Versos fríos [EN EDICIÓN]✔️

2. Miedo a la soledad

Dalia.

—déjame ver si te entendí... Newt te llevó a la casa de su familia y luego discutiste con su mejor amigo... ¿cómo dices que se llama?

—Kyle. Y es un cretino.

—¿de casualidad es Kyle Hinton de quien hablas?—preguntó Marcus.

—yo que voy a saber su apellido—repliqué.

Marcus me miraba impaciente. Estábamos en mi inmenso e inoficioso apartamento mientras él me obligaba a contarle los detalles de mi salida con Newt.

—si es Kyle Hinton déjame decirte que cometiste un error.

—¿y quién carajos es Kyle Hinton y por qué le das tanta importancia?

—es uno de los mejores editores de videos y voces. Hace trabajos para muchos famosos que quieren arreglar su voz y que sus videos de YouTube sean interesantes.

—eso da igual, tenemos a Jack.

—¡ya no tenemos a Jack! Por si lo olvidas, lo despediste hace más de un mes porque te dijo que debías verte alegre en el video de open book, le gritaste y él dijo que no soportaría más tus abusos así que renunció pero luego le gritaste que él no renunciaba sino que tú lo despedías—verdad. No lo recordaba—. Tu temperamento nos ha costado demasiado y ahora estaba a punto de contratar al que edita los videos de Newt, Kyle Hinton, pero al parecer es el mismo al que trataste mal anoche.

—él tampoco es un tipo muy dulce que digamos—repunté con ironía.

—no me interesa. Hoy saldrás con Newt y esta vez hablo en serio. Irán solos y luego que investigues si su mejor amigo es el mismísimo editor de videos, en caso de que lo sea, le ofrecerás una disculpa por tu maldito comportamiento.

—¿por qué tan preocupado por las disculpas? Antes no pasaba nada si decía algo malo y ahora me veo obligada a hacer esas estupideces. Hasta me obligaste a despertarme temprano porque vamos a ofrecerle una disculpa al fotógrafo de Versace.

—¿vamos?—inquirió con una risa sarcástica—. Vas a ofrecerles una disculpa, ayer llamaron y me dijeron que ya no serías una de las modelos de la marca.

—¡perfecto! ¡Así no tendré que matarme de hambre para tener un cuerpo perfecto!

Marcus se detuvo y me observó con la misma expresión de compasión que tanto odiaba verle, la misma de ese día cuando le tiré el zapato al fotógrafo.

—no me digas que lo estás volviendo a hacer—suplicó con la mirada gacha.

—no lo he vuelto a hacer, ¿contento?

—Delilah...—odiaba que me llamara por ese nombre.

—cállate. Vámonos ya, dijiste que debo ofrecerles una disculpa a Versage y en dado caso a Kyle.