Capitulo 25: Fuera de Juego

4.4K 586 50
                                    

Catalaia Winchester

No se porque pero sentía que aquella vez si había hablado en serio, Nathaniel se haría cargo de Odette y eso me daba cierta paz. Dentro de toda aquella incertidumbre, aún había tiempo para festejar el amor. Tocaron la puerta de la casa y Jade hizo pasar a Alice. Ella estaba más panzona que yo. Su visita me había tomado totalmente por sorpresa pero me había encantado volver a verla.

— Hola, ¿No te pillo ocupada?

— Para nada, estaba leyendo un libro.

— Vengo..., bueno aunque seamos las dos tercas y orgullosas eres mi mejor amiga y eso no va a cambiar jamás. Vengo a preguntarte si quieres ser la madrina de mi boda.

— ¿Que? Claro que sí, me dará mucha ilusión ser tu madrina de bodas. ¿Cuando te casas?

— Un mes, todo tiene que quedar perfecto en treinta días. Estoy muy ilusionada, no tienes idea de cuánto.

Sonriendo suspire

— Me imagino, casarse debe ser bien bonito.

— ¿Cómo vas con el embarazo?

Encogí los hombros

— Pues..., la verdad algo cansado. A veces me dan unos dolores terribles de cabeza y la visión la pierdo en ocasiones. Eso sin contar los vómitos interminables.

— Cata eso no suena bien, ¿Le has dicho a Nathaniel?

— Para nada, es un exagerado y ya luego me quiere llevar al hospital. Es parte del embarazo.

— Te ves pálida

— Estoy bien, ahora lo importante es tu boda. Me da ilusión poder ser la madrina y todo eso de los preparativos de una boda me encanta.

— ¿Y tú para cuando te casas?

La sonrisa se me borró del rostro y tornandome melancólica respecto a un tema que Nathaniel y yo no tocaremos nunca. Nada me haría más feliz que ser su esposa pero él en cambio nunca había dado indicios de querer lo mismo.

— No creo que me case. Nathaniel..., creo que no tiene en mente eso para nosotros.

— ¿Por qué lo dices? Ya hasta le vas a dar un bebé.

Encogí los hombros sin tener una respuesta concreta.

— No lo se, y la verdad tampoco creo que lo necesitemos. En fin, ¿cómo se va a llamar tú bebé?

— Hemos decidido que Kyle se escucha muy bien.

Mirando mi vientre preguntó la misma cosa.

— ¿Cómo se llamará el tuyo?

— Pues si es niño, Nathan y si es niña Eleanor.

Sonreí mirándola y la verdad me daba mucho gusto que al final haya encontrado a otra persona que le quitara de la mente a Bruce. Ella juraba estar enamorada de él pero él en cambio solo la utilizaba a su conveniencia.

— Me alegro que por fin hayas logrado dejar a Bruce atrás. No tienes idea lo preocupada que estaba. Es un hijo de puta, no veía el día en que te alejaras de él.

— Pues es que Ray es..., el me enamoro como tonta. Jamás pensé que terminaría teniendo un bebé y casándome.

Ambas reímos y asentí con la cabeza

— Decías que jamás tendrías bebés porque no te gustan los críos. Y mira ahora, toda emocionada por la maternidad. Por cierto, quería pedirte que retomaras tu papel en el musical.

Después de Tí Where stories live. Discover now