LOS HERMANOS ¨MIN¨ (YoonMin)

Capitulo 13

YoonHi y Jimin finalmente habían llegado a la casa de los Min, notando de inmediato la ausencia del resto de los cuatrillizos. Ambos entraron al lugar y el peligris se preguntaba si Suga realmente había asistido al colegio con los otros,  después de lo que paso anoche en la fiesta.

Jimin salio de sus pensamiento cuando el menor se acerco abrazándolo por la espalda —¿Quieres desayunar?— el peligris le sonrió asintiendo.

 YoonHi entrelazo sus manos para dirigirse ambos a la cocina —Bien, te preparare algo rico— dijo tomando a Jimin de la cintura para sentarlo sobre un mesón, mientra el se ocupaba del desayuno.

Jimin observaba como el chico se ponía en acción —¿No quieres que te ayude?— pregunto.

El  rubio  le sonrió negando con la cabeza —Solo observarme, te preparare un rico desayuno— el mayor solo asintió,  mirando como el chico se movía de un lado a otro.

Luego de algunos minutos YoonHi bajo a Jimin de aquel lugar para que se sentara en uno de los asientos que había en la barra. Y a Jimin casi se le cae la baba cuando un delicioso plato humeante fue colocado frente a él. 

¡Mierda! Cocina mejor que yo... Lo haré que me cocine siempre que venga aquí.

Jimin estaba sorprendido ante el talento culinario del menor, el plato se veía tan exquisito, que el mayor hacia un esfuerzo sobre humano para devorarlo inmediatamente.

 YoonHi de verdad que era bueno en la cocina, a diferente de Suga, quien una vez le entrego unas galletas todas quemadas, y Jimin sintiendo empatia por el fuerzo del pelimenta, se arriesgo aprobarla, pero al darle un mordisco a una, sus dientes quedaron todos machando de negro... Aunque la buena intención es lo que cuenta ¿No?.

—¡Woo! se ve delicioso— YoonHi sonrió algo sonrojado y Jimin tomo una porción para empezar a comer —Hmm, Dios, esto esta divino— expreso saboreándose los labios.

El rubio agrando su sonrisa sintiéndose orgulloso, al ver la cara maravillado de su hyung, y es que de verdad, Jimin estaba tan maravillado, no había comido algo tan rico desde que la ultima vez en que su madre cocino para él.

 —Realmente, eres muy bueno cocinando, YoonHi, te felicito— dijo levantando su pulgar, mientras metía otro bocado en su boca —¿Donde aprendiste a cocinar así?— le pregunto curioso.

La sonrisa de YoonHi se tenso ante la pregunta y a su mente llego recuerdos en donde un Seokjin algo estresado le enseñaba y le explicaba, una y otra vez,  como debía preparar y sazonar los alimentos. 

El rubio soltó una risa con algo de amargura —A-aprendí viendo vídeos por Internet—Mintió, sentándose al lado de su hyung, para también comer.

Ambos chicos continuaron comiendo entre algunas platicas triviales y una que otras miradas coquetas por parte de YoonHi, provocaban un tierno sonrojo en las mejillas de Jimin. Luego de algunos minutos, YoonHi  le ayudaba a su hyung a lavar los platos, sin siquiera quitar esa brillante y gran sonrisa en su rostro, y no era para menos, ya que YoonHi disfrutaba pasar tiempo con Jimin, él de verdad estaba agradecido que el mayor aceptara venir a su casa cuando debería de estar en la escuela. 

Y es que YoonHi, a veces le costaba admitir que en muchas ocasiones se ponía algo triste por la contaste ausencia de sus padres, ademas de la falta de calor hogareño en esa gran casa. Pero, esa tristeza abandono su corazón desde que Jimin puso un pie en ella, transmitiendo una sensación de calidez con tan solo su presencia, todo era diferente desde que él llego a sus vidas y eso le hacia sentir a gusto, como si hubiese encontrado la paz que desde un año había perdido.

Y sintiendo todas esa emociones que Jimin le producía. YoonHi lo abrazo por detrás, hundiendo su rostro en el cuello de su hyung —Me encanta estar a tu lado— confeso sobre su piel, oliendo el dulce aroma de su persona favorita —H-hyung... Q-quiero que seas mi novio—.