Capítulo 2

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Llegaron las vacaciones de verano y los primeros meses fueron relajantes para Lena. La familia Danvers se habían ido a National City para que las niñas, sobre todo Kara, pudieran disfrutar de sus días de verano con su padre. Aunque esos días sin ajetreos terminaron siendo un muermo hasta para Lillian. Echaba de menos escuchar a su hija gritar en su cuarto o por el jardín.

Lex y Lena pasaron el tiempo estudiando y planificando los posibles futuros que le deparaban cuando terminaran el instituto, sobre todo su hermano ya que cada vez estaba más cerca de cumplir sus metas, aunque todavía le faltaban los cuatro años de universidad.

Su hermano haría cualquier cosa para entrar en la universidad de Metrópolis como lo hizo su padre, pero no sabía qué carrera escoger. Gracias a sus notas altas podría barajar cualquier posibilidad. Por un lado, le llamaba la atención la medicina, por otro lado, la tecnología y negocios y, finalmente, psicología. Y se aclaró cuando Lena le recomendó que estudiara algo que ayudará al ámbito de esas tres: llegar a tomar un imperio, al fin y al cabo.

Así que optó por administración y negocios para empezar desde cero, yendo poco a poco y tomar la empresa que le pertenecía: LuthorCorp.

En cambio, Lena, también dadas a sus notas altas capaz de escoger cualquier cosa, no tenía ningún sueño por cumplir. No le llamaba la atención ninguna de las carreras, incluso le pidió ayuda a su madre.

Lillian siempre había pensado que Lena, al ser tan educada, meticulosa, ordenada y perfeccionista, la veía como si fuera una mujer ejecutiva, una abogada o incluso podía llegar a ser algún miembro del Estado. Lo único que sí tenía claro es que quería ir a la universidad de National City ya que sus amigas también irían allí, sobretodo su mejor amiga Sam.

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Alex y Kara, al ser de National City, no tenían muchas dudas a dónde ir. Alex tenía muy claro que quería ser: agente de policía. Pero el problema era Kara: le costaría más elegir ya que sus notas no eran exactamente extraordinarias como las de Lena, ni siquiera como las de su hermana Alex. Así que se dijo a sí misma que cuando llegara el momento, lo decidiría a última hora.

—¿Y qué pasa si hay algo que te guste y tu nota no alcanza porque lo decidiste a última hora? —preguntó su hermana dándole un codazo.

—Pues podría optar una beca deportiva y así le ayudaría con sus notas para acceder a cualquier universidad... que eso se te da bien —interrumpió su padre dejando los platos en la encimera y mirando a Kara que asintió con una sonrisa.

—Eso, tú motivala a que no estudie y sacrifique su tiempo en tonterías en vez de buscar lo que realmente le puede gustar —gruñó Alex mirando a su madre, pero ella no estaba a la labor de discutir.

—Solo es una opción —Jeremiah encogió de hombros.

Kara simplemente asintió terminando de comer como si fuera el último plato del día. Lo último que quería hablar era sobre el futuro ya que ella vivía el presente. Terminaron de comer y se dirigieron todos juntos al salón. Alex miraba a su hermana, pensando en que iba a estar más alegre ya que siempre había pedido venir nuevamente a National City con su padre, pero la notaba ida. Así que aprovechó la oportunidad de meterse con ella.

—¿Echando de menos a Lena? —preguntó casi susurrando.

—Hum... —la rubia frunció el ceño y asintió sin pensarlo ya que estaba concentrada en la tele. Alex se echó a reír y Kara la miró sin entender, hasta que se dio cuenta de la pregunta que le había hecho—. ¿Qué? No —se apartó de su hermana levantándose y dirigiéndose hacia su cuarto.

Había negado con la cabeza, pero le costaba admitirlo; lo único que echaba de menos de Midvale era a la pelinegra. Todo el poco tiempo que han estado juntas en Midvale hizo que la difícil estancia de la rubia fuese más amena. Cuando dijo que le alegraba los días lo decía en serio, incluso pensó en dejar de meterse con ella, pero sabía que, si lo dejaba de hacer, Lena seguiría siendo un muermo y necesitaba salir de ese ámbito. Por otro lado, también le gustaba sacarle de quicio.

Vecinas incontrolables | SupercorpDonde viven las historias. Descúbrelo ahora