El Sistema De Reencarnación Perpetua

Capítulo 21:Mente y corazón.

NT: VER NOTAS FINALES, SIN CORRECCIÓN ORTOGRÁFICA.—
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Había algo muy peculiar en Hui Ying, y era que cuando se ponía nervioso o se enojaba, enloquecía, y maldecía a los cuatro vientos.

《¡¿XIAO XIAO, ERES IDIOTA O MASTICAS AGUA?! ¡¿CÓMO SE TE OCURRE?! ¡¿SE TE VA A CAER LA PU** LENGUA DE MIER** POR AVISARME QUE ERAN FOTOS COMPROMETEDORAS DE LA PERR* SUCIA SARNOZ* YUGA?! ¡JODER, CASI ME MUERO DEL SUSTO! 》(Nt: La censura :"^)

Los ojos de Hui Ying estaban enrojecidos por el miedo y la ira.

Su hombre era una pipa de vinagre con pies.

En su vida como Yang Min, si alguien se atrevía a mirarlo por más de cinco segundos con ojos no amigables, o lujuriosos, ¡él estaría desenvainando su espada!

Obviamente Hui Ying no le permitiría matar por celos, y por ende escucharía las quejas y llanto de su hombre por varias horas.

Aunque pensaba que era lindo, ¡también le daba miedo de que malentendiera, y pensara que le gustaba ser tratado así! Y no deseaba que Yang Min matara sin una razón de peso mayor, no quería que se ensuciara las manos. El valor de una vida, era tan inmenso que Hui Ying no deseaba que cargara con ello, pese que era imposible por los tiempos en que vivían y por su cargo, pero, entre menos fueran, mejor.

Si a Hui Ying le preguntaran si los celos de su hombre le disgustaban y le parecían enfermos, el diría resueltamente, "¡No!"

Ya que ese hombre ciertamente confiaba en él, y creía firmemente en que Hui Ying nunca lo traicionaría, pero no se sentía feliz cuando se le insinuaban a su esposo, ¿y quién podría estarlo?

Para muchos es algo difícil de entender esta línea de pensamiento, pero Hui Ying lo entendía. Cabe recalcar, que Hui Ying pasaba mucho tiempo platicando con su hombre para explicarle, y enseñarle adecuadamente qué era lo correcto para que llevaran una relación sana y feliz, Yang Min, de hecho, fue muy obediente y cooperativo.

Si Shuo Tai viera esas imágenes en su celular, lo primero que haría sería preguntarle el porqué de esas imágenes, luego lloraría como un animal herido para ser consolado por su Ah Ying, por siguiente se enojaría, y se desquitaría, no con Hui Ying, sino con Akame Yuga, por ensuciar los ojos de su amado.

Por más celoso que fuera el presidente Shuo Tai, siempre lo escucharía antes de decir o hacer algo.

El problema era que, no importa de donde lo mires, ¡justificar el hecho de tener esas fotos era casi imposible!

Si no explicaba nada, ¡quedaría como un infiel, y parecería que Shuo usaba un sombrero verde!

¡Y si decía la verdad, temía quedar expuesto con su hombre! ¿Y si su hombre comenzaba a dudar de sus intenciones de acercarse a él?

Una persona tan viciosa como para crear un plan tan horrible... Además, él estaba sin sus recuerdos, siendo así, ¿quién no dudaría?

Y en dado caso de que dijera la verdad, ¿le creería sobre su reencarnación?

Si no le contaba que había reencarnado, ¡¿cómo podría justificar su crueldad contra Akame Yuga?! Si decía que Jia Li fue enviada por Yuga, el hecho de que Jia Li pagara con su vida por su intento de violación, ¿acaso ya no era suficiente?

Si lo ves desde un punto de vista normal, y no tomas en cuenta que Hui Ying es un renacido, no sólo Akame Yuga sería una loca sanguinaría, él también.

El sistema que presenció la preocupación de su amo, no sabía si debía reír o llorar.

"Si supiera..." Pensó el adorable Xiao Xiao.