Capítulo 14

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Desperté con un una sed tremenda, mi boca parecía desierto y mi garganta ardía, vi hacia donde estaba Shia pero no se encontraba, probablemente mamá o papá le abrieron la puerta para que saliera.

Me quedé tumbada otro rato mientras recordaba la noche anterior, diablos, Rodrigo besaba divinamente, sonreí, tal vez. Fui a darme un buen baño, abrí la llave de la tina, Sip, tengo una tina, y dejé que se llenara poniéndole sales y aceites aromáticos, cuando estuvo lista me desnudé y me metí disfrutando de los ricos aromas.

La puerta de mi cuarto se abrió y la cantarina voz de mi madre resonó en el cuarto

- Eli, ¿dónde estás?

- ¡aquí! – los tacones resonaron y mi madre abrió la puerta y entró, estaba perfectamente arreglada, entonces entendí, puse una mueca

- Si, lo sé pero es urgente cariño, el fin de semana familiar se tendrá que posponer – me dijo con algo de pena y tocando mi mejilla

- ¿tampoco papá se va a quedar? - mi mamá negó

- No, él tiene que asistir a unas juntas – hice un puchero - créeme nena hicimos todo lo posible por posponer estas cosas pero no pudimos, requieren nuestra presencia – asentí, y un pensamiento se me vino a la mente, loco pero…

- Mamá, ¿alguna vez papá te ha sido infiel? – esa se quedó algo sorprendida por la pregunta y después sonrió bajando la mirada, me quedé helada y estaba segura que palidecí al menos un tono – ¿eso es un, Si?

- ¿Qué? –vio mi cara - ¡no, no, no! – negó rápidamente y yo suspiré de alivio

- Pero, ¿Cómo sabes qué no? – me sonrió algo arrogante

- Aparte de que nunca va a encontrar una mujer como yo – se hizo a un lado su cabello dorado – ustedes estarían conmigo en Francia – la mirada de mi madre se hizo algo oscura – la verdad siempre sale a la luz y curiosamente a las mujeres de nuestra familia no nos hace falta investigar, esta llega solita a nuestras manos en el momento indicado, no voy a negar que si sería un golpe bastante fuerte y si estaría afectada pero eso solo me demuestra que él era el hombre equivocado, tal vez haría una que otra jugarreta en su contra pero nada grave – sonrió, ya vi de donde saqué mi lado malo. Cuando tu hermanos nacieron – se le formó una sonrisa melancólica pero feliz – tu padre se quedó en shock, y cuando lo asimiló… nunca había visto a un hombre más feliz. éramos jóvenes, sí, pero estábamos perdidamente enamorados el uno del otro.

<Nos conocimos estando en el instituto – rio un poco – nuestra historia fue de lo más cliché que te puedas imaginar. Yo era una chica bastante nerd, siempre con el cabello agarrado en una coleta, lentes de pasta gruesa y falda por debajo de la rodilla, tus abuelos eran bastante estrictos en el tema de vestimenta.

Yo estaba en segundo año y el en último, me mantenía alejada de él, no quería su atención y claro que no la iba a obtener, pero aun así babeaba por él, Lily – la tristeza se asentó en el semblante de mi madre – era la única que sabía de mi enamoramiento hacia Dominik y cada vez que lo veía hacía hasta lo imposible para que yo me le acercara, siempre me decía que me aventara, que era más hermosa que las chicas que el frecuentaba, yo lo sabía, siempre estuve al tanto de que tenía belleza pero hacía lo posible por ocultarla para que él no se diera cuenta de mí, sabía que me iba a romper el corazón.

Un día tuve una discusión con mis padres en la mañana y eso me tuvo de mal humor todo el día que no organicé bien mis cosas y se me olvidó por completo meter a mi mochila el uniforme de gimnasia, lo peor era que justo ese día teníamos el examen; una serie de circuitos  que teníamos que completar en el menor tiempo posible, estaba estresada, por suerte Lily me salvó, ella siempre tenía otra muda en su locker, si antes quería a mi amiga en ese momento la adoraba, pero había un pequeño detallito, y es que a diferencia de mi Lily usaba la talla correcta del uniforme, y ella no usaba el pants ella usaba el short lo que significaba que la blusa y el short eran ajustados resaltando un poco los atributos, pero era eso o reprobar el examen y la palabra REPROBAR solo hacía que se me vinieran a la mente tus abuelos extremadamente enojados, así que me tuve que aguantar.

