Capítulo 26

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—¿T-t/n?—preguntó tartamudeando.

T/n se quedó en shock. Las inmensas ganas que tenía hace unos segundos de ver a Yoongi se fueron desvaneciendo lentamente al verlo. Su rostro se veía apagado, sus ojos reflejaban tristeza, sus labios se veían destrozados, como si se los hubiera estado mordiendo.

—Yoongi...—susurró la chica mientras se iba acercando a él.—¿Qué pasó?—le preguntó triste.

Yoongi la guió hasta una habitación. T/n sintió que su respiración se detuvo unos segundos ante la escena. Una mujer estaba recostada en una camilla, parecía estar inconsciente y lo único que alcanzaban a escuchar era el pitido del aparato conectado al cuerpo de la mujer.

La chica se quedó viendo, más no mostró ninguna expresión facial, la suya también era vacía aunque estuviese totalmente desconcertada.

—Te presentó a mi mamá...—soltó Yoongi suavemente. En su temblorosa voz se alcanzaban a identificar las ganas que tenía el chico de echarse a llorar en ese preciso instante.

T/n prefirió no decir nada, en vez de eso miró al chico a los ojos y sin la necesidad de pronunciar una sola palabra lograba que Yoongi supiera lo que pensaba en ese momento; la mirada de ella preguntaba a gritos "¿Cómo sucedió?"

Yoongi comenzó a sentir como sus lágrimas recorrían lentamente su rostro, secándose ligeramente en el camino y dejando una sensación de picazón en su piel.

(Para mejor experiencia escuchar Arms de The Paper Kites.)

T/n se acercó a él y lo abrazó.—Tranquilo...—le murmuró al oído.

—Estoy bien...—intentó de detener el abrazo y quería retener con todas sus fuerzas las lágrimas que lentamente se formaban en su párpado inferior.

—No, no lo estás...—T/n lo abrazó incluso más fuerte.

—Si ya lo sabes, ¿para qué preguntas?—dijo Yoongi entre risitas.

Con solo escuchar esas palabras, T/n recordó la vez en la que estaban en el parque, cuando se conocieron por primera vez. Se acordó del momento en el que ella estaba rota por su papá y cómo Yoongi se quedó con ella a hacerle compañía.

Ahora era su turno. Ahora le tocaba a ella ofrecerle su compañía.

—No te preocupes, solo suéltalo.

Con esas palabras bastó, fueron suficientes para que Yoongi comenzara a llorar sin consuelo. T/n sentía cómo los pulmones del chico trataban de respirar decentemente y le dolía mucho escuchar al chico llorar tan desesperadamente, pero sabía que solo podía hacer esto, no podía hacer más que hacerle compañía.

Yoongi también fue levantando lentamente sus brazos para rodear a la chica fuertemente con ellos. Su alma estaba destrozada y T/n estaba llena de preocupación; ¿Qué pasó para que Yoongi estuviera así de roto?

El chico siempre había ayudado a T/n cuando ella lo necesitaba, por eso no dudó en salir corriendo a ayudarlo; se dio cuenta de que si no se hubiera fugado, probablemente Yoongi estaría aguantándose, forzándose a no sentirse triste.

A T/n le alegraba poder estar ahí para él, para que tuviera un hombro sobre el cual llorar, así como Yoongi ya lo había hecho antes. El momento era tan melancólico que hasta a la propia T/n le daban ganas de llorar, incluso logró soltar una pequeña lágrima pero jamás se apartó de Yoongi.

Se quedaron bastante tiempo así y cuando Yoongi logró sacar su frustración y tristeza en llanto, ambos se sentaron en un sillón en la habitación y se miraron por un tiempo, queriendo asegurarse de que el otro se encontrara bien, perdiéndose en el brillo de sus ojos.

Los abrazos son mágicos, cuando estás ante una situación difícil y quieres ayudar a esa persona, lo más sencillo que puedes hacer es mostrarle tu apoyo y afecto con un abrazo. Ese era el caso de T/n. Solo eso podía ofrecerle a Yoongi en ese momento; solo podía ofrecerle sus brazos, esperando que él los aceptara.

De repente llegó un doctor con un libreto. T/n y Yoongi se levantaron rápidamente y preguntaron desesperados por el estado en el que se encontraba la señora Min.

—Fue por exceso de alcohol.—aclaró el doctor, haciendo que T/n se sorprendiera.—Su hígado esta bastante dañado y al parecer quedó inconsciente por falta de control en la presión arterial.

Yoongi no se extrañaba tanto de que su mamá estuviera en ese estado por el alcohol, es más, no pensaba que era la culpa de consumirlo en exceso, sino que él mismo era el culpable. Si no fuera por mí, mamá no estaría así, pensó.

T/n supo de inmediato que Yoongi sentía que el mundo se le venía abajo, así que tomó la mano del chico, la sostuvo fuerte. No tardo en sentir que la mano de Yoongi estaba igualmente fuertemente entrelazada con la de ella, incluso llegó a sentir el calor de su piel al rozar sus brazos.

Así fue como el chico ya no se sintió solitario, sentía que T/n iba a estar con él, que no lo dejaría y que saldrían de esto juntos.

—Gracias, doctor.—dijo Yoongi bajando la mirada a sus pies.—¿Cuándo cree que pueda darla de alta?

—Es algo bastante delicado, tendrá que estar hospitalizada por un buen tiempo, también esperamos que salga pronto de esto.

—Bien, gracias.—el chico y T/n hicieron una reverencia para despedir al doctor y luego regresaron a sentarse al sofá.

El ambiente era muy pesado, el aire que entraba por la ventana llegaba a hacer que a T/n le dieran escalofríos, Yoongi seguía mirando al suelo, tenía demasiados pensamientos. Pero el principal era la repetición de palabras que aseguraban que él era la razón detrás del problema de su mamá.

—Oye...—la voz de T/n a penas se alcanzaba a escuchar entre el sonido del aparato y los pasos del personal caminando de un lado para el otro.—me duele un poco el... ah....—T/n señaló sus manos todavía entrelazadas.

Yoongi se espantó y de inmediato soltó a la chica, viendo cómo le había dejado ligeras marcas en la piel de la gran presión que hizo en su mano.

—Lo lamento...—murmuró, dejando en claro su nerviosismo al momento en que sus mejillas comenzaron a sonrojarse.

—No te preocupes...—dijo T/n calmada.—Si quieres, puedes darme un abrazo en vez de eso...—dijo algo ansiosa.

Yoongi la miró y sin hacer ni un ruido tomó a la chica entre sus brazos, al igual que ella lo tomó a él.

Los brazos de Yoongi eran el refugio de T/n, en ellos podría quedarse tranquilamente dormida; eran tan cálidos, suaves y firmes. Sentía que nada podría hacerle daño estando entre ellos. Le encantaba esa sensación, ese confort que sentía estando al lado del chico.

Por alguna razón ya no lograba percibir la fría aura que antes tenía Yoongi, en vez de eso, ahora solo podía percibir ternura, afectuosidad... quizás amor...

Ambos cerraron sus ojos. Yoongi podía sentir como sus párpados insistían en cerrarse de una vez por todas y así fue. T/n se percató de que la respiración del chico estaba sumamente tranquila y a ella lentamente le fue entrando el sueño también.

Quiso susurrarle algo antes al chico para dejar en claro una cosa..:

Aquí estoy, Yoongi y no me iré por nada en el mundo...—

Imagina con Suga; I Need U... [Suga y Tú]Where stories live. Discover now