[LIBRO V]
▸Se ve a la Luna elevarse. Hay problemas en el camino; terremotos y relámpagos azotan estos tiempos
Un consejo amigable: no salgas ésta noche. Los lobos merodean la ciudad.
Con la Luna en lo alto, un amigo te traicionará. El enemigo tocar...
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Había sido una noche dura, como cabía de esperarse. La manada se había sumido en un silencio sepulcral donde todos evitaban mirarse los unos a los otros, por temor a no saber que decir. Luego de la ceremonia de cremación, Mary se había encerrado dentro de su cabaña, negándose a salir o a recibir a nadie dentro de ella; la única afortunada que pudo estar con ella fue Hayley.
― Tus hermanos tienen a Hope. ― Klaus se sentó alrededor de la fogata, aun con su teléfono en mano. Ya era bastante tarde y casi todos se habían retirado para descansar, sólo unos pocos quedan aun despiertos, congregados a la orilla del pantano. ― Les dije que lo más seguro para ella era que estuviera fuera de la ciudad, al menos por unos días. ― se habían desecho de Tristán pero aun quedaban dos partes más que derrotar antes de poder cantar victoria.
― Aurora se pondrá furiosa tan pronto se entere. ― Thalía se froto los brazos con las manos, buscando darse calor.
― Otro logro que podemos agregar a nuestra lista; aunque creo que hemos sido benevolentes. Tristán merecía morir, no ahogarse eternamente. ― aun masticaba con rabia todo lo ocurrido, y sentía impotencia de no poder darle, por una vez, buenas noticias a la manada.
― Pasará el resto de su inmortalidad sufriendo, creo que es suficiente para él. ― Klaus sonrió de lado, mientras sujetaba la mano donde su prometida tenía el anillo. ― Lo que me gustaría saber es que haremos con Aurora; ella si representa un peligro para nosotros. ―
Klaus se arrimó un poco más a ella, permitiéndole descansar su cabeza contra su hombro, al tiempo que él recostaba el lateral de su rostro contra la rubia cabellera color miel. Thalía se había pegado a él toda la noche, y él le había brindado contención luego de la despedida de Jackson. Se había mantenido en silencio junto a ella, sujetando su mano con firmeza mientras sentía las hostiles miradas de todo el clan Labonair contra su nuca; no podía culparlos, en su nombre se había realizado atroces actos contra ellos en más de una ocasión. Aunque había quedado en claro que en aquella ocasión, él venia en son de paz buscando presentar sus respetos ante la muerte de Jackson.
― Yo me encargaré de Aurora. ― dijo, besando la frente de Thalía, mientras ella cerraba los ojos.
Después de todo, era su responsabilidad hacerlo. Aurora había dañado al único mortal que él había llegado a apreciar y que ahora deseaba mantenerse lejos de él. Aunque para esos momentos, Camille probablemente estuviese en las ultimas instancias de su proceso, casi rozando la muerte, si es que no había ocurrido ya.
De solo pensarlo, se le ponía la piel de gallina.
― ¿Lo dices enserio? ― Thalía separó su cabeza de su lado y lo miró a los ojos. En sus orbes enrojecidas de tanto llorar, Klaus pudo ver la duda. Ella dudaba de que él fuese capaz de deshacerse de Aurora, así como había sido incapaz de hacer lo mismo con Genevieve. Y no podía culparla. Una parte de sí no quería tocar ni un solo cabello de Aurora, mientras que la otra, la más primitiva, deseaba descargar toda su rabia sobre ella. Era una batalla pareja.
