Capítulo 13: Cuando los desastres te persiguen...

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Arco dos: idol loto negro.

Nt: -el autor/a haciendo su berrinche.- Si no le dan amor hago la automorición, y juego al muerto como el Hui Ying de nuestra familia QAQ

Comenten, que me llenan de vida, sí que sí, como una plantita. (=◇=) Sin corrección ortográfica.

Hui Ying salió de su casa para ir a la compañía "Flor de cerezos" al tercer día, ya que, la zorra de Jia Li estaba apunto de llegar, y Hui Ying quería darle una cálida bienvenida.

Hui Ying se vistió con unos jeans sencillos, una camisa café, y una sudadera azul. Hui Ying en este mundo no tenía el cabello largo ni corto, y era de un color café oscuro, en el sol se veía castaño, en la sombra, negro, de igual manera que en sus dos vidas pasadas, sus ojos eran negros.

Sophie lo recogió en su casa, y nuevamente, cumplió la función de un chófer personal. Temía que Hui Ying se accidentara si conducía él.

Hui Ying comenzaba a entender lentamente porqué su yo pasado fue tan agraviado, y engañado con facilidad, ¡la gente a su alrededor lo sobreprotegía! Y esas eran una de las pocas cosas que Hui Ying iría notando, y por las que iría entendiendo cómo llegó a tener un destino tan lamentable.

Interiormente, le agradeció a su verdadero padre sus enseñanzas, y el no mantenerle en una cajita de cristal.

El edificio de la compañía era gris, y constaba de siete pisos enteros, sin contar la oficina del presidente bastardo; el edificio podría ser descrito como hogareño por sus pisos de madera, y algunos muebles casuales, Hui Ying al entrar, saludó a todos con una hermosa sonrisa inocente, diciendo enérgicamente, "Buenos días".

Él era el único idol de la compañía que seguía siendo tan dulce y humilde como para saludar a todos sin excepción sonriendo genuinamente, aunque por dentro, Hui Ying sentía una incontrolable ira, la mayoría de esas personas lo señalaron, y le trataron peor que a una rata cuando los rumores se difundieron, ¿ellos pueden ser hipócritas? ¡Él también!

Naturalmente, les pagaría el grato trato tarde o temprano.

Hui Ying subió al séptimo piso en dónde los idols más importantes se reunían ocasionalmente, y ahí, les presentaban a los idols novatos que iban a debutar, y tenían amplio potencial. Aunque les avisaban con anticipación, gran parte de los idols estarían ocupados, o no gastarían su tiempo libre para ver a gente que no tenía importancia a sus ojos.

Ya en la habitación, habían cinco personas, tres mujeres, y dos hombres, apenas una tercera parte de los idols famosos en la compañía.

Hui Ying con trabajo y recordaba vagamente algo de las personas presentes, su yo pasado se enfoncaba en sí mismo, y no le prestaba atención a sus compañeros.

Sus respectivos mánagers estaban sentados en unos sillones largos cerca de ellos, escuchando sus conversaciones, evitando que se metieran en problemas.

—Oh, ¡llegó nuestro rey perfecto! Hui Ying, ¿cómo te fue en tu último concierto?—Hui Ying no era amigo ni enemigo de esas personas, y como estaba de ánimos, le respondió al joven de cabellos rosados y cara de bebé frente a él.

—Genial, el auditorio parecía estar apunto de estallar, ver tanta gente hizo que mi corazón casi se saliera de mi pecho.

—¿No te temblaron las piernas, eh? Hehe, tranquilo, siendo tú, incluso si en dos años no puedes dejar de temblar, está bien, el público ama a los niños lindos. —comentó, entre risas el contrario, usando cierto tono burlón y despectivo, haciendo que Hui Ying frunciera el ceño.

El Sistema De Reencarnación PerpetuaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora