Capítulo 5. Parte de este equipo.

5.1K 590 189
                                    



Si bien el día parecía un completo éxito, la noche ofrecía todo lo contrario. Me sentía confundida y también frustrada. Acorralada mucho antes de que yo me diera cuenta y anclada a este nuevo mundo. Katsuo Mikrograans, un multimillonario empresario, dueño de una compañía exitosamente rica me había invitado como si nada al lanzamiento de su nuevo programa. Las cosas más imposibles me estaban ocurriendo en una sola semana y mi mente ya no podía más con esto.

Es como si todo fuera un muy mal chiste y yo el motivo de burla. Por más que intentara no lograba concebir alguna cosa positiva. Mi mente no trabajaba como es debido y simplemente daba vueltas como una carrera en circuito cerrado a todo. Estaba sentada en la esquina del viejo colchón y April dormía como tronco del otro lado. Suspire por lo bajo de una forma larga y frustrante. Miraba a un punto neutro en aquella oscura y extraña habitación, si pudiera llamarlo de algún modo. No podía más. Si seguía dándole vueltas a todo el asunto estaba segura de que colapsaría en ansiedad y estrés.

Salí por segunda vez de ese claustrofóbico lugar. Los chicos habían salido a patrullar, al menos eso fue lo que dijeron antes de irse y todo resultaba más vacío de alguna manera. Casey se había ido de nuevo por algunos asuntos de su trabajo, supongo que él ya iría a su departamento a dormir.

Suertudo...

¿Qué debía hacer? Era estúpido si me iba, para empezar ni siquiera sabía aún bien que túnel tomar o a donde dar vuelta, por lo que podría perderme y no tenía muchas ganas de otro problema. Llevaba un short de tela gris y traía mi sudadera negra. Estaba descalza y podía sentir el frío suelo que retumbaba ante el movimiento de la superficie, lo suficientemente fuerte, o el agua de las grandes tuberías oxidadas de un color cobre. No estoy segura de que sea muy higiénico estar descalza en el drenaje, pero ya lo había hecho y tampoco estaba de muchos ánimos. Cada paso era un pequeño escalofrío que recorría como destello mi cuerpo. Hacía algo de frío y el suelo lo resentía en mis pies, cerca de los dormitorios de los chicos se veía una clase de pequeña piscina con un tobogán que se iluminaban por luces azules, que parecían estar debajo del agua, me acerqué a ella y tenté ligeramente el agua. Era tibia y estaba tan clara, no me atrevería a llamarla agua potable, pero se veía limpia a simple vista y no tenía un olor putrefacto como las aguas negras deberían oler....

Si hay algo que amo es el mar, siempre su simple recuerdo me trae paz y lo más cercano a él que puede tener una chica de ciudad es una piscina. Me senté en la orilla y metí ambas piernas en ella. Pataleaba ligeramente a un ritmo lento, casi al mismo tiempo que mi pesada respiración. Miraba el agua moverse creando ondas que se alejaban de mí. Todo esto era en vano, aún el sordo sonido del agua era inútil para apaciguar mi sentir, agaché mi cabeza perdiéndome en las luces debajo de esas cristalinas ondas.

- ¿Te encuentras bien? - escuché una voz que me sacó de mi pequeña burbuja. Cuando volteé me encontré con dos ojos de un azul tan puro como el de la piscina. Era Leonardo.

-Lo siento, pensé que no llegarían tan temprano, yo solo...- me comencé a levantar mientras él caminaba hacia mi dirección.

-Tranquila, tienes mucho en mente- me quede estática al escucharlo - ¿No es así? Cuando April nos contó lo que hiciste no te veías muy bien que digamos y tampoco hablaste mucho con Mickey- al parecer era más observador de lo que pensaba o yo muy obvia...

-Bueno yo...- mire otro lado, realmente no sabía cómo responder, me había leído como a una señal de tránsito gigante, imposible de no ver. Él se quedó del otro lado de la piscina -solo estoy pensativa... eso es todo- ni siquiera yo podía convencerme.

- ¿Y? - su voz era cautelosa.

-Y.... ¿Dónde están los demás? - mi intento de cambiar el tema era algo patético, pero tenía cierta verdad, ¿Cómo el "líder" del equipo se encuentra aquí sin ellos?

(TMNT) Desde las sombras te protejo Onde histórias criam vida. Descubra agora