CAPITULO 22

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Me desperté a eso de las 9:24am e hice la misma rutina de siempre, fui a tomar una ducha y cuando salí busqué la ropa que usaría en el día, me decidí esta vez por un un pantalón tela jean azul, una blusa color piel con mangas hasta el codo y unas zapatillas color piel al igual que la blusa pero estas tenían unas cuantas perlas decorativas, de maquillaje me hice algo natural, solo sombras marrón claro, blush y un lipgloss y para finalizar en el cabello me hice ondas sueltas. Cuándo ya terminé decidí bajar para para desayunar, bajé las escaleras y me estaba dirigiendo al comedor cuándo pude ver a Damián ingresar por la puerta de la casa tenía la ceja y el labio rotos también tenía los nudillos sangrando y cojeaba.

-Damián ¿Qué te pasó esta vez? -Dije mientras corría hacia donde él para ayudarlo a sentarse.

-Tranquila Alisa estoy bien.

-No estás nada bien ¿Quién te hizo esto? ¿Fueron esos tipos que ustedes piensan?

-No fue... fue Vidal.

-¡Qué! Y ¿Ese no es tu amigo?

-Si pero de nuevo yo comencé la pelea -Bajó la mirada.

-¿Pero por qué?

-¿Puedes creer que perdió los audios que había conseguido para presentar mañana como pruebas? 

-¿Y por eso lo golpeaste?

-Alisa creo que debes saber qué Vidal y yo vivimos peleando y siempre terminamos golpeándonos.

-Entonces no entiendo ¿cómo se hacen llamar amigos?

-Porque aunque casi nunca nos entendamos y discutamos por todo, cuando uno de los dos está en problemas el otro corre a auxiliarlo y lo mismo con Allard, solo que él es más calmado y no llega a los golpes.

-Aunque Allard sea un malcriado que no salude se ve que sabe usar su cerebro no como ustedes dos que uno de estos días van a terminar matándose.

-Alisa ¿Podrías por favor dejar de regañarme y curarme las heridas que ya no soporto el dolor? 

-Tú mismo té las buscas y quieres que yo te esté curando.

-Por favor Alisa no quiero quedarme sin mi cara bonita -Rió.

-Déjame ir a buscar el botiquín -Me encaminé con dirección a la cocina pero luego regresé hacia donde Damián -Y por cierto tu cara no es bonita -Volví a ir hacia la cocina.

-Sé qué me mientes -Lo escuché decir.

Al ingresar a la cocina en donde todas las chicas estaba preparando ya el almuerzo porque el desayuno ya estaba me encontré a Sam quién me preguntó si ya quería desayunar le respondí que si pero que antes me preste el botiquín para poder curarle las heridas a Damián y así fue me dió lo que le pedí, al regresar a la sala allí estaba él quejándose del dolor.

-Ya deja de quejarte por algo que tú mismo te lo buscaste -Hablé.

-Alisa así soy yo ¿Qué quieres que haga?

-Qué uses la cabeza, no vale la pena llegar hasta los golpes con alguien y mucho menos con un amigo, la violencia no es la solución Damián -Empecé a sacar algodones para ponerlos en alcohol y los pasé por las heridas para limpiarlas a lo que Damián hizo un gesto de molestia.

-Alisa ¿Podrías tan solo limpiar con el algodón seco?

-No.

-¿Por qué no?

-Porque entonces no estaría limpio.

-Hay está bien continúa.

-Y bueno cuéntame ¿Qué pasó con las pruebas que se perdieron?

JUNTO A TI ✔️Where stories live. Discover now