Cuando estaba en la cancha todos comenzaron a verme, algo sorprendidos, se había acostumbrado a verme en un uniforme dos tallas más grande, así que cuando todos vieron que detrás de todo eso escondía un cuerpo estilizado y equilibrado, gracias al ballet, se quedaron sin habla.
A media clase los chicos del equipo de rugby salió junto con las porristas, en ese tiempo tu padre “salía” (se cogía) a la capitana de porristas; Natasha Volcova. La típica pareja capitán y capitana. Vi como ambos se daban un beso y eso fue con un golpe, así que me escondí detrás de mis compañeros para cubrirme, Lily siempre a mi lado me pasó un brazo sobre los hombros y me animó.

La profesora dio un silbatazo y dijo mi apellido, estaba muriendo de nervios tanto que me quedé parada en mi lugar, mi mejor amigo tuvo que darme un empujón para que pasara y me colocara a la línea de salida. Tomé posición y cuando sonó el silbatazo salí corriendo a velocidad, gracia s que practicaba ballet tenía bastante resistencia y facilidad para los obstáculos y cuando llegué al final todos estaban bastante callados tanto que me asusté, giré y tenía la vista de cada uno de los alumnos que estaban en el campo, tanto los de mi clase, como las porristas y peor aún los del equipo de rugby que a cada paso que daba podía sentir sus miradas recorriéndome, por inercia busqué el rostro de tu padre y cuando lo vi me quedé quieta, sus ojos azules me quitaron el aliento él sonrió porque se dio cuenta del efecto en mí, supongo que Natasha se dio cuenta porque hizo que uno de los chicos del equipo de rugby se distrajera y diera un mal lanzamiento. Escuché como me gritaba ¡cuidado! pero ni con mis reflejos pude esquivar el balón que venía hacía mí, me dio justo en la nariz. El dolor fue horrible y cuando vi la sangre no sabía qué hacer, sentí una mano en mi hombro y al voltear vi que era Dominik no podía enfocarlo bien porque estaba a punto de desmayarme, lo único que recuerdo es que dije su nombre, le di una sonrisa y me desmayé

Desperté en la sala de enfermería con un terrible dolor de cabeza y la encargada me explicó que había pasado, con toda la vergüenza en mi cuerpo, salí de la sala y me fui a cambiar para después irme a casa, me habían dado permiso de retirarme temprano.

Al día siguiente todos hablaban de mí, varios chicos comenzaron a hablarme pidiéndome que saliera con ellos y eso me ponía nerviosa tanto que usaba a Lily de escudo. Al final del día sentí un piquetito en mi hombro y me volteé, le dije que no quería salir con él y el solo me sonrió, cuando me di cuenta de quién era me quería morir.

No se la dejé tan fácil, pero tu padre poco a poco fue derrumbando muros quedándome expuesta donde él cometió errores que varias veces me rompieron el corazón, la última fue cuando el día que me juró amor, en al día siguiente lo encontré en un sillón de la casa de uno de sus amigos con Natasha, ambos desnudos, no quería verlo no quería nada de él, me rogó por días e hizo hasta lo imposible para recuperarme. Hasta casi dos semanas antes de que él se fuera y yo pasara a último año me llegó un video.

Él estaba en una fiesta con sus amigos y se podía ver perfectamente como una chica de las porristas ponía algo en su botella de cerveza, Natasha aprovechó ella se fue quitando la ropa aventándola por toda la sala y cuando estuvo desnuda comenzó a quitarle la ropa a Dominik hizo uno cuantos movimientos pero al parecer la droga le hizo mucho efecto que dejó a tu padre totalmente dormido, así que Natasha solo se acostó con él y puso una manta sobre ellos.

Cuando acabó el video fui con tu padre y lo besé, le dije todo y le pedí perdón por haber desconfiado de él y que jamás ocurriría, que le entregaba mi corazón pero que por favor ya no lo lastimara y así fue, el día en que se fue a la universidad estaba bastante triste pero debía tener confianza y seguir adelante. Me gradué y me fui a la universidad con él, vivíamos juntos y medio año después ya estaba embarazada>

- Él te hizo sufrir – mi madre asintió – vaya…

- Ambos sufrimos y a veces el sufrimiento te hace unirte más con la persona que amas, eso nos pasó y gracias a eso formamos un vínculo fuerte que al nacer ustedes solo lo reforzó

- Wow… si, tu historia fue de los más cliché – mi madre rio y vio su reloj, sus ojos se agrandaron

