♠•Capítulo 14•♠

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La pasión que llega a existir entre dos personas puede ser efímera, sin embargo esto puede convertirse en un sentimiento muy profundo si se llegan conocer más aspectos del otro de lo que se es necesario en verdad.

—Jimin...ah...—gemía extasiada la latina.

Su cuerpo estaba contra la fría pared del baño ligeramente erguido y sus pechos estaban completamente pegados a esta al igual que sus manos, las cuales buscaban sostenerse para no desfallecer ante tanto placer que se estaba acumulando en su interior con cada estocada que recibía.

Jimin la sostenía firmemente por los glúteos de forma que la pelvis estuviera más apretada, lo que aumentaba claramente la excitación de ambos. Sus labios y dientes mordisqueaban e igualmente succionaban el cuello de la ardiente morena, esto le ayudaba a no gemir tan alto y llamar la atención de los huéspedes de aquel pequeño edificio estudiantil.

En aquel baño se podía escuchar claramente la piel de dos personas chocar con constante rapidez, acompañado de algunos gemidos y palabras obscenas. El agua fría que salia por la regadera recorría sus cuerpos desnudos y ellos sentían aquel liquido caliente, además de estimulante y agradable.

—Me pregunto, ¿Cuántos hombres han querido estar entre tus piernas, guapa? —dijo el joven al aumentar la fuerza de sus penetraciones.

—Park...—aquella pregunta encendió a la castaña y sus uñas rasguñaron instintivamente las paredes del baño.

—Que pena por ellos porque nunca lo podrán hacer...no mientras estés conmigo —posesivamente le susurró cerca del oído para después pasar la lengua por el lóbulo de su oreja.

—Jamás comparto lo mio y tú eres mía, TN TA...

La chica estaba tan cegada por las sensaciones que estaba experimentando que hizo que no comprendiera las palabras del todo, dichas por Jimin hace unos instantes y solo respondiera con gemidos poco audibles.

—ah...si...Park...—jadeó la latina.

—Ni siquiera Jeon podrá tenerte —una sus manos abandonó un voluptuoso glúteo de la castaña, para acariciarle la cintura y bajar por todo su vientre hasta llegar al sensible clítoris de ella y seguidamente pasar sus expertos dedos por este al punto de que le gustó tanto a la chica que abrió más sus piernas para que tuviera más acceso a su mojada zona.

—Jimin...más...más... —le suplicó una latina deseosa de llegar a su orgasmo.

El castaño frenó sus movimientos y antes de que ella pudiera decir algo, él la giró y por inercia ella elevó sus piernas heredándolas en la cintura del hombre candente que estaba en frente suya. Jimin la volvió a penetrar y comenzó un vaivén de caderas que buscaba culminar con este acto tan placentero. Tomó unos de los pechos entre su boca y se aferró a el demostrando lo delicioso que era cada parte del cuerpo de la sexi morena.

Ella por su parte, sumergió los dedos en el sedoso y abundante cabello de Jimin. Sus ojos se fijaron directamente en el rostros de su amante por llamarlo de alguna manera y lo vio saborear sus senos con gran maestría.
Todas las veces anteriores en las que se había acostado con él, no había notado ciertas cosas como algunos lunares o marcas poco visibles en el esculpido cuerpo del chico o las expresiones que formaba su rostro al disfrutar de algo...aquello le agradaba mucho...Jimin le agradaba mucho e inclusive podría decir que ahora le parecía aún más encantador.
Sus manos dejaron de estirar el cabello del joven y pasaron a los hombros de este, en donde acariciaron con suavidad los músculos bien formados que ahí habian, poco a poco descendieron por la espalda de él y finalmente posó sus manos en los firmes glúteos de su amante, a los cuales apretó contra su cuerpo.

El Perfeccionista [Park Jimin]Where stories live. Discover now