𝐁𝐞𝐥𝐥𝐚𝐭𝐫𝐢𝐱 𝐊𝐫𝐮𝐦¹ © ┊ ᵗʰⁱʳᵈ ᵍᵉⁿᵉʳᵃᵗⁱᵒⁿ [Terminada]

𝖝𝖎𝖎𝖎. sᴀʟᴀ ᴅᴇ ʟᴏs ᴍᴇɴᴇsᴛᴇʀᴇs.

Cuando el padre de Albus le prohibió juntarse con Scorpius; Ruby y yo tuvimos que turnarnos para estar con alguno de los dos sin que ninguno se sintiera apartado. Pero cada vez se volvía más difícil; estar con Albus era casi imposible, siempre se quejaba y decía cosas en contra de su padre. Sí era cierto que yo también estaba enfadada con el señor Potter por lo que había hecho, pero no dejaba de ser su padre. Y estar con Scorpius era soportar constantemente tres palabras; "Extraño a Albus".

Yo también extrañaba estar con mis tres mejores amigos juntos, pero no había otra cosa que hacer, el señor Potter había amenazado a la directora McGonagall con echar el colegio abajo si no cumplía sus órdenes. La amenazó nada más y nada menos con utilizar la fuerza del ministerio en su contra.

—¿Te sientes bien? —murmura Tomas a mi lado.—Estás muy callada.

—Quiero encontrar una forma de que Albus y Scorpius puedan estar juntos sin que McGonagall lo descubra.

—¿Cómo crees que McGonagall puede vigilarlos?

—Escuché sobre un mapa que era usado por los que no tenían buenas intenciones, pero sólo eso.

—Ah, el mapa del merodeador. —dice restándole importancia.

—¿Cómo sabes de él?

—Lo usaba con James y Fred en mi primer año. —explica.

—¿Ustedes eran amigos? Estoy más confundida que nunca. —sopeso.

—Sí, pero luego empecé a frecuentar con Atena, y ellos con René, quizá eso lo estropeó. —dice como si estuviese en trance. —En fin, el mapa tiene trazadas casi todas las habitaciones, pasadizos secretos y pasillos de este castillo.

—¿Casi todos? —inquiero ansiosa, odiaba que la gente hiciera las conversaciones más interesantes de lo que deberían ser.

—Hay una sala... Que va y viene. —susurra. —No está en el mapa. Fred quiso adaptarlo en su momento, pero, ¿qué mejor que una habitación que nadie conoce?

—¿A qué te refieres que va y viene?

—A eso, que no siempre está.

—¿Y cómo hago que se aparezca?

—Pues, se aparece frente a los que la necesitan de verdad, así que debes necesitarla profundamente, si es así, la sala se aparecerá.

—¿Estás seguro que no se ve en el mapa?

—Completamente, Marie.

—¿Y dónde está?

—En el séptimo piso, justo frente al tapiz de Bárnabas el Chiflado. —susurra.

Fui en busca de Ruby, necesitaba hacer que la sala se apareciera. Subimos corriendo hacia el séptimo piso y nos colocamos justo frente al tapiz.

—¿Y ahora qué? —pregunto mirando la pared. —¿Le hablamos?

—No, tonta. —responde rodando los ojos. —Ella debe saber nuestra necesidad, una lugar donde Scorpius y Albus puedan reunirse sin ser descubiertos. —cierra los ojos delicadamente, delicadeza que no imaginé que tuviera.

Entonces empieza a aparecer una puertecilla y sin dudarlo Ruby giro el picaporte para entrar. La habitación era pequeña, pero tenía un sofá y un par de muebles individuales frente a una chimenea, lo suficientemente agradable y acogedor para nosotros cuatro.

—Si ésta sala no aparece en el mapa, McGonagall nos verá desaparecer justo aquí, hay que encontrar la forma de que alguien la distraiga por un momento mientras Scorpius y Albus desaparecen misteriosamente del mapa. —comenta y ambas nos quedamos pensativas.