- Mon dieu, c'est trop tard (dios mío ya es muy tarde) – se levantó y me dio un beso en la frente, iba saliendo cuando vio mi ropa - Elizabeth, ¿combien de fois je t'ai dit de ne pas laisser tes vêtements traîner? (Elizabeth ¿cuantas veces te he dicho que no dejes tu ropa tirada?) – reí y me vio mal

- Désolé, désolé, dans un instant je le récupère (perdón, perdón, en un momento la recojo) – ella rodó los ojos y salió

Bajé y el aroma a comida me hizo agua la boca, era medio día y el estómago me rugía con fuerza así que bajé rápido y en la mesa ya estaban mis hermanos con mi padre, mamá ya se había ido

- Buenos días… tardes – en cuanto llegué a mi silla Ana puso mi plato de comida, puré de papás con carne en alguna salsa y delicioso espagueti blanco – gracias Ana

- De nada mi niña – tomé la jarra de agua y me serví en el vaso me lo tomé de un solo tirón

- ¿sedienta? – dijo mi padre

- Bastante, ¿Qué no tenías unas juntas en la empresa? – dije dándole el primer bocado a mi comida, dios que delicia

- Si, solo estaba esperándote para despedirme, tanto tu madre y yo vamos a salir, me temo que llegaremos el domingo en la tarde, lo sentimos mucho, el próximo fin de semana les prometemos que estaremos libres – dijo doblando su periódico, parándose y despidiéndose de cada uno de nosotros

- Y bien, ¿Qué vamos a hacer? – pregunté a mis hermanos, ellos sonrieron

- Muchas cosas

No hicimos nada, lo único productivo que hice fue ir a clase de gimnasia, por la tarde donde estuve platicando con Sarah, la chica era tierna y sociable, definitivamente era perfecta para Will.

Me perdí en mis pensamientos mientras hacía mi rutina con listón cuando escuché la voz fuerte de miss Leticia

- Debes girar, mantenerte, no es tan dificil - vi como Sarah trataba de hacer una vuelta sobre su punta pero no resistía mucho, su cara comenzó a ponerse seria y frustrada, la vi y noté que su postura estaba algo mal, me paré yendo directo hacia ella

- Lo estás haciendo mal – me acerque y le dije al oído, ella saltó como conejo dejándome sorprendida y sus mejillas se pusieron rojas

- Lo siento, es que… es que me asustaste – reí un poco

- Si, ya me di cuenta – suspiró

- No sé que estoy haciendo mal, es una maldita vuelta – sonreí, se veía graciosa maldiciendo

- No estas apretando bien tus músculos de las piernas, solo los brazos, recuerda, tienes que estar tensa y parecer delicada – ella se me quedó viendo raro

- ¿Cuándo dijo eso miss Leticia? – me le quedé viendo

- Ah… - me había equivocado – lo siento, me equivoqué, no fue miss Leticia, fue mi antigua maestra de ballet – ella se quedó algo sorprendida y curiosa – luego te cuento por ahora hay que practicar esa vuelta.

Le enseñé todo, hasta que pudo hacerla con perfección, Sarah no tenía la gracia de una bailarina como yo, ¡pero por el santo diablo!, era increíble en gimnasia, mis Leticia llegó y Sarah le mostró el ejercicio, ella la felicitó y a mí me dio las gracias por haber ayudado. Estábamos lo suficientemente mareadas como para caminar, así que nos sentamos

- ¿estuviste en ballet? – asentí - ¿y por qué acabaste aquí? – suspiré, nos recargamos en la pared y yo puse mi cabeza en su hombro, me dolía un poco

- Bueno como puedes ver mi cuerpo no es delgado – comencé a decirle - en ballet piden los cuerpos delgados, cuándo has visto a una bailarina curvilínea, fue duro dejarlo pero al final tuve que hacerlo, cuando me dijeron que no era apta para ser bailarina

- Eso es injusto

- El ballet tiene su lado oscuro Sarah – la miré – recuerdo que estaba en medio de un ensayo, íbamos a hacer el lago de los cisnes, me escogieron como Odette, así que ya te imaginaras el trabajo que tenía, pero era feliz, era un sueño, yo me imaginaba bailando en las grandes ligas, en ese tiempo teníamos a un instructor – bajé la cabeza – de un momento a otro me interrumpió y me dijo que si lo acompañaba, obediente lo hice y… me violó

Nos leemos en el próximo Cap 😎✌🏻❤️

Un ángel con cuernos y colaWhere stories live. Discover now