Nacido para donar (YOONMIN)

Capítulo 17

Park Jimin, o Jamie como preferiría que sus amigos la llamasen había sido una niña muy amada al momento de su nacimiento, pero desde ese las enfermedades comenzaron aparecer, los médicos habían dado tan pocas esperanzas a su vida y no era como si pudieran perderla y tener una más, pues la madre enfermó de gravedad y como resultado quedaron secuelas que no le permitirán albergar vida de nuevo.

La niña sobrevivió más de lo que se esperaba, pero cuando cumplió 3 años los verdaderos problemas iniciaron, aun así, nada justificaba el haber tomado a un inocente para mantener a otro, que creció para seguir los mismos errores de esos adultos.

Jamie ya era toda una mujer ahora, pero sus problemas de salud no habían mejorado por completo, una afección cardíaca había colocado un reloj sobre su cabeza y ella no estaba lista para irse, por lo mismo había estado siguiendo a ese hombre y aprendido un poco su rutina y la suerte pareció colaborar porque esa mañana ni Jimin, ni Yoongi aparecieron.

La chica acomodo su cabello antes de entrar a la cafetería y al hacerlo ojeo esta para encontrar al que necesitaba. Aquel sujeto estaba atendiendo algunos clientes, pensó un poco como debía de saludarles, pues ella no lo había planeado, pero el cielo pareció quererle un poco más, pues Hoseok giro viéndola y saludándola con una sonrisa, ella se la respondió y fue directamente a una mesa.

—Que corrientico—. Susurro observando el lugar con fastidio antes de que Hoseok llegase a ella.

—Hola—. Saludo Hoseok a la chica. —¿Qué tal tu tobillo? —. Pregunto y ella sonrió sin enseñar sus dientes, pues se había olvidado de eso.

—No fue nada grave, ya estoy mejor—.

—Qué bueno—. Dijo Hoseok. — Y, ¿veras a tu hermano? —. Le pregunto y ella le miro confundido, pidiéndole con la mirada y dándole una señal sin hablar para que se sentara con ella.

—¿Verle? ¿Por qué? —.

—¿No supiste? —. Le pregunto Hoseok.

—No ¿Qué paso? —.

—Tuvo un accidente—. No, no estaba preocupada, pero si sorprendida, aun así, si tuvo que fingir un poco.

—Yo—. Dijo con ese rostro dulce fruncido en confusión. —¿Cómo? ¿Cuándo? —. Realmente no estaba enterada. —Creo que debería de ir a verlo, pero, no sé, no creo que sea buena idea—. Quizás era buen actriz, o el chico muy ingenuo, pero le había creído.

—¿Ustedes no se caen muy bien? —. Se animó a preguntar Hoseok.

—¿Se nota? —. Pregunto la chica con una sonrisa nerviosa. —Jimin es alguien, bueno, es un poco malo—. Dudo en sus palabras.

— Un caprichoso—. Ella sonrío al oírle.

—Lo es, siempre fue así—.

—¿Así como? —.

—Siempre las cosas tenían que hacerse como él quisiese, Jimin no es alguien bueno—. Mintió observando como Hoseok parecía creerle. —Y estoy preocupada por tu amigo—.

—Preocupada ¿Por qué? —.

—Bueno—. Ella observo el alrededor con desconfianza. —Sé que obligo a tu amigo a que se casaran—. Cuenta mientras su voz sale mucha más baja de lo normal. —Me sorprendió el que se casaran, aunque no el que Jimin hiciera hasta la última cosa para conseguir lo que quería, siempre es así, y lo que no puede tener es lo que más anhela, es alguien de corazón grande—.

—No estoy entendiéndote—.

—Jimin no ama nadie, siempre hace esto—.

—¿Cómo que siempre? —.