Capítulo 22

35 2 0
                                    

Los chicos se alejaron de los escaparates y se escondieron como pudieron. El dueño de la tienda no entendía que demonios pasaba, así que Ethan optó por devolverle la guitarra y después Arya le pidió que se escondise en la trastienda un rato.

–¿Qué hacen aquí?– Dijo Ethan sin salir de su escondite.

–¿Pues que crees? Buscarte.

–No, no.– Dijo Vera.– Si estuvieran aquí por Ethan, ya habrían entrado con toda la artillería pesada.

–¿Entonces que hacen en Fresno?

–¡Yo propongo descubrir!– Dijo Yurgen saliendo de la tienda.

–¡Espera! ¡Yurgen!

Los chicos salieron detrás de Yurgen para intentar detenerle, pero él había encontrado una de las furgonetas y se había propuesto a seguirla. Ethan se dio cuenta de que todo el mundo se había puesto nervioso. Nadie había tratado con ellos en realidad, así que Ethan estaba muy preocupado por lo que pudieran hacerles por su culpa.

Las furgonetas les llevaron hasta el hospital de Fresno. Vera se quedó bastante confusa al verles allí, así que ella fue la primera en acercarse al hospital. Examinó las tres furgonetas que había allí aparcadas y vio que todas estaban vacías.

–No sé qué está pasando.– Anunció.– Pero quieren algo del hospital.

–Yo propongo entrar y coger lo que buscan antes que ellos.– Dijo Mika, pero Terence le detuvo.

–No puedes entrar ahí sola.

–¿Por qué no?

–Porque si te pasa algo... si te mueres, literalmente me volveré loco.

–¿Pero por qué se va a morir, agonías?– Dijo Arya.

–Es verdad.

–En ese caso, vete buscando un buen psiquiatra.

Mika salió corriendo hacia las puertas del hospital. Terence fue el primero en seguirla y detrás de él fue el resto. Recorrieron casi todas las plantas del hospital buscando a quien fuera que había salido de las furgonetas e intentando encontrar lo que sea que buscaran.

Al cabo de un rato, Ethan se puso a pensar. ¿Qué demonios podría estar buscando en un hospital de Fresno una gente que intentaba conseguir elevar la capacidad cerebral de alguien?

–Hay que buscar en los laboratorios.– Dijo al rato.

–¿Por qué?

–Porque no creo que estén buscando una solución para un dolor de tripa.

Los chicos echaron mano de la capacidad de Arya para convencer a los medicos de que les dejaran pasar hasta los laboratorios y después se pusieron a buscar. Eran mucho más grandes de lo que se esperaban de un hospital de Fresno, lleno de pruebas experimentales y experimentos que no querían conocer.

–Apuesto a que es eso.– Dijo Mika señalando a una especie de nevera transparente llena de viales.

–¿Qué son?

–Según esto, células madre mezcladas con algo que no se pronunciar.– Dijo Terence leyendo unos informes que había justo al lado.

–Vale, pues nos los llevamos o los destruimos o lo que sea.– Dijo Daniel intentando abrirlo, pero no encontraban la cerradura.– Esto no se abre.

–¿No cerradura? Sin Cerradura Yurgen no poder abrir.

–Es metacrilato y acero.– Observó Vera y miró a Ethan.– Tu puedes abrirla.

100%Where stories live. Discover now