Capítulo 33

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Me besó y abrió mis piernas con su rodilla poniéndola justo entre mis piernas y frotándola, fue inevitable y comencé a mecer mis caderas para obtener más placer. Soltaba gemidos y jadeos, sus manos se metieron debajo de mi blusa y acaricio mi costado

- Que piel tan suave tienes – dijo a mi oído mientras de daba un tironcito a mi lóbulo para después pasar la punta de su lengua

- Morgan – su nombre se deshizo en mi boca

Sacó mi blusa y me quedé en sostén, su mano dejó libres a las mías para acariciar cada parte sumando sus labios dándome pequeñas mordidas o suaves lengüetadas que me erizaban la piel

- No suelo hacer esto la primera vez que me follo a un chica – me dijo mientras jugueteaba con su mano sobre mis pechos, le mordí el labio, fuerte.

Comenzó a quitarme la falda hasta que quedó en el suelo y cuando estuve solo en ropa interior se quedó viéndome

- Linda lencería – me miró y sus ojos estaban casi negros le sonreí y lo acerqué a mi quitándole por completo la camisa y desabrochando sus janes

- Puedes continuar – me sonrió y comenzó a trazar un camino de mis labios a mi cuello, después hacia mis hombros, mis pechos, abdomen, hasta llegar a mi centro donde comenzó a acariciar en círculos sobre el manojo de nervios

Sus dedos se movían espectacularmente y yo sentía como la humedad crecía más y más

- Que húmeda – me dijo, afirmando lo que estaba pensando. Acercó su boca y comenzó a lamer sobre la tela, la desesperación de sentirlo sin nada de por medio. Tomo una de mis pernas y la puso sobre su hombro para que pudiera tener más acceso a mi intimidad

Por fin hizo a un lado a un lado el encaje de mis bragas y sus dedos empezaron a masajear toda esa zona formando más humedad y expandiéndola desde mi clítoris hasta mi entrada. Soltaba gemidos y jadeos, mientras mis caderas se movían al ritmo de sus dedos y de su lengua

- Oh dios – le tomé el cabello con las manos – sigue – Morgan aumento la velocidad del asalto haciendo que un bucle de placer me recorriera el cuerpo listo para explotar. Segundos más tarde los gemidos de mi orgasmo se fueron haciendo ligeros jadeos

Él se levantó con una sonrisa en su rostro y lo atraje a mí para besarlo, sus manos se fueron al broche de mi sostén para quitarlo y los comenzó a acariciar, por mi parte bajé sus jeans y lo comencé a tocar por encima de su bóxer para después meter mi mano. Subí y bajé apretándolo ligeramente extendiendo también su lubricante natural, el jadeaba y de acuerdo a la intensidad que lo acariciaba él hacía lo mismo con mis pechos, se me ocurrió que, como el me había dado un fantástico oral, yo le podía devolver el favor, así que estaba a punto de bajarme cuando me detuvo

- Quiero correrme estando entre tus piernas, luego me puedes trabajar – señaló su miembro – con las manos o tú encantadora boca – esas palabras solo me sirvieron para que sintiera más ganas

Nos fuimos besando hasta que llegamos a la cama donde me quitó lo que faltaba de mi ropa interior, tirándola a no sé dónde, estando por fin desnuda el hizo todo un reguero de besos por todo mi cuerpo y cuando estuvo saciado se levantó hasta su pantalón y sacó un paquetito plateado, me vio y se bajó el bóxer, yo me quedé mirando su miembro. Bueno, al menos los rumores eran ciertos. Se puso el condón y regresó conmigo acomodándose entre mis piernas

- ¿lista? – asentí – si te lastimo, me dices – esta vez lo besé

Sostuvo la base de su miembro guiándolo hasta mi entrada y lentamente se fue introduciendo, dolió muy poco debido a que estaba perfectamente lubricada

- Mierda Elizabeth estas muy estrecha – dijo mientras yo me mordía el labio para no soltar gemidos tan fuertes – y se siente jodidamente bien – con eso comenzó a moverse lento para que pudiera acostumbrarme y cuando le indiqué los movimientos se hicieron más rápidos y mis gemidos más altos, poco a poco ese bucle de nuevo comenzó a formarse haciendo enterrara mis uñas en su espalda. El ritmo se volvió perfecto y en poco tiempo llegó el orgasmo, mis paredes se estrecharon alrededor del miembro de Morgan robándole un gruñido para hacer sus movimientos más fuertes y que el también pudiera llegar al orgasmo

Nos quedamos quietos y tratando de recobrar la respiración, eso había sido intenso y perfecto. Él se puso a lado mío

- Te daría otro round pero esa parte cilla debe descansar, no quiero que salgas como venadito recién nacido – reí

- No es venadito recién nacido, se le dice cervatillo – el rodó los ojos y me besó para callarme – por cierto que bueno eres con esa lengua tuya

- Practica – dijo mientras se encogía de hombros. Chequé mi reloj

- Dos horas, increíble – el me guiñó un ojo y salió de la cama quitándose el condón, anudándolo y tirándolo al baño, para después buscar su ropa, todo esto completamente desnudo y claro, yo disfrutando de la vista. Fue hora de levantarme pero por el movimientos brusco un dolorcillo se instaló - ¿estás bien? – levanté una mano para que se quedara dónde estaba

- Estoy bien, ¿me pasas mis bragas? Están por ahí – me las pasó y yo caminé para encontrar mi demás ropa y mis zapatos. Me puse todo y mientras yo ya estaba lista Morgan solo estaba en jeans comiéndome con la mirada – tierra llamando a Morgan, anda ponte la ropa – reí apurándolo

Fui por mi celular y me asuste como el infierno cuando la puerta se abrió fuertemente y se encendieron las luces que faltaban en la habitación iluminándolo todo a la perfección, me giré y vi a will parado viéndonos tratando de deducir lo que estaba pasando

- Se toca ¿sabes? – la ira brilló en los ojos de Will

- ¡WILLIAM! – grité

Nota

Ay estos niños! me encantan, quien es su personaje fav y el que menos les gusta

Dejen sus votitos!!!

Un ángel con cuernos y colaWhere stories live. Discover now