Capítulo 29

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Sarah

Mi mamá había llegado y de tan escandaloso que estaba el asunto no nos habíamos dado cuenta

- ¿Qué haces aquí? Se suponía que tenías junta hasta las siete – me sabía de memoria sus horarios y cada que tenía un evento sorpresa ella me avisaba, pero esta vez al parecer se le olvidó

- Lo siento mucho, mielecita – la vi por encima del hombro de Will, el pobre estaba petrificado – fue de rápido, se me olvidaron unos papeles aquí y ayer se me olvidó cargar mi teléfono, así que no me duró todo el día y no pude avisarte – se pasó rápido tomó unos papeles de la encimera y comenzó a irse – por cierto, soy Trina, la mamá de Sarah

- William, un... eh... gusto – Will estaba extremadamente rojo, pero aun con la vergüenza no se le bajaba

- Muy bien, velo de este modo, mielecita, ya te la cobraste de aquella vez y... - vi como miraba hacia abajo – que bueno que estés usando condón, recuerda que soy muy joven para ser abuela – con eso, sus tacones sonaron mas rápido hasta que se escuchó la puerta cerrarse y el auto arrancar

- ¿Mielecita? – me dijo con burla

- Síguete moviendo – retomamos el ritmo y acabamos perfectamente, como si no nos hubieran interrumpido

Estaba en el baño de mi habitación acomodándome el cabello y abriéndome un poco la camisa para refrescarme, me puse de nuevo mis bragas aunque tenía la sensación de que pronto iban a estar tiradas en suelo, sonreí

- Entonces mielecita... ¿me explicas?, cualquier otro padre de familia nos habría echado la bronca hasta que nos sangraran los oídos – se sentó en mi cama

- Pues... después de las infidelidades de mi padre, mi madre se cansó así que pidió el divorcio, ganó mi patria potestad y gran parte de los bienes junto con una buena suma de dinero, ella sigue trabajando, pero como toda buena divorciada que se mantiene en forma y tiene mejor cuerpo que una chica de dieciocho años, le siguen lloviendo los hombres de todas las edades, ella los trae a la casa pero siempre me avisa para que yo no esté aquí, se vuelve muy ruidoso, solo una vez me tocó estar aquí cuando ella tenía sexo, cuando acabaron y el tipo se fue le reclamé a mi mamá, así conocí Paris, su modo de disculpa

- Ok... dijo que te la habías cobrado – mamá y su gran boca

- Bueno... una vez a mamá se le olvidó decirme que iba a venir un tipo – Toby, el perfecto Toby – así que pasó lo mismo que acaba de pasar, yo entre y estaban follando en el sillón escandalosamente, le grité y Toby salió disparado, fue mi primera vez viendo un pene – poco después, sentirlo – mamá se levantó algo atolondrada y solo me dijo "Sé que algún día te la vas a cobrar, mielecita te presento a Toby; Toby te presento a mi hija, Sarah". Ya te imaginarás mi cara y la de Toby. De inmediato salí de la casa y me quedé en la banqueta unas dos horas – vi a will y estaba rojo de estar aguantando la risa – cuando el salió, vino y se disculpó, él ha sido el más chico de todos los ligues de mamá, con veintiún años, ahorita veintidós – dejé salir el aire, de acordarme se me ponen los pelos de punta

- Hay algo más ahí – se acercó

- Bueno, como bien viste no soy virgen...

- Ajá, pero sigues estando estrecha – le di un golpe en el brazo, él tomó mi mano y le dio un beso

- Perdí la virginidad con Toby, nos empezamos a llevar muy bien, él me apoyó cuando mi novio me puso el cuerno con mi amiga y pues... una cosa llevó a la otra y terminamos en mi cuarto, fue cuidadoso y muy bueno, no me dolió ni nada, después de eso nos vimos unas cuantas veces más, siempre acabando follando

Un ángel con cuernos y colaWhere stories live. Discover now