Tobitaka robo el balón con su Shikuma y le hizo un pase a Sakuma, el cual dribleó a algunos jugadores contrarios y luego se lo pasó a nuestro delantero estrella.

—¡Gouenji!

El de cabellos parados hacia arriba se preparó para chutar.
—¡Torbellino de fuego!

Pero Rococo no se inmutó, poniendo sus fuerzas en parar el tiro.
—¡God Hand X!

Ay wey yaaa, dejanos marcar. Lloriqueé, molesta por como se estaba desarrollando el partido.
Miré suplicante al entrenador, pidiéndole que me dejase entrar, pero él solo negó con la cabeza. Aún no era el momento de que saliera al campo.

—¡Vamos!—les pasó el balón a sus compañeros.

Reanudando el partido los africanos atacaron, en esta ocasión nosotros no teníamos la ventaja de ataque. Algo que, teniendo en cuenta que Mamoru aún no había completado la God Catch, me preocupaba bastante. Rápidamente se adentraron en nuestro campo con intención de chutar de nuevo.

El delantero estrella del Congo se paró frente a la portería.
—¡Doble Jaw!—chilló

—¡God Catch!—exclamó.

Por suerte logró evitar el gol. No lo paró, simplemente desvió la trayectoria. Y debido a esto terminó impactando en uno de los lados de la portería.
Miré fijamente a mi mellizo, preocupada. Y él, sintiendo mi mirada, simplemente alzó el pulgar, dándome la señal de que se encontraba bien. Viendo aquel gesto, solté un ligero suspiro de alivio.

Debido al desvío del tiro que había sido fuera, era el turno de The Little Gigants de hacer un saque de banda. Al chutar el balón, este terminó entre dos de sus compañeros, el que tenían gran parecido entre Shouji del Raimon y Gouenji. Juntos realizaron una super técnica.