Capítulo 57

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Gabrielle Patterson.
28 de Septiembre, Miércoles. 21.30
°
Me apoyo en la pared del baño cerrando los ojos, el vapor de agua me da un calor agradable pero en mi cuerpo nada es agradable.
Sé que esa mujer va a hacernos la vida imposible, sé que jamás nos dejará ser felices y tengo miedo, él no debe pasar por esto, no tiene culpa. La pequeña sufre las consecuencias de esa mujer que tiene por madre, y yo, yo estoy en el centro causando todo el problema, liando la vida del hombre y la bebe que amo con toda mi alma.
Mis mejillas empapadas hacen que me sea imposible ocultar el llanto, me alejo de la pared aún despaldas a la puerta, sollozo aturdida y siento sus brazos sobre mi espalda rozandome suavemente.
~
-Mi vida, ven aqui. -me gira.
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Me pega a su pecho, sollozo hundida en él y me pega a la pared.
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-Cariño, tranquila ¿qué ocurre? -murmura.
-Estoy liando tu vida, soy una persona horrible, joder. -lloro.
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Él me pega a su pecho nuevamente, niega rotundamente y besa mis labios.
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-Eres el alma más pura que jamás he visto en la vida. -dice susurrando.
-Te juro que os amo, a la bebé y a ti, te lo juro pero os estoy creando problemas. -sollozo.
-Si me meto en estos problemas es porque yo quiero, puedo y te amo, porque te amo, te iba a amar igualmente esté con esa señora, esté soltero o fuera tu novio, te iba a amar igualmente -me agarra las manos.
-¿Y la bebé? Llama mamá a alguien que no es su madre. -digo nerviosa.
-¿Y? Ella te ama como su madre y la amas como tu hija ¿qué mas necesita? Madre es la persona que cría, no quien da a luz. -asegura.
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Lo beso, sus labios tienen la cura a cualquier dificiltad, mal o dolor y él sabe todo lo que ese par de tiras carnosas, rosas y gruesas me causan con tan solo un roce.
Muerde mi labio, el beso cobra potencia al introducir la lengua y coloca mis manos sobre la cabeza con pasión.
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-La bebé está allí jugando, uno aqui, rápido, ella no se entera de nada. -me guiña un ojo.
-Cariño, no. -muerdo mi labio una vez siento su lengua en cuello.
-Deja que te derrita, te puedo masturbar y sabes tan bien como yo que con rozarte te corres. -murmura.
-Mmmm... No seas creido cariño. -susurro excitada.
-¿Algo más o puedo follarte? -pregunta sonriendo.
-Follame. -susurro.

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