🍃 PRÓLOGO🍃

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-Lena, Lena, Vamos a jugar -la dulce voz de mi pequeña hermana, llamándome a lo lejos en el parque, retumba en mis oídos -Apúrate, no seas lenta -dijo entre risas.

El día estaba hermoso. Era primavera, y solo sentir el cálido sol en mi rostro me llenaba de tranquilidad.

Justamente eso es lo que necesitaba; después de la pelea de mis padres en casa, me vi obligada a traer a Cloe, a pasar lo que quedaba del día en el parque, por esa razón.

-¡Cloe, no vayas tan lejos, espérame! -empecé a caminar más rápido hacia la dirección de mi hermana.

Pero mientras más me acercaba a ella, más se alejaba. Parecía que no lograría alcanzarla, que por cada paso que daba, ella se alejaba tres.

El día se empezaba a nublar, de repente ya no había nadie en aquel parque.

El viento era fuerte, veía cómo los árboles danzaban con furia al compás del mismo.

-Cloe, no corras, te harás daño. Tenemos que irnos, mamá va a notar que nos fuimos... -Cloe, se queda parada de espaldas, inmóvil... como si estuviera viendo algo frente a ella. Pero no logro descifrar qué es

» ¿Cloe?

Mi voz se escuchó como un gran eco, aunque estuviéramos en pleno aire libre, se escuchaba una y otra vez "Cloe, Cloe, Cloe"

Una ráfaga de un fuerte viento hizo que me obligara a tapar mi rostro con ambas manos

Pasaron unos segundos, solo unos míseros segundos...

Al sacar mis manos...

Ella ya no estaba.

"Es tu culpa" esas palabras se repetían una y otra vez en susurros.

-¡Cállate! ¡Déjenme en paz! -grité, aunque no sé exactamente a qué o a quién. Solo quería que se callaran, solo quería que no me lastimaran más.

"Ya debe estar muerta"

"Lleva más de un año desaparecida"

"Fue culpa de ella"

Esas voces.

Esas malditas voces que me carcomían la cabeza constantemente desde aquel día.

"Se ve que no la quería"

"Mira como se queda ahí sin hacer nada"

-¡BASTA! -grité.

Y entonces desperté. Era solo un sueño, solo otra estúpida pesadilla que me recordaba mi error. Una pesadilla que me llenaba de más culpa, más culpa de la que ya cargaba...

Había perdido a mi pequeña hermana y, que desde ese día, lo único que anhelaba era encontrarla.

Lo único que anhelo, Cloe; Es encontrarte.